Cómplices [Draco Malfoy]

19. La Fiesta de Slughorn

Alexa Johnson

— Vas a ver... se va a arrepentir... Después de que te vea, se va a arrepentir... — afirmo Freya, quien me miraba desde el espejo, con tanta seguridad mientras ella cepillaba mi cabello con destreza y agilidad ya que faltaban unas cuantas horas para que la fiesta de Slughorn iniciara y, como decía Freya, teníamos mucho trabajo que hacer; como maquillarme, peinarme, ponerme el vestido... y todas esas cosas que hacen las chicas para ir a algún evento súper importante y elegante.

Si me lo preguntan, no quería ir...

Después de todo ¿de que serviría ir si no iba a estar al lado del chico que me gustaba?

No serviría de nada...

Solo sería otra pérdida de tiempo, ya que era estúpido e irritante...

Si hubiera sido por mí, me hubiera vestido con la primera prenda que encontrara, no importaba si era el uniforme del colegio o mi ropa de dormir...

Sencillamente, no tenía los suficientes ánimos para aparentar lo "femenina" que podía llegar a ser.

Pero, como Freya era persistente y persuasiva, no pude negarme cuando dijo que haría un "cambio radical" en mí para esta noche de fiesta.

— ¿Estás segura? Porque no creo que Draco cambie de opinión solo con verme... — repuse mientras Freya juntaba mi cabello castaño sobre mi cabeza, y me miraba en el espejo, como si intentara buscar la mejor forma de que mi rebelde melena cayera con gracia sobre mi rostro o saber si una coleta de caballo sería la mejor solución a este problema del peinado "espectacular" y "extravagante" que ella quería crear con mi cabello chocolate.

— Querida, tú no entiendes lo efectivo y manipulador que es la belleza femenina en un hombre... — respondió Freya con firmeza, como si estuviera hablando de algo que era obvio y real, algo que todo el mundo debía conocer, pero que sinceramente yo no lograba entender —... Si sabes cómo jugar con tu feminidad, con esa delicadeza que cada mujer tiene, cualquier chico, puede caer a tus pies solo con mirarlo, pestañear un poco y sonreírle... Es como una especie de magia especial que solo las chicas tenemos para utilizar a los chicos a nuestro antojo... — mire a Freya con los ojos abiertos de par en par, aun sin poder creer sus palabras, que me hacían querer reír en vez de tomarlo en serio.

Bueno, es que es algo gracioso...

"Una magia para usar a los chicos a nuestro antojo"...

En mi caso era al revés... porque Draco me había atraído con su belleza, con su forma de vivir, de pensar, hasta su forma de respirar. Me había cautivado sin que yo hiciera algo, sin que pudiera evitarlo, Y se podría decir que él usaba toda esa "magia" en mi contra.

Simplemente era débil con Draco y no estaba a su nivel para intentar dominarlo con mis "encantos", como él hacia conmigo.

Pero la chica de cabello azul—cielo, que estaba intentando transformarme en una "bomba sexy", no entendía eso, ya que el reflejo de Freya me miraba como si dijera un "No, esto no es broma, Alexa", mientras hacía risos con mi cabello, ajena a todo lo que cruzaba por mi cabeza.

—...Y cómo eres novata en ese aspecto... — continuo Freya mientras acomodaba mejor los risos que había hecho en mi cabello con tal concentración que tenía miedo de moverme y así arruinar todo ese trabajo —...Te daré algunos consejos para hacer que Draco se trague sus palabras... — tomó algunos risos de delante de mi rostro, empezó a trenzarlos para luego atar las dos trenzas atrás de mi cabeza mientras continuaba con su dialogo —... Dejarte ir con Zabini. Malfoy está completamente demente... pero se arrepentirá...— murmuró Freya a la par que tomaba lápiz de labios color rojo claro, y pintaba con ellos mis labios con tal rapidez que alguna vez yo había tenido—...Primero, tienes que...