Ser una princesa

Ricardo se confiesa

Me subí a mi Volkswagen y conduje hasta el hospital. Tenía miedo de no poder detener a mi padre, la mentira me estaba consumiendo. Llegué al hospital y mi padre, por suerte, no había, todavía, ni entrado al hospital.

Papá!- grite, corrí hacia él.

Qué pasa?- pregunta mi padre extrañado.

Por qué no estás en el palacio?- dice mi padre confundido.

Debes irte, te dije que te quedaras. No puedes seguir una simple orden?- dice mi padre algo enojado.

Si puedo, solo que te vi muy cansado, quería asegurarme ya que no venías con un guardia, que estarías bien, si no es algo tan importante yo puedo encargarme del asunto el en hospital y tu te vas al palacio a descansar- le digo tratando de convencerlo de irse, estaba colgando de la cuerda floja y parecía que estaba a punto de caer.

No estoy cansado, ve al palacio, yo me encargaré- dice mi padre con un tono serio en la voz, sabia que si lo desobedecía, está vez, me castigaría, como si fuera una niña, me encerraría mucho tiempo, claro que me alimentaría, mi padre es muchas cosas, pero no un criminal.

Mi padre entró al hospital sin hacerme más caso, titube, no sabia si entrar, si lo hacia me castigaría, pero, si le contaba lo sucedido antes de que se enterara por boca de otro, me sentiría liberada de estas cadenas que siento que me asfixian cada vez más, y no me dejan ni hablar. Después de decidirme, por fin, entré y encontré a mi padre hablando con el doctor Ricardo. No pude escuchar lo que Ricardo le dijo, lo que se, es que después de lo que sea que le dijo, entró a la habitación en donde tenían a la chica que había conseguido en el baño, no pude detenerlo. Me acerqué a Ricardo, él no sabia dado cuenta de que estaba a tras de él presenciando lo que ocurría y mi padre, al parecer, tampoco.

Traidor!-le digo a Ricardo a penas me acerco a él, le pegué un gran susto, pero se lo merece por ser un bocón, eso le enseñará-pensé-.

Ahhh!!-

Coño!!! Me quieres matar de un susto?!- dice Ricardo.

Baja la voz, quieres que todo mundo se entere que te pego una niña, llorón- le digo burlándome de él.

Aclaratoria de la historia: No está bien hacer bulling (burlarse o meterse con los demás).

Ya pues y..., sabes, YO NO LE DIJE UN CARAJO!!!!- dice Ricardo alzando su voz.

Entonces, cómo.....Voy a entrar a ver que está pasando en esa habitación, algo no me da buena espina- le digo a Ricardo en voz baja.

Abrí la puerta y......