Capítulo 50: De película

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{Ainoa}

Hoy es el gran día. 2 de agosto, mi esperada boda con Blas. Después de superar la pérdida de Gabriela, aquí estamos, preparándonos para el día más importante de nuestras vidas. Deambulo nerviosa por el pasillo de la casa de Carlos y Patri donde estamos mis damas de honor, Salva que me va a llevar al altar y David, a pesar de todo no podía faltar hoy y eso costándome el enfado de Dani, que ha venido a traernos los ramos.

Estoy realmente nerviosa. Se supone que estoy muy segura de lo que voy a hacer, pero no se si de verdad estoy segura de esto. Sé que amo a Blas, pero también hay otra persona que se ha ganado mi corazón con sus actos, y lo que pasará si me caso con Blas esta tarde será que le perderé para siempre. Y lo peor es que estoy totalmente segura de que él me ama, aunque no se atreva a decírmelo, sé que suena egocéntrico pero como prueba sé que las chicas también lo saben.

En fin, que estoy aquí frente al espejo del mueble de la entrada observándome detenidamente, parece mentira que haya tenido un bebé en mi vientre durante nueve meses pues ya no me quedan rasgos del embarazo. Todavía sigo preguntándome cómo sería que Gabriela estuviese aquí, de hecho esta mañana antes de salir de casa para venir aquí, he entrado en la que ahora sería su habitación y algo se ha removido en mí al ver el precioso vestido que Blas y yo habíamos elegido para éste día colgando del pomo de una de las puertas de su armario. Pero ya nada se puede hacer he de asumir que ninguna de las dos Gabrielas de mi vida estarán en ¨El Día Más Importante De Mi Vida¨, y ya no es que falten mi hija y mi hermana, sino que tampoco estará mi padre para llevarme al altar, ni mi madre para ayudarme a ponerme el vestido, ni ninguno de mis hermanos para llevar la arras y las alianzas. Es muy triste estar ¨sola¨ el día de tu boda, de mi familia sólo van a venir mis abuelos y mis tíos.

Salva : ¿Nerviosa? -Pregunta susurrando en mi cuello. Me doy la vuelta para mirarle.

Yo : Demasiado.- Le abrazo, es lo que necesito, un abrazo de la persona que mejor me comprende, porque aunque Dani piense igual que yo, muchas veces no comprende lo que siento, pero hay está Salva, esa persona a la que le puedes contar todo sin miedo a que te juzgue.

Salva : Pues no entiendo el por qué. Si sabes perfectamente que estás enamorada de Blas y que es el hombre de tu vida, sin ir más lejos, hace unos meses estabas embarazada de una hija suya.- Admiro a Salva, por mucho que le duela decir estas palabras lo hace para que yo me sienta mejor.

David: Ainoa, podemos hablar un momento-. Dice interrumpiéndonos.

Salva: Toda tuya-. Dice dándole una palmada en la espalda y se marcha por el pasillo para dejarnos a solas.

David: Ante todo gracias. Sé que no me he portado bien contigo y con los chicos, pero en este tiempo me he dado cuenta de que os necesito en mi vida, pero por mi culpa ha cambiado todo tanto... ¿Quién me diría a mí que iba a venir a tu boda pero no como el novio?-dice con un brillo en la mirada que me provoca un escalofrío- Me costó tanto que te fijaras en mí cuando estabas detrás de Dani, y fíjate, te perdí en una semana de vacaciones, ahora me doy cuenta de que tu te mereces a un hombre como Blas, él nunca te haría daño...- Esta última frase provoca que se me escape una lágrima al pensar en todo el daño que le puedo hacer yo a él-. Hey- dice y me limpia la lágrima - ¿Qué pasa?

Yo: No lo sé, yo... No sé David, no estoy segura de esto... Pero ya da igual no hay marcha atrás.

David: Ainoa, piénsalo bien, estás a tiempo...- Me da un beso en la mejilla y se va.

{Dani}

Álvaro: Que no tío, cómo va a dejarte en el altar, no te rayes que es normal que llegue tarde-. Intenta calmarle.

Blas: Mira yo estoy de los nervios.

MªJesús: Tranquilo hijo-. Le dice su madre.

Adrián: ¡Ya están en la puerta!- Entra gritando en la iglesia, le doy un abrazo a Blas y nos sentamos.

A los pocos minutos entra Ainoa del brazo de Salva, va preciosa, nunca pensé que este día llegaría. Es todo tan de película.

"Pero para película lo que viene después"

Después del sermón del cura llega el momento del sí quiero famoso, Blas acepta sin dudar, pero Ainoa a pesar de que acepta está ¿confusa? Total, que el beso, las fotos, el arroz y el convite.

Ainoa: Oye Dani, ¿has visto a Salva?

{Ainoa}

Llevo sin ver a Salva desde que salimos de la iglesia y la respuesta negativa de Dani es lo que termina de alertarme. Decido coger mi móvil para intentar contactar con él, pero nada más desbloquearlo me salta la notificación de un WhatsApp del susodicho.

→Tienes 45 minutos para llegar al aeropuerto, el vuelo sale en una hora.

El corazón me va a cien. Tengo que tomar una decisión. De hecho ya la he tomado, y aunque no estoy segura de sí es la correcta decido arriesgarlo todo.

Dejo mi móvil encima de la mesa más cercana donde me encuentro a David:

David: Hazlo. Vete. Desaparece. Si vas a ser feliz merece la pena-. Me dice con una sonrisa de oreja a oreja-. Toma-. Dice entregándome las llaves de su coche-. Vive el momento y no olvides que te quiero-. Me da un beso en la mejilla y salgo corriendo del salón de bodas. Pero nada más llegar a la puerta me detengo, vuelvo la vista un instante para ver por última vez a mi gente, sobre todo me fijo en Blas, está tan feliz... No se merece esto, pero necesito marcharme dejar esto, necesito olvidar todo, y que mejor forma que fugándome con "el otro" a ni siquiera se donde el día de mi boda.

La escena es muy peliculera, nunca me habría imaginado corriendo por Barajas vestida de novia buscando a Salva, pero aquí estamos.

Salva: Sabía que vendrías...- Dice antes de besarme apasionadamente-. Siento haber hecho esto pero... No podía más... Ese sí quiero ha sido lo más doloroso que he oído en mi vida...

Yo: ¿A dónde vamos?- Es lo único que logro preguntar para desviar el tema relacionado con mi boda a pesar de parecer un capítulo de Dora la Exploradora.

Salva: A Los Ángeles, he encontrado un ático perfecto. Espero no volver aquí en mucho tiempo.

This is love (Auryn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora