Como Prostituta

~CAPÍTULO 6~Dulzura amarga

-¿Dónde está (TN)?—preguntó su esposa—

Donghae mordió su labio, nervioso pero a la vez completamente excitado.

-La mandé a comprar un fluorescente—Contestó DongHae, pensando rápido y acercándosele sin quitar la vista de ella—

-¿Para qué? Si tenemos aún-- Contestó ella seria y cruzando los brazos, observando a su esposo, enseguida dirigió la mirada a sus pantalones y notó la erección de él.

-Porque quiero estar a solas contigo—contestó DongHae llegando hasta ella y llevando la mano hasta su mejilla, rosando los labios de Yura mientras emitía gemidos—Quiero tenerte ahora—

Ella lo observó seria—Donghae, no es momento para esto—

-Lo es—dijo él sujetándola de la cintura para apegarla a su cuerpo y presionándola contra su cuerpo mientras la besaba con desesperación, buscando a que accediera. Ella se opuso al principio, pero Donghae presionaba su erección en el muslo de Yura, la giró de espaldas contra la pared y presionó contra sus glúteos, haciéndola gemir y complaciendo a Donghae. Su esposa había empezado a acceder.

De inmediato sujetó el polo de ella y lo tiro para dejarla sin él, deshizo el broche de su sujetador y la giró para empezar a chupar sus pechos, generando más placer en su esposa, haciéndola gemir y finalmente, ella accedió empezando a empujarlo para tirarlo contra la cama y subir sobre él y comenzando a quitarle la ropa.

Ambos enloquecidos y dispuestos a recordar noches en las que solo era sexo, terminaron desnudos mientras se complacían dándose sexo oral, ella estaba enloquecida, su esposo sabia como complacerla. La hacia gemir mientras mordía su clítoris, aumentando su placer sexual y jadeante sujetaba las sábanas. Donghae estaba más que loco, necesitaba follarla y quitarse las ganas que (TN) le había dejado, se ubicó entre sus piernas y sin previo a viso la penetro con fuerza, haciéndola gritar de placer y a la vez rasguñaba su espalda gritando el nombre de su esposo.

-Ahhh Eso es Donghae—pedía deseosa al sentirlo entrar y salir de ella. Las envestidas que le propiciaba eran rápidas, haciéndolo sudar y sin poder detenerse, generando que su esposa se abriera más de piernas y le diera más entrada. Por fin su esposa había accedido. Y él estaba loco, su esposa, al igual que él, sabía cómo dar perfecto placer.

Por otro lado, la pequeña (TN) mordía su rodilla, para no hacer notorio su llanto, se tapaba los oídos y tratar de evitar escuchar los gemidos de placer de su hermana con aquel hombre, que era su verdugo. Ella los podía oír claramente, enloquecidos y gimiendo de placer al tener sexo. Quería salir corriendo, pero de cierta forma le era menos aterrador que tuviera sexo con su hermana, a que la violara a ella. (TN) Dejó de llorar despacio y abrazó sus piernas para cerrar los ojos y tratar de dormir... tal vez todo era una pesadilla, y si era así, quería despertar ya.

Ella se quedó dormida a pesar de que los gemidos de Donghae y su esposa aumentaban mientras tenían sexo una y otra vez. Finalmente se recostaron es la cama, es decir, Donghae se recostó esperando que su esposa se quedara con ella, pero no; Ella se levantó del lecho y se dirigió a la regadera, dejando a Donghae solo. El miró hacia el closet, en donde estaba (TN)... su esposa le había dado lo que quería, pero él no se podía quitar de la cabeza a su pequeña prostituta... solo la quería para él, solo para él.

Su esposa se marchó y DongHae empezó a vestirse; puesto que, sabía claramente que después de que su esposa se bañase, volvería a buscar ropa en el closet; así que, tenía que sacar a (TN) lo más rápido posible. Cerró la puerta de la alcoba y se apresuró a abrir el closet, encontrándose con su pequeña prostituta, recostada y abrazando sus rodillas, con sus ojos cerrados, sus labios entreabiertos y su hermoso rostro en completa armonía inclinado hacia un lado, sus ojos se veían llorosos y estaba desnuda desde la cadera para abajo. Donghae se había quedado mudo... se había quedado observándola fijo... ella era tan hermosa.