Cómplices [Draco Malfoy]

13.3 Momentos Extraños

³

- Sabes, nunca voy a comprender a los hombres...- hablo Vale, justo antes de tamborilero con los dedos sobre la mesa de la biblioteca.

Había sido un día largo con muchas materias por estudiar, aunque teníamos horas libres, muchas veces se vieron ocupadas por el exceso de tareas y prácticas que teníamos que hacer para poder conseguir los hechizos no verbales... lo cual era particularmente cansado ya que tenías que tener mucha concentración para lograr tal hechizo sin que se te escapara las palabras por la boca. Aunque había sido más fácil después de practicar todas las noches con Draco.

Bueno, seguíamos yendo a la sala de menesteres para ver el enorme armario e intentar arreglarlo, es decir, Draco intentaba arreglarlo mientras yo practicaba para no quedarme dormida otra vez.
Y como todos los días, hoy también tenía esa reunión con Draco en la sala de menesteres y no me sentía temerosa por lo que fuera a pasar, solo buscaba y esperaba que llegara el momento.

- ¿Lo dices por Harry? - le pregunte mientras abría el libro de Defensa Contra las Artes Oscuras para realizar otra abundante redacción.

Valen apoyo su rostro en sus manos y me miro con un rostro de cachorrito que esta temeroso por algo o alguien.

- Si...- respondió Vale mientras veía a través de los ventanales con ligera molestia.
- ¿Porque? Pensé que estarías feliz de que él sea uno de los mejores alumnos de Slughorn... es muy bueno en pociones...- dije de manera relajada, mientras Vale miraba a todos lados como para asegurarse que nadie estuviera allí. Cuando el lugar pasó por su control, se acercó hacia mí y susurro:
- Ese es el problema... Harry no es bueno en pociones porque sea muy listo... Bueno, tampoco digo que sea un cabeza hueca, al contrario él es muy inteligente en todo lo que se propone, pero particularmente en pociones no es el mejor...- dijo Vale mientras movía las manos para explicar mejor sus palabras, pero yo sentía que estaba divagando y yéndose al extremo en vez de al grano.
- Te estás dando cuenta que no me estas explicando nada...- le dije mientras movía mis manos delante de sus ojos para que dejara de hablar por un momento.

Vale detuvo mis manos en el aire y me reprocho con la mirada.
Pero luego sonrió, soltó un largo suspiro y volvió a inhalar. Repitió el proceso un par de veces, como si se estuviera convenciendose de decir lo que tanto parecía preocuparle.
Cuando estuvo decidida a hablar, volvió a mirar a todo el lugar.
Algunas veces era demasiado cuidadosa con las cosas que comprometía con alguien a quien realmente le importaba.

- Harry tiene un libro al que le está haciendo caso... como si fuera un oráculo o un diario...- susurro mirándome como si esperara que le diera la razón y no la condenara por parecer un poco loca.
- ¿Qué clase de libro es ese? Porque yo quiero uno de esos si de esa forma tendré buenas notas en pociones...- dije intentando hacerle sonreír, pero mis intentos se quedaron en eso, en simples intentos ya que Vale se quedó con un rostro de "esto es serio" que apagaron cualquier sonrisa de mi rostro.
- Es el libro que Slughorn le dio el primer día de clases... era propiedad de un tal "Príncipe Mestizo" que era un sabelotodo en pociones... Es por eso que Harry consigue esas notas perfectas en clase, porque tiene la ayuda de ese estúpido libro...- dijo Vale con desagrado.
- ¿Y qué hay de malo en eso? Es solo un libro... ¿qué puede hacerle un poco de sabiduría? - pregunte con inocencia, pero Vale parecía preguntarse porque no entendía lo complejo y delicado que sus palabras significaban.
- Recuerdas que en segundo curso, Ginebra Weasley estuvo a punto de morir y todo por culpa de un libro... ¿Qué tal si le sucede lo mismo a Harry? - explico Vale como si todo fuera obvio, pero para mí, mi hermana estaba añadiendo mucho dramatismo a todo esto.

¿Qué podía hacer un libro?
Eran solo hojas llenas de letras... nada más...
No era para tanto...

- Hasta ahora, ese libro no ha hecho nada malo, solo ha hecho que Harry sea el mejor alumno de la clase de pociones... para mí, eso es bueno. Pero si tú crees que... - dije mientras cambiaba de página a mi libro.
- Está bien, Alexa...- me interrumpió Vale mientras soltaba un largo y profundo suspiro de cansancio-... tienes razón. Puede que ese libro no tenga nada de malo... pero aun así ¿no tengo derecho para estar preocupada por mi novio?
- Nunca dije que no lo tenías...- repuse mientras tomaba una de sus manos.