Ser una princesa

Mi mejor amiga, que tiempos aquellos!!

Acepto el trato - le digo a los estúpidos guardias.

Lo que aquellos guardias no sabían era que cruce los dedos, jejeje...acaso esos guardias no saben que estamos en el siglo 21- pensé.
Engañé a los pobres ilusos, a penas soltaron a Sofí le hice una señal y salimos corriendo, ni loca que estuviera para hacer un trato con los guardias, a pesar de que me protegen(según) a mi y a mi familia, no confio en ellos, son unos muertos de hambre que harían cualquier cosa por dinero.

Íbamos corriendo Sofí y yo, los dejamos a tras poco a poco, estaba nerviosa, que me dirá mi papá?, me castigará de por vida!!!...-pensé.

Iremos a mi casa, ahí descansarás, compráremos una casa y viviremos juntas, nunca más veras a tu padre, iremos a visitar en China a él...- me dice Sofí.

No se si sea buena idea - digo.

No te preocupes todo saldrá bien - dice Sofía.

Llegamos a su casa que es muy bonita, es de ladrillos. Entramos y me metí en mi habitación, sip, tengo mi propia habitación en la casa de Sofí!!, bueno, en realidad, es la habitación de los huéspedes, pero como yo los visito siempre se volvió mi habitación. La habitación está pintada con flores de varios tonos de morado, hay una cama muy acogedora a una esquina de la habitación.
Sofí y yo hemos hecho muchas piyamadas juntas, somos inseparables, somos mejores amigas. En quinto grado, al finalizar clases, se mudó de la ciudad y obvio del colegio, pero eso no importo, nuestra amistad es solida como roca, siempre seremos ella y yo, mejores amigas, para nosotras cuando ella se mudó fue como una prueba para probar si nuestra amistad duraría sin importar nada, pasamos la prueba y aquí estamos, esto me recuerda a aquellos tiempos de piyamadas y pruebas para probar nuestra amistad, pruebas que pasábamos juntas fácilmente. Aún recuerdo llorar cuando se mudo, como olvidar, al principio no la extrañé tanto las primeras semanas de clases, pero, luego sentí su ausencia, sentía que me faltaba algo, a pesar que tenía a mis amigas Cira, Gerardine y Fiorella no era lo mismo, la necesitaba, necesitaba nuestras largas conversaciones que parecían nunca acabar, su presencia, luego de un tiempo a prendía
a vivir sin ella, nos hablábamos mucho por teléfono, Skype, WhassApp..aprendí a vivir así, mis amigas Gerar, Cira, Fiorella, me ayudaron y así sobreviví el sexto grado sin ella y el resto de los años, claro la visite muchas veces.
Ella no lo sabe pero, a veces prefería ignorarla para no pelear, cuando peleábamos para no seguir peleando yo la ignoraba y cambiaba el tema, no me gustaba pelear con ella. Todo lo que hemos vivido juntas, nuestras travesuras y ocurrencias, que tiempos aquellos...- pensé.

Amaneció y después de pensarlo mucho le deje una carta y me fui, ella y yo teníamos planes pero, yo no podía hacerlo, debía cumplir con mi deber.

Si quiero que mi padre me de libertad debo demostrar que soy madura y que me comportaré - me dije llorando.Algún día te veré mi amor no importa que tenga que hacer para lograrlo - dije en voz alta y apretando mi puño contra mi pecho, salió la última lágrima de mis ojos y seguí caminando...