El secreto de mi jefe [Sin editar]

Epílogo

-Ponte ese vestido -Ordenó Liliana cruzando los brazos sobre el pecho.

Lancé un bufido y miré una vez más el atuendo que Lily había elegido para mi "Despedida de soltera". Ese vestido era muy transparente y corto.

-No va a pasar -Murmure y camine hasta mi armario. De allí saqué un vestido negro, el cual tenía encaje en la espalda y me llegaba unos ocho dedos sobre la rodilla; mi estilo.

-Cómo te odio - Dijo con el ceño fruncido ella, haciendo que yo comencé a reír.

-Me amas - Objete y entré al pequeño baño personal para alistarme.

Una vez que me coloque el vestido y los zapatos a juego, me dediqué a maquillarme.

Suspire cuando miré mi reflejo, mis ojos rojos me devolvieron la mirada, mi piel estaba pálida, aunque le daba un aspecto delicado.

Comencé a maquillarme, con solo lo básico, un poco de rubor, delineador negro y rimel, por último pinte mis labios con labial carmesí.

- Ya estoy lista - Informé saliendo del cuarto de baño.

Analice el atuendo de Liliana,ella llevaba un vestido rojo con un escote pronunciado, y para mi estilo era demaciado corto, a ella le quedaba precioso.

-Vamos -Dijo Lily finalmente y ambas nos dirigimos hacia su auto.

Luego de aproximadamente veinte minutos de viaje en carretera, por fin habíamos llegado a nuestro destino.

Liliana detuvo su auto frente a la discoteca, no le vía el sentido a esto,solo somos dos mujeres para una despedida de soltera, la cual ni siquiera era una despedida, ya que yo no estaba más soltera.

-Deja de poner esa cara de amargura - Ordenó Lily abriendo la puerta del auto.

Imite su acción y lancé un bufido al salir del interior del auto.

-Dios, eres peor que Ice Man- Dije entre dientes y comencé a caminar hasta la entrada del Club.

Pude escuchar como ella rio entre dientes, las comisuras de mis labios se elevaron ligeramente. La castaña trotó hasta llegar a mi lado.

-Yo no soy como mi hermano. - Murmuró por lo bajo. -Él busca amor, yo solo necesito una noche.

Frunci el ceño, nunca la había escuchado hablar así.

-¿Sucede algo? -Pregunté preocupada.

Liliana hizo un ademán con su mano, restandole importancia al asunto.

- Nada, es que ya no creo que el amor sea para mí. -Se encogió de hombros. -Ahora vamos a bailar y deja el tema.

Tomó mi brazo y ejerciendo presión, me arrastró hasta la entrada.

Una vez adentro, ambas nos sumergimos en el ambiente de la discoteca. Estaba repleta de gente, hice una mueca de disgusto al notar esto, no me gustaba estar rodeada de personas últimamente, ya que mi apetito vampiro estaba algo revolucionado.

-¡Vamos a bailar! -Exclamó Liliana,sus dedos aún envuelven mi muñeca.

Ambas nos dirigimos a la pista de baile, no reconocí la canción, pero empecé a moverme junto a la gente.

Luego de varias canciones, Dangerous, de David Guetta, comenzó a sonar, comencé a balancearme de un lado a otro, amaba esta canción. Busqué a Liliana con la mirada, la encontré lejos de mi, bailando junto a un chico.

Sentí unas manos en mi cintura, me tense al instante. Un aliento cálido chocó contra mi cuello.

-Déjame - Dije entre dientes, estaba furiosa.