a favor ➳ h.s (español) || act. lentas

treinta y tres [*]

Tengo que advertirles que este capítulo es realmente fuerte en las escenas sexuales, like, for real. Así que si se sienten incómodos (hasta yo me sentí un poco), pueden saltarse este capítulo (: 

—¡Pesca! 

Harry posó el cigarrillo entre sus dientes, manteniéndolo ahí con una calada mientras tomaba el mango de cartas. Tomó la carta del tope y la colocó sobre la mesa, frunciendo el ceño cuando el humo salió de su nariz y cascadeó en el aire entre sus cartas y rostro. Él sacudió la mano para apartar el humo y Oriana se inclinó para zafar el objeto de sus labios y posarlo entre sus dedos mientras lo observaba contemplar su elección de carta.

—Eso es una porquería —se quejó entre dientes y Oriana resopló, haciendo una V con sus dedos. Harry intentó ojear sus cartas, pero ella se las pegó al pecho, sosteniendo el cigarrillo lejos al exhalar. Se quedó boquiabierta cuando el humo salió en forma de círculos de su nariz. 

—Sin trampas —reprimió, reclinándose en el asiento de nuevo. Eran pasadas de la medianoche. No estaban seguros qué hora exactamente, pero se habían acabado dos botellas de champán y ahora acababan un paquete entero de cigarrillos caro que Harry había comprado en recepción. Era un paquete de Marlboro, del doble de su precio normal. Estaban en el balcón, sentados en la mesa de la esquina con sus manojos de cartas y las botellas de champán. 

—Tú tienes tres victorias y yo ninguna —argumentó.

—Supongo que eres un asco entonces —bromeó y Harry la fulminó con la mirada, recuperando su cigarrillo—. ¿Algún rey? —Harry gruñó y le pasó una carta con desgana. Oriana rió en triunfo, ganándole de nuevo—. Entonces, ¿que tiene que hacer el perdedor? —ella inquirió y posó su cuarta y más rápida victoria sobre la mesa, causando que Harry profundizara su ceño. 

—Coquetear con el conserje —Oriana se inclinó para pegarle en el brazo, pero Harry simplemente se rió de su propio chiste—. ¿Tienes algún siete? —prosiguió, arqueando la barbilla. 

Oriana negó con la cabeza—: Pesca —Harry tomó otra carta con un gruñido mientras Oriana pensó su penitencia—. Que tal si...

—No bragas por una semana —Harry la interrumpió. Con un bufido, Oriana rodeó su dedo índice y lo bajó hasta entrelazar sus dedos. 

—Lo dices como si fuera a perder —Oriana apuntó, mirándolo con aires de suficiencia cuando le sonrió entre cejas. 

—Yo podría ganar. 

—Podrías —enfatizó antes de que el silencio volviera a instalarse y él tomara otra calada, envolviendo los labios sobre la punta del cigarrillo. Oriana suprimió una sonrisa antes de tomar un movimiento valiente—. Tengo una idea...

—Dispara —Oriana le golpeó el hombro en referencia a sus palabras. 

—Qué graciosa —Harry puso los ojos en blanco. 

—Quien pierda... —dijo, vacilando un poco. Harry lo notó y arqueó las cejas. 

—¿Qué?

—Quien gane... —Oriana cambió su frase—. Grabará al perdedor dando un oral. 

Harry se quedó mudo por un momento, meditando su oferta—. Así que yo te grabaría mientras tu... 

—O al revés. 

El rostro de Harry casi se iluminó—. ¿Me dejarías grabarte chupándomela? 

—Lo dices como si fuese a perder —le repitió, ladeando la cabeza hacia su novio sonrojado, quién miraba a todos lados mientras lo imaginaba.