Siempre Fuiste Tú (Pasado)

21- Auxilio

Auxilio... Auxilio. Grito, pero nadie me escucha. Me duele mucho y no puedo soportar. La cabeza me quiere explotar... No puedo ni respirar bien, porque hasta eso cuesta.

— ¿Dime como esta ella, Mely? —dice una voz de mujer que conozco—. Lleva más de dos días sin despertar. Eso no es normal.

¿Mely? El nombre me suena de alguna parte, pero en este instante pensar duele. Siento como si estuvieran construyendo dentro de mi cabeza —martillos golpeando por todos lados.

— Ella esta estable. Pero eso no será por mucho tiempo... Si la aneurisma se rompe, antes de que realicemos la operación, no habrá más un mañana para ella —ahora habla una voz menos melodiosa, suena rasposa y tajante.

Se me hiela la sangre. Están hablando de mi. Si no me operan puedo morir. Intento abrir los ojos, pero todo se queda en eso, un simple intento.

— ¡Oh, Mely!... No quiero que muera... He hecho demasiado, para tan siquiera tenerla cerca. Ahora que la tengo, me reuso a perderla —esta vez habla la voz angustiada que conozco.

Quiero despertar. Necesito ver quienes son las que hablan de mi. Porque no hay que ser un genio para saber que la que no puede tener un mañana soy yo.

— Debes hablar con ella en cuanto abra los ojos. Camila esta aquí en contra de su voluntad... Puede denunciarte por secuestro. Y no creo que quieras otra ficha en tu expediente. Además su rostro esta en todos los periódicos y noticieros de todo el país... El novio y toda su familia esta como loco buscándola. Si la clínica no fuese mía, ya abrían dado con ella.

— No me importa, ellos no me la quitaran. Ella es mía... Desde el día en que la vi en aquel bar.

— Entiende que ella no es tuya. Ella no es parte de tu mundo. Acaso no te das cuenta de que estas cometido un grave error... Camila no te quiere. En cambio yo si, yo te quiero Cristal... Yo estoy dispuesta a ayudarte a superar esto. Dame la oportunidad de hacerlo —la voz rasposa grito, pero no de forma exagerada, sino más apaciguada.

—No necesito a nadie mas, con ella seré feliz. Solo tenemos que curarla de la aneurisma y hacerle el tratamiento... Y ya estará lista para viajar a Londres conmigo.

— ¿Que es lo que le vez? —reclamó.

— Mira que linda es... Tiene la piel como un bebé. Y mira que lindas pecas tiene. Es inocente, amorosa, carismática y sumamente interesante —siento unas suaves caricias en mis mejillas que no me relajan. No Son las manos que quiero sobre mi. Ella no es él.

Entonces recuerdo todo. Los resultados del estudio que me hizo Bennett. La llamada de mi prima Mari... Luego la llamada de Cristal. Los disparos. Oh, Dios... Recuerdo su confección.

JODER. Esta enamorada de mi, no es cualquier juego de niños, ella esta realmente obsesionada conmigo y ahora esta conversando con la mujer que siempre me llama para contarme novedades.

Sabia que me sonaba el nombre, Mely, la chismosa... La mejor amiga de Cristal. Pero nunca imagine que ella fuera doctora o que tuviera una clínica.

— Ella no es para ti.

— ¿Y quien es para mi? ¿Tu? —una risa irónica sonó en la habitación. Y mi cabeza de inmediato se resintió. Esta hiper sensible a todos los sonidos—. Ya hemos hablado de esto... Eres mi mejor amiga, nada mas. Me estas ayudando en esto, porque me debes mucho... Y si me denuncias, tu te hundes conmigo —deja de acariciarme— ¿Entiendes?

De inmediato reuno las fuerzas que necesito para despegar mis párpados y abrir los ojos. Ya la situación me puede. Llevo dos días aquí, según dijeron. Y estas dos mujeres quieren hacer cosas conmigo que yo no logro entender.