Psicópata.

Capítulo 14

La señora no se encontraba en el pasillo, estaba solo, completamente. Bajé las escaleras hasta la recepción. Cerré mis ojos rogando que José se encontrara ahí para poder hablar con él. Y, efectivamente ahí estaba él.

-Hey, buenos días- José, me miró y su sonrisa fue demasiada forzada- ¿Qué pasa José?

-Anna, lo digo por que te quiero, en serio. Estás en peligro.

¿Qué?

-¿De qué hablas José?- desvió la mirada de mis ojos.- José, dímelo.

-El nuevo Anna. El nuevo vecino.

Se escuchó a mis espaldas que la puerta se abría, José levantó la mirada y vi como lentamente su cuerpo se tensaba y su mirada se llenaba de un miedo enorme, tanto que me sorprendía. Él se giró y sin más nada caminó hacia la bodega. Fruncí el ceño.
Miré hacia las escaleras, y lo único que vi fueron rizos. Rizos que se me hacían vagamente conocidos. ¿Qué tiene que ver el vecino en todo esto? Tal vez sólo está celoso. Es decir, nisiquiera recuerdo su rostro. Ósea, no cualquiera que me tope será un acosasor. José ya había estado celoso antes. Sí lo pudo estar con Daniel, lo puede estar con el nuevo vecino.

Pero por el momento no quería lidiar con los problemas de confianza de José.

¿Por qué no podía recordar esos rizos? Aaah, claro. Se me olvidaba que he estado muy ocupada lidiando con mi acosador. Bravo Anna.

Me senté en el sillón de cuero negro para esperar a Samuel.

¿Dónde estarán mis amigos? Hace tiempo que no tengo contacto con ellos. Y a Sofía no la había visto en la universidad. ¿y Daniel? Bueno, simplemente había desaparecido.

Se escuchó como se abrió la puerta de entrada y yo dirigí mi mirada hacia ella. Era Samuel.

Me levanté y él me miró. Le sonreí. Se acercó a mi, y me abrazó.

-Buenos días, Anna. ¿estás lista?- asentí, tomé mi bolso y salimos.

Caminamos hasta su auto. Me abrió la puerta. Le sonreí y le susurré un gracias.

Se subió y comenzó a manejar a la universidad.

El camino fue lleno de risas y por un mometo olvidé todos los problemas.

El día transcurrió normal, había hablado con Sofía, al parecer extravió su celular y le cortarón el telefóno. Y por eso no me pudo contactar ni nada. Y yo, seguía sin contarle nada.

La semana que entraba comenzaban los exámenes. Y estaba demasiado abrumada, apenas eran lo primeros desde que regresamos de vacaciones y tenía que sacar una mejor calificación.

Estabamos desayunando Sofía, Samuel y yo. Cuando entonces reaccioné.

Ahora todo tenía sentido. Esos ojos, los mismos del vecino. Esos rizos, los mismos del hombre con el que me tropecé una tarde. La amenaza de la primera vez que nos vimos. Todo, absolutamente todo, encajaba, de alguna manera.

Por Dios. ¿cómo pude ser tan estúpida?

Mi sangre se heló, y mi corazón latía a mil.

Mi acosador vivía en el mismo edificio que yo.

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Holaaaaaaa, siento mucho hacerlas esperar años. Perooooo, las amo. En serio. Lo único que veo en mis notificaciones es "ha votado por tu historia" muchas gracias por eso.

Faltan 5 días para MITAM. ¡estoy re emocionada!

Por otra parte, he conocido a 5 chicas que ganan boletos para Telehit. ¡Y YO SIGO SIN GANAR! Es sooooo sad.

Y por último, sigan votando y comentado chicas. Que me alegran el día.

¡GRACIAS!