|| Do You Remember Me? || Suga ||

.25.

Esto debe ser una pesadilla. Por favor que sea un mal sueño. Me olvido de mi pie lastimado y, a duras penas, me acerco casi arrastrándome por el suelo hasta Yoongi. Solo con ver esa pulsera negra que usa en su mano izquierda, mi corazón se quiebra en dos. Tiene medio cuerpo dentro del departamento y medio cuerpo afuera en el pasillo; la ropa sucia con tierra al igual que su rostro y sus brazos. Debajo de toda esa suciedad, tiene manchas un poco más oscuras, moretones en sus ojos, pómulos, boca y tal vez en otros lugares que no son visibles. Tiene sangre sobre su ojo pero no proviene de éste, sino de un corte sobre su ceja. Está consciente porque mueve la cabeza y hace muecas de dolor acompañadas de pequeños graznidos doloridos cuando Yoongi intenta levantarlo y llevarlo al sillón.

Yoongi lo deposita con cuidado y luego sale casi disparado a su departamento a buscar el botiquín de primeros auxilios de su madre. En tan sólo segundos, regresa con él.

- Ve a buscar agua y una toalla para limpiarle el rostro - me ordena. Voy saltando en un pie lo más rápido que puedo hasta la cocina.

Cuando le limpiamos el rostro, me doy cuenta de que tiene más moretones de los que la tierra dejaba ver y que la cortada en su ceja es más profunda de lo que parecía.

- Jimin, ¿me oyes? - Yoongi le habla para que siga consciente. Le limpia la cortada con alcohol y Jimin pega un grito seguido de un insulto. Aunque parezca raro, eso me resulta muy reconfortante porque quiere decir que está relativamente bien.

- Ya, ya, ya... no seas bebé. Es solo alcohol - lo regaña Yoongi poniéndole una venda en la herida desinfectada. Voltea su cabeza a un lado y deja a la vista más moretones en su cuello. La culpa y la ira se apoderan de mi y juro que podría llegar a matar a quien sea que le hizo esto a Jimin.

- ¿Quién te hizo esto? - le pregunto, tratando de enterrar bien adentro mío esa ira que controla mis pensamientos.

- Déjalo descansar ahora - me dice Yoongi con voz suave y posa su mano sobre mi hombro. Desvío la mirada hacia él unos segundos y cuando vuelvo a ver a Jimin, éste parece estar dormido.

Yoongi me lleva a la cocina para que hablemos y no molestar a Jimin.

- No tiene nada más que unos moretones y esa cortada sobre la ceja - voltea sobre su hombro y lo mira a lo lejos, cuidando su tono de voz. - No tiene ningún hueso roto ni nada -.

- Es mi culpa - he querido decir eso en voz alta desde el mediodía, cuando recibí la primera llamada. Las palabras atraviesan el nudo en mi garganta y salen llenas de rabia para conmigo misma. No puedo creer que sea tan estúpida de poner en riesgo la vida de los demás.

- No es tu culpa, no digas eso - Yoongi toma mi mano y la acaricia suavemente moviendo su pulgar arriba y abajo. Levanto la vista y espero encontrarme con sus ojos pero él los tiene puesto en nuestras manos haciendo contacto.

Ni él mismo cree lo que dice, puedo notarlo porque su voz flaquea un poco y además porque no me mira a los ojos. Recuerdo que cada vez que mentía, hacía esto: evitaba ver a las personas a los ojos.

De la nada, aquella voz vuelve a hacerse presente en mi mente.

"...tú, Min Yoongi, eres el siguiente"

Mi cuerpo sucumbe ante un escalofrío que recorre toda su extensión, desde la cabeza a los pies, como una mini descarga eléctrica. Esta vez Jimin tuvo suerte y no quiero imaginarme lo que le harían a Yoongi.

- ¿No será mejor que vaya a un hospital? Por si acaso - disimuladamente aparto mi mano de la suya y desvio la mirada hacia Jimin. Escucho una leve queja a lo lejos. Tal vez quiso cambiar de posición y terminó apoyándose sobre un moretón.