Como Prostituta

~CAPÍTULO 47~Soportarlo todo

-¿Tratas de decirme que estás viviendo con ella?—Exclamó Eunhyuk mientras miraba atónito a su amigo—

-Así es, estoy viviendo con (TN)—

-¡Pero es una prostituta!

-¡Es mi mujer! ¡Es a quien amo! ¡Es mi (TN)! ¿Qué parte de es mi chica no has entendido?—Le cuestionó molesto. No le gustaba para nada el modo de referirse hacia su (TN).

-¡Maldita sea Donghae! Haz perdido el juicio. Estas viviendo con una mujer que se acuesta con muchos hombres, ¡Mierda! ¿En qué cabeza no cabe eso? Ni siquiera tiene ya a tu hija y no le veo el sentido de por qué continuar con ella—

-Porque la amo—Respondió echando su cuerpo para atrás del sillón ¿Eso no logran entender? La amo Eunhyuk. La amo más que a nada en esta vida. La he buscado demasiado tiempo como para darme por vencido una vez que ya la he encontrado—

-Empiezo a maldecir el momento en que te convencí para llevarte a ese prostíbulo—Donghae lo ignoró un poco fastidiado-- ¿Y tú esposa? ¿Sabe de esto?—

-Sabe que su hermana está viva y también la ha visto.

-¿Sabe que estás viviendo con ella?—

-No, no lo sabe y ella cree que estoy en un viaje por asuntos de trabajo. Por favor, no se lo digas, sabes que le puede afectar. Ella aún no está lista pero tarde o temprano tendrá que estarlo.

-No le encuentro el sentido de cambiar a una mujer como tu esposa por una como (TN). Tu esposa es amable, te cuida y te quiere, y por otro lado; la otra es una prostituta que parece no importarle cuanto te lastime—

-Pero a quien amo es a (TN) y no me importa tu puta opinión—Le gritó molesto—Ahora, si me disculpas, estoy ocupado. Por favor déjame solo—

Eunhyuk respiró hondo y se puso de pie al ver que su amigo parecía tener tapados los oídos, además de estar enceguecido por aquella mujer. Había perdido el juicio ¿Cómo era capaz de soportar que su mujer se acueste con otros hombre que no sería él?—

-Me voy—Se despidió saliendo de la oficina de Donghae y dejándolo completamente solo. Donghae llevó las manos a la cabeza, estando cansado sintiendo los ojos con sueño. Su noche no había sido la mejor de todas y sus preocupaciones lo mataban... ¿Qué estará haciendo ella en estos momentos? ¿Se atrevería alguna vez a llevar a un hombre a la casa y acostarse con él allí? No, claro que no, su (TN) no sería capaz de tanto.

Ya era tarde y la hora de trabajo había terminado, además de que hoy no había tenido tiempo de receso y había comido en la misma oficina debido a que tenían que terminar con los planos del nuevo juguete que lanzarán. Estaba cansado pero ansioso de llegar a casa y encontrarse con ella, besar sus labios y acariciar su cuerpo.

Caminó hasta el estacionamiento y abordó hasta su auto para conducir a su departamento. En el proceso decidió mandarme un mensaje a su esposa—

"Cariño, mañana volveré de mi viaje así que iré a verte en mi hora de receso ¿Vale? perdona por no ir a verte mucho estos días pero ando muy ocupado. Cuídate. Un beso"

Guardó su celular en su bolsillo e ingresó al estacionamiento del edificio en donde se ubicaba su departamento. Se dirigí al interior y tomó el elevador hasta su respectivo piso. Luego, caminó hasta su departamento, sacó y metió las llaves en la cerradura, la abrió en ingresó.

-Amor—La llamó dejando su maletín en el sofá—(TN) ya llegué. Miró a todos lados, pero en ese instante captó unos ruidos extraños. Se quedó en silencio e inmóvil, mirando hacia la ventana y rogando porque no fuera lo que le haya parecido.