La Chica Nueva

CAPÍTULO 20 ∆

Miramos anonadados el lugar y ella nos señala unos sofás para que nos sentemos.

— Bueno... ¿Cómo os sentís?— todos nos miramos raros y ella sonríe.— Se lo que ocurrió con Curtis. Lo del hombre, y todo lo que anteriormente ha pasado en el internado.— Wale acerca su mano y me sube la mandíbula.

No me había dado cuenta que tenía la boca a abierta. Miro a Taissa, y por lo que se ve... Pensamos igual.

— ¿Cómo sabe usted todo eso?— pregunta Taisson haciendose el tímido.

Sin querer, se me salen unas risitas y todos me miran serios. ¿Tan malo es reírme?

— Ya veo que no has cambiado.— forma su boca en una fina línea y me mira nostálgica.

— ¿Por qué lo dice?— miro a Wale y pongo mis defensas en modo ON.

— De pequeña venías a mi casa. ¿Para qué? Para borrar parte de tu memoria.—:se responde ella sola. Espera. ¿Borrar parte de mi memoria?— Si. Es lo que estás pensando. Borrarte la memoria. Raro, ¿Verdad?— asiento en chock.

— ¿Có... Cómo me podías borrar la memoria? O mejor dicho. ¿Por qué me borrabas la memoria?— frunzo el ceño y miro a un punto fijo.

— En un principio, tu madre no me quería decir del porqué, pero poco a poco, día a día que venía me contaba algo nuevo.— mira al suelo y aprieta la mandíbula.— En realidad, yo era una de las pocas personas que sabía lo que pasaba.

— ¿Y qué es lo que pasaba exactamente?— Wale me abraza para tranquilizarlme. Sé que estaba muy nerviosa, pero no lo puedo controlar.

— Tus padres sabían lo que pasaría cuándo tuvieran a tu hermano.— Hermano...— Pero aún así, decidieron tenerlo.

— ¿Quién es su hermano?— pregunta Taissa intrigada. Como si estuviera viendo una película y quería saber el final antes de tiempo.

— Eso no me corresponde a mi decirlo.— dice mirándome.— Bueno. A lo que íbamos. Muy pocas persona por no decir ningúna pueden tener hijos siendo lo que son. Al ser tu padre hombre lobo y tu madre hechicera, todo se complicaría y podían salir perjudicado en el parto uno de los dos, o los dos.— niega.— pero no fue así. La mayoría de las mujeres mueren a no ser de la misma raza o como quieras llamarlo... Tu madre podía hacer cosas que nadie más podía hacer. Ella podía ver parte del futuro.— mi boca se abre asombrada.

El futuro...

— Mi madre... ¿Podía ver el futuro?— pregunto sorprendida.

— Podía no, puede.— subo la mirada lo más rápido que puedo y la miro seria.— Se que no entiendes nada, pero pronto lo entenderás todo. Y sobre ti.— Mira a Wale.- Tu madre también venía para algo importante...

— ¿A qué se refiere con algo importante?— aprieta el agarre y tensa la mandíbula.— Te vi en uno de mis recuerdos.— susurra algo bajo.

— Ya se que me viste... Y también se lo que pasará en un futuro entre vosotros. Lo que pasará con los hermanos.— los mira sonriendo.—  con Lily, Curtis...— miro a Lily, que se había quedado callada todo el rato. Parecía como si un gato le hubiera comido la lengua.

— ¿Cómo lo sabe? A ver... No estoy diciendo que no te crea, pero todo esto me parece un poco raro. ¿No creéis?— nos mira a cada uno.

— De pequeña, tu padre siempre iba a bares por las noches, se emborrachaba y luego iba a tu casa para pagarla contigo.— la mira achinando un poco los ojos.— Uno de esos días, llegó a dejarte inconsciente de un solo golpe. Él no te llevó al hospital o te ayudó. No. Él te dejó en el mismo lugar que te habías desmayado. Al día siguiente te levantaste con mucho dolor en la cabeza, te dolía todo el cuerpo, pero sobre todo... El corazón.— una pequeña lágrima se me escapa y Wale acerca su pulgar quitándola.— Desde ese momento te diste cuenta que tu padre no te quería y nunca te iba a querer, así que decidiste escaparte de tu casa. En esa escapada todo falló. Te encontró y te volvió a dar una paliza, pero la diferencia era, que fue mucho peor que la anterior. En ésta te dejó en coma más de tres meses. Él no iba ni a visitarte...— miro como traga saliva y Taisson se acerca a ella para abrazarla.— Tuviste valor y le contaste todo a la policía. Ellos investigaron y verificaron que era verdad todo lo que dijiste... A tu padre lo metieron preso tan solo por dos años y a ti te llevaron al internado.— se escucha un maullido de un gato y todos miramos al gato negro de ojos amarillos.— Una ves entraste al internado, toda tu vida se vino abajo. No querías tener amigos, no querías hablar con nadie, solo querías pasar desapercibida, y eso pasó hasta que llegó Cindy, que todo fue a peor. ¿O no?— me mira sonriendo.

— Cierto.— digo quitando otra lágrima.

— ¿Ahora me crees?—  Lily asiente con la cara roja de tanto llorar.— No lo he hecho para fastidiarte. Pero quiero que sepas que si estas aquí es porque te necesitan.— todos asentimos hacia sus palabras.— creáis o no, todo tiene su función, si uno muere o se lastima, es porque debe ser así...— Taissa niega y habla.

— ¿Por qué nos dices todo esto? Nosotros no hemos venido a que saques los pasados de todos. YO, he venido a buscar a mi primo. No a que una mujer empiece a decir todo esto.— se levanta de su asiento y me mira seria.

— Taissa. Por favor.— le dice Taisson cogiéndole por el brazo y agarrándola.— Tenemos que escuchar todo lo que nos tiene que decir.— le susurra.

— Está bien. Solo lo hago por ti hermano. Que quede claro.— mira a Alice. Ella asiente.

— ¿Qué sabes de Curtis?— digo movindome un poco en mi sitio.

— Él...— agacha la cabeza.— os va a costar recuperarlo. Ya puedes tener una idea de con quién puede estar, Cindy...— todos me miran esperando a que diga algo.

— Se con QUIÉN, pero no se DÓNDE.— ella muve su cabeza hacia delante y hacia detrás y se levanta.

Subo la mirada y vemos como se acerca a una estantería. Coge una foto y se acerca enseñándosela a Lily.

— ¿Es tu madre?— ella abre sus ojos y asiente intentando no llorar.- También fue amiga mía. En verdad. Todas y cada una de vuestras madres fueron y son amigas mías.— Taissa se vuelve a levantar de su asiento y niega.

— Mi madre murió en un accidente de trafico. Eso fue cuando teníamos tan solo dos años.— sus manos empiezan a temblar y mira a Taisson.— Taisson, por favor, dime que nuestra madre está murta, ¡Dimelo!— grita haciendo que me sobresalte.

— No lo está.— dice Alice convencida.— Ninguna de vuestras madres están muertas. Solo están secuestradas desde que os dijeron que habían muerto.

— Eso no puede ser...— dice Lily negando.— ¿Cómo van a llevar todo este tiempo secuestradas? Eso no pude ser...

— Sí puede ser. Antes de que ustedes nacierais, ellas ya sabían todo lo que os pasaría a lo largo de este recorrido. A veces os ponían trampas para que así llegarais a lo que ellas y ellos tenían planeado...

— Y según tu. ¿Qué tenían planeado?— pregunta Wale matándola con la mirada.

— Eso no te lo puedo decir yo. Solo les puedo decir que todo lo que han hecho con Curtis es una trampa para vosotros.— joder...

— Solo les digo, que no se crean todo lo que les digan. Curtis se encuentra en el lugar que no hayáis pensado jamás. Mi hora ya se ha terminado.— todos levantamos las cejas extrañados hasta que se escuchan unos golpes en la puerta.

— Todos nacemos con un propósito en nuestra vida, y el mío ya lo he cumplido.— se empiezan a escuchar pasos acercándose.— Se encuentra en lo alto de la montaña. Tened cuidado porque uno de vosotros saldrá herido... Habrá trampas por el camino, cuando creáis que nadie os vigila, se equivocais. En este mismo momento lo están haciendo...— se abre la puerta del cuarto en el que nos encontramos.

— Alice.— digo asustada.

Dos hombres encapuchados se acercan a ella y a la fuerza la tiran al suelo.

— Recordad que todo pasa por algún motivo, sea bueno o malo.— el hombre le da una patada en las costillas y ella ahoga un grito.— No perdáis tiempo... Os llegaran recuerdos de mi, de lo que me pasará, y en dónde me podéis encontrar, solo les dig..— no termina de hablar porque propinan otro golpe, pero ahora en la cara.— SE... SEAN FU... SEAN FUERTES...— los hombres le dan otro golpe y ella cae rendida al suelo.

— ¡Ahh!— grita Lily aterrada.

El cuerpo de Alice se empieza a convertir en ceniza y se va elevando por el aire.

Asustada me agarro con fuerza a Wale y él me devuelve el abrazo con la misma intensidad.

— Yo estoy aquí, contigo, nada te va a pasar mientras esté yo.— me susurra al oido y yo asiento. Me deja un casto beso en la frente mientras cierro los ojos con fuerza.

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Holiiiiii. Aquí tienen el capítulo.

Voten y comen. Bss