cuarenta y seis | parte dos.

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Se sentía sorprendente ver todos sus diseños juntos, en 3D y con valor y significado real. Eran su orgullo. Esas eran las piezas que la habían mantenido constante. Todas las preocupaciones sobre no ser buena o lo suficientemente talentosa eran solo una memoria distante. Una que jamás regresaría.

Sus modelos estaban preparadas y el show estaba a punto de iniciar. La música retumbó y la CEO prácticamente saltó de la emoción. Estaba absolutamente enamorada de todos los atuendos escogidos para la noche. Las personas tomaban fotografías de último minuto. No se permitieron fotográfos profesionales en el backstage, por lo que Oriana pudo desenvolverse con tranquilidad por todo el lugar afinando detalles.

Ahora sí sus nervios se habían acentuado. El día había pasado demasiado rápido luego de disfrutarlo explorando con sus amigos. Kahlil y Esme se hallaban en la primera fila y algunos amigos de Britta también habían asistido. El contar con la presencia de sus mejores amigos ejercía más presión, ya que para Oriana, su opinión era la más importante. Pero, ella realmente deseaba que su familia tan solo pudiese haber asistido. No fue cuestión de ánimos, fue más debido al dinero. De todos modos, Oriana tenía planes para solucionar eso.

Les deseó buena suerte a todos y empleó su último recurso de emoción como consejo antes de que el show comenzara y la espera por la última modelo fuera lo más esperado.

Observó todo lo que pasaba desde su teléfono, comprobando que todo estaba saliendo bien.

Realmente está ocurriendo. Le resultaba difícil aceptarlo, pero era algo grandioso. Su primera línea propia estaba siendo lanzada. Lo que había estado soñando desde que tomó un lápiz y elaboró el primer trazó se había vuelto realidad. Incluso a temprana edad, deseó con todo corazón ser reconocida por sus diseños. Ya fuese un vestido de princesa o algo totalmente distinto-, Oriana lo diseñaba con la intención de que fuera especial. Su nombre estaría impreso en cursiva en etiquetas, y serviría de inspiración para los padres a la hora de nombrar a sus hijas. Oriana sería una leyenda de la moda. Sería alguien importante.

—Oriana Adesina. Directora creativa de FEANDRA.

Caminar por la pasarela era la cosa más atemorizante que había hecho en toda su vida. Se mostró tranquila y amable al abrirse paso entre las modelos, recibiendo una sonrisa de parte de la última chica a la cual le había tomado la mano, volviéndose para presentar el último modelo de la noche. El público estalló en aplauses, y el tiempo transcurrió lento mientras el reflector acentuaba cada pequeño detalle del resplandeciente vestido.

Cuando la realidad se asentó, ella se llevó las manos a la boca para besar y saludar, ondeando sus dedos en el aire mientras cada cámara en las filas se disparaba en su dirección. Había demasiada luz como para poder observar a la audiencia, y menos para percatarse de los ojos que la observaban a través de los flashes. Del brillo del hombre que una vez desató la misma fascinación en ella que esa vida lo hacía.

Salió de la pasarela y su corazón bombeó con fuerza cuando la música se detuvo y las luces desaparecieron. Entonces, la algarabía volvió a hacerse presente. Las modelos corrieron hacia ella, tomando fotos y dándole besos de felicitación como promesas de verse en la fiesta. Todo era demasiado surreal. Mujeres que habían obtenido la misma publicidad que ella —aunque no fuese por el mismo tema, o por su talento—, se le acercaban y la felicitaban con alegría.

Todos partieron directamente a la fiesta que se llevaría a cabo en un club no demasiado lejos del lugar del desfile. Las personas invitadas habían sido elegidas estrictamente, pero aún a pesar de ello mucha gente logró colarse en la lista. La fiesta estaba más llena que el show. Estaba llena de rostros famosos que parecían intrigados por ella. Más nombres se le acercaron. Incluso, modelos que ni siquiera modelaban para su compañía aparecieron e intentaron de la mejor forma posible obtener la esperanza de ser requeridas para modelar para ella. La idea era una locura que la gente anticipara el gran éxito que alcanzaría en el mundo de la moda.

a favor ➳ h.s (español) || act. lentasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora