a favor ➳ h.s (español) || act. lentas

.once

[este capítulo contiene uso de drogas]

-La jefa quiere esos reportes en su escritorio al final de día, Oriana -Maddie le recordó, observándola mirar su trabajo con ninguna emoción. Sólo aburrimiento.

-Vale -suspiró, seleccionando el documento en su computadora con una mirada aburrida. Sin apreciar el diseño particular que estaba mirando.

-¿Cómo son sus bocetos?

-Extraordinarios -dijo con sarcasmo-. Tipo vendimia. Algo como pescadores -ella meneó las cejas y Maddie fingió estar ahogándose. Sus risas desaparecieron cuando alguien más apareció en sus escritorios con dos tazas de café.

-¡Gracias, Amita! -Maddie aplaudió, tomando la taza blanca de sus manos con alegría. Olfateando la bebida y cerrando los ojos.

-Gracias, Amita -Oriana le dijo más tranquila, tomando su taza y compartiendo una sonrisa amable con la chica.

Amita carcajeó, y miró el arregló de flores aún en el escritorio de Oriana. -Son preciosas.

-Gracias -le echó un ojo a su amiga que prestaba atención con una sonrisa, pero había prometido abandonar el tema y estaba conteniéndose de avergonzarla frente a más personas-. Hacen que mi feo escritorio luzca bonito.

-Hablando de cosas feas... ¿Han escuchado de la nueva inversión de Alexis? -se sentó a un lado de su escritorio y se movió el pelo rubio del hombro.

Maddie se inclinó, queriendo involucrarse en el chisme. -¿No? - se rio por su frase-. ¿Que está buscando ahora?

-Ella lo llama apetito vintage -Amita meneó las cejas-. Mezclilla. Cuadros. Tejido.

-Las cosas que menos me gustan en el mundo -Maddie hizo puchero.

-Ella quiere pantalones cortos como pantaletas y camisetas de tela pesada para combinarlos -Amita explicó.

-Básicamente mis pijamas -Oriana arrugó la frente.

-Supongo -Amita dijo distraídamente-. De todas maneras ella quiere unas de esas magníficas blusas unisex, pero la diseñadora no está dispuesto a entregarlos.

-¿Cómo así? -preguntó, tomando un sorbo de su café e intentando ignorar el sabor. Prefería el té.

-Supongo que prefiere tener su propia colección privada. No siente la necesidad de patrocinar sus diseños.

-¿Tiene suficiente dinero?

-Bueno, si. Su familia es lo suficiente famosa de todas formas. Su hermano es Harry Styles -Amita resopló por la ironía.

Oriana alzó la cabeza de golpe. -¿Qué?

-Sí, el chico que invierte la compañía. Siempre va a esos malditos eventos de caridad a los que Alexis asiste. Es tan rico y sexy como el infierno.

Maddie y Oriana compartieron miradas, obviamente sin esperarse eso. -¿Invirtió en la compañía? -preguntó desconcertada-. ¿Desde cuándo?

-Sólo hace año y medio -Amita se encogió de hombros. No significaba nada.

-¿Cuánto dinero está proporcionando? -Oriana cuestionó, con los ojos ligeramente abiertos.

-Tres cuartos de millón en un sólo pago -ella arqueó las cejas.

-¿Cómo es que nunca me enteré de esto? Siempre sé cuando tenemos nuevos inversionistas. Ayudé a Alexis en las finanzas hace un par de meses -preguntó con desconcierto, mirando a Maddie que lucía tan sorprendida como ella.