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Capítulo 15

Cuando sonó el despertador lo apagué como pude. Estaba demasiado cansada, últimamente no dormía lo suficiente. Pero aunque quería seguir en mi cama, calentita, el deber me llamaba y tenía que ir a trabajar. Salí de la habitación esperando encontrarme con mi tía Keiko, a quien no había visto la noche pasada al llegar a casa, pero no estaba, así que desayuné sola, me preparé, cogí la bici, y fui hacia la peluquería.

¿Por qué me mira esa gente?

De camino a la peluquería, me parecía que algunas personas me miraban. No era la primera vez que me pasaba, normalmente sucedía también si me ponía minifalda, pero en esos casos los que me miraban eran hombres, no chicas jóvenes con sus uniformes escolares. 

Llegué a la peluquería y me encontré a mi tía leyendo una revista.

-No sabía que te gustaban esa clase de revistas -le dije.

-¡Miyu! -dejó el café y me hizo señas para que me acercara.

-De verdad, tía Kei, ¿por qué lees eso? -cogí una silla y me senté a su lado.

-Es que mi sobrina sale en la portada.

-¿Qué? -le quité la revista y me fijé. 

En la portada de la revista se podía ver a una pareja delante de un árbol de Navidad del centro de Seúl, besándose. 

-¡Somos Taeil y yo! -exclamé.

-Eso no es todo, ve a la página tres.

Abrí la revista y ahí habían más fotos nuestras. Estábamos en todas en la calle, hablando, cogidos de la mano, o besándonos. En las páginas en las que salíamos los dos (de la tercera a la quinta), se hablaba de quién era esa chica que estaba con el más adorable integrante de Block B. "¿Habrá encontrado por fin el amor de su vida el pequeño Lee Taeil?" ponía. "¿Quién es esa chica misteriosa?" preguntaban varias veces.

-¿Por qué estoy yo aquí? -estaba empezando a entrar en pánico- Keiko, ¿qué hago en esta revista? Yo... ¿por qué?

-¿Cómo creías que sería salir con un famoso, cariño? Que, por cierto, felicidades.

Leí esas tres páginas varias veces, sin creerme lo que estaba pasando. Claro, lo habíamos hablado el día anterior, pero no pensé que nada más empezar una relación con él, yo empezaría a salir en las revistas del corazón. Al final dejé la revista y me fui con mi tía.

-No me lo puedo creer -le dije-, yo no quiero esto.

-Pues lo tendrás que aguantar si quieres estar con él- se cruzó de brazos y me miró seria-, porque tú quieres estar con él, ¿no?

-Si no quisiera no estaría en esta situación, ¿no crees?

-En fin, hablaremos de esto más tarde, ahora lo importante es que trabajes bien hoy. Pero, Miyu, llama a Taeil.

-¿Ahora?

-Quizás él no ha leído todo esto, debería saberlo.

Hice caso a mi tía y me fui al almacén, busqué el número entre mis contactos y le llamé. Contestó rápido.

-Buenos días, Miyu -me dijo, y antes de que yo pudiera contestar, volvió a hablar.- Me imagino que ya has leído lo que ponen sobre nosotros.

-Sí...

-¿Estás preocupada?

-No sé si preocupada es la palabra, simplemente... es algo nuevo para mí. 

-Pues yo sí me preocupo por ti.

-Sabes, no pasa nada, te dije que no me molestaría todo esto, ¿recuerdas? Yo tengo que seguir trabajando, así que hablamos más tarde.