-Lucinda-Susurra-Se llamaba Lucinda. Te extrañe mucho hija.
Mi labio inferior empieza a temblar al igual que todo mi cuerpo.
No,esto no es verdad,él solo quiere manipularme,juega con mi mente.
-Es mentira-Gruñí.-Tu no eres mi padre, eres un monstruo que no ama a nadie.
Veo dolor en sus palabras pero no me arrepiento de lo que dije.
"Lucinda eres adoptada",la voz de mi supuesto padre; William,retumba en mi mente.
¿Y si es cierto lo que dice Aaron?.
¿Soy un vampiro?.
-Por favor -Suplica-Tienes que creerme hija.
Arrugue mi frente. No quiero creerle.
-Si no quieres que sea por las buenas sera por las malas-Sisea-¡Fran trae la sangre!-Exclama dirigiéndose al rubio.
Él rubio desaparece,Aaron me mira y sonríe,su sonrisa es maliciosa y algo cínica.
-Fran se había quedado fascinado contigo, creo que hasta estaba enamorado.-Ríe.
Lanzo un pequeño jadeo inaudible,quiero llorar pero me contengo,me tengo que tranquilizar y buscar la manera de salir de aquí. No iba a quedarme como Bella Swan esperando que vengan a rescatarme.
-¿Sabes por que tu lado vampírico no sabe a la luz?-Pregunta. Había leído algo sobre eso en el libro que Lily me dio pero no lo recordaba.
-No-Dije en tono borde.
-Pues es porque no as probado la sangre humana.-Contesta con una cínica sonrisa en su rostro.-Hija pronto estaremos juntos, bebe-Ordena teniéndome un paquete rojo que trajo Francis hace unos instantes.
Me niego,no pienso tomar eso,tendrán que matarme antes.
-Si no quieres cooperar tendré que obligarte -Dice despareciendo por unos instantes,luego aparece de la nada con una figura entre sus manos,es una persona, se ve pálida y el cabello rubio que esta muy sucio le tapa el rostro.
La tira en el suelo haciendo un estruendo que suena por toda la habitación. La persona tosé y lanza un gemido. Aaron se arrodilla,miro todos sus movimientos,agarra un puñado de cabello rubio y lo jala para que vea el rostro de la chica.
Es Carolina,tiene sangre en el rostro y un moretón en la mejilla. No puedo evitarlo y una lágrima resbala por mi mejilla,ella puede haberse acostado con mi novio pero fue mi mejor amiga durante mucho tiempo e igualmente me duele verla así.
-Dejala ir-Mi voz suena rasposa y lastimera.
Él solo sonríe y niega con la cabeza.-Bebe o le desgarro la garganta-Me amenaza,cierro mis ojos y calculo mis opciones,no tengo muchas y no quiero que a Carolina le pase nada.
No muy decidida acerque el envase a mi boca,el líquido rojo se podía distinguir haciendo que se me revuelva el estomago y quiera vomitar. Cerré mis ojos para no ver lo que iba a ingerir y chupe,el sabor a metal inundo mis sentidos,era asqueroso,abrí mis ojos,Aaron estaba sonriendo,sus ojos brillaban levemente. Mire a Caro,estaba ahí inmóvil,pero despierta,me miraba,"ayudame" vi como articulaba con sus labios,pero no podía moverme,sentí un calor profundo en mi interior,no podía respirar y mis venas ardían,la sangre en mi boca había adquirido un gusto dulzón que me daba placer.
En la mano de Aaron vi un objeto metálico y brillante,no podía observar bien que era ya que mi visión estaba algo borrosa,pero luego de unos movimientos vi de que se trataba. Un cuchillo,el cuchillo estaba en la garganta de Carolina,perforándola. Quise gritar pero sentí que todo iba en cámara lenta y unos gritos hacían eco en mi interior.
Después de eso no recordé nada más,caí en un profundo sueño.
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El secreto de mi jefe [Sin editar]
Roman d'amourAdam Witman, las mujeres lo definen como perfecto, un dios griego. Aunque posee un gran secreto, oscuro y poderoso que nadie sabe. Lucinda es una joven que trabaja en la empresa del magnate Witman. Ella día a día tiene que soportar a su irritante je...