1900 Millas

Capítulo 25: Nena

En el momento en que escuche su nombre, aparté mi mano del cuello de su estúpida camisa, solo para mirar a Olive que parecía que estaba a punto de llorar, sin creer lo que estaba haciendo. Pero el alcohol que había en mi sólo me hacia querer golpear el rostro de Kyle con mi puño, y dejarle una marca por varios días.

-¿Que has dicho?-me pregunto Olive, poniéndose de pie y acercándose a mí.

-¿Que dije? No he dicho nada, solo quiero deformarle la cara a este idiota-grité acercándome nuevamente a Kyle, que parecía no afectarle mis amenazas, y aun conservaba esa estúpida sonrisa en su rostro. Podía oler el alcohol en el, o tal vez era el mío, no podía notarlo.

-Dijiste que yo...me llamaste tu novia.

-¿Eso dije? No lo se...hablaremos luego de eso, Olive, no es el momento. Quiero que me expliques que hacías con este idiota.

-Cálmate, hermano, no tiene que explicarte nada, al parecer no es tu chica.

-¡Cierra tu maldita boca! ¿Quién te crees que eres para hablar de nosotros? Soy más de lo que tú pudiste ser con ella.

-No lo sé, no estoy tan seguro. Al menos ella era mi novia, y no creo que se niegue a serlo de nuevo ¿Recuerdas todo lo que hemos hecho juntos, nena?

Mi furia hervía en mí, y a pesar del peso que el alcohol ejercía sobre mí, lograba mantenerme en pie. Mis manos actuaron más rápido de lo que esperaba, y mi puño chocó con firmeza la mandíbula de Kyle, dejando mis nudillos rojos y adoloridos.

-¡Trevor!-gritó Olive, en el momento en que Kyle me devolvía el golpe y mi cabeza se echaba hacia atrás.

No pude controlar mi equilibro, y mi cuerpo golpeó el suelo. Kyle salto encima mío pero antes de que lograra golpearme de nuevo, mis piernas lo empujaron a mi costado. Mi puño comenzó a golpear repetidamente su rostro, hasta que sentí dos manos que me tomaban de los brazos. Intenté soltarme, pero era inútil.

Mi corazón se paralizó cuando vi a Olive acercarse a Kyle que estaba en el suelo sangrando. Sus dedos delicadamente rozaron la herida que había dejado en su mejilla, y luego sus ojos se encontraron con los míos. Nuestras miradas estaban llenas de dolor.

-¿Qué diablos crees que estás haciendo, Trevor?

-¿Qué haces tú con él? Se supone que deberías estar aquí conmigo. Yo sé que no deberíamos haber peleado, pero ya te pedí perdón. No tienes que correr a sus brazos nuevamente.

Dejé de hablar. Los gemelos soltaron mis brazos, y por un momento creí que perdería el equilibrio y me caería. Mi pecho subía y bajaba rápidamente, intentado capturar un poco de aire. Mis nudillos ardían, y mi ojo comenzaba a doler, pero no tanto como ver a Olive junto a Kyle.

-Sabias que él estaría aquí ¿Verdad? Tú quieres volver con él, luego de todo lo que te hizo, de cómo te mintió.

La mirada de Olive pasó de dolor a intriga en cuestión de segundos.

-¿De qué hablas?-me preguntó con la voz tan quebrada como la mía.

Mire a los gemelos, y pude notar que Olive no sabía nada de lo que Kyle había hecho, y no iba a esperar un segundo más.

-Fue todo una farsa, Olive. El te mintió, nunca te quiso. Tu padre prácticamente lo contrató para que sea tu novio, y le pagaba con regalos costosos. Y aquí estas tu, curando sus malditas heridas-los ojos de Olive viajaban velozmente, primero a Kyle y luego a mí. Verla así me calmó un poco, y sólo estaba enojado hacia Kyle por ser un idiota, y no hacia Olive por estar sentada junto él-Solo quería defenderte, Olive. No quiero que te lastimen. Menos por alguien como él. No mereces que nadie te lastime. Nadie.