-De la cara tan divertida que has puesto, idiota.-Reí.
-Ogg, hija de tu madre.-Sam me miró con asco.
-Ya esta perrito, ya esta.-Reí de nuevo.
Me miró mal y se fue a vestir.
{...}
-Y no os olvidéis de que hoy coméis en casa de tu tía, Elle.-Dijo mi madre por séptima vez.
-Si, mamá.-El cansancio era notorio en mi voz.
-Señora, no se preocupe, yo las cuido.-Alex Wilson siempre creyéndose el centro de atención.
-Claro que si, confió en ti Alex.
Caminamos hacia el instituto un poco más rápido de lo normal, ya que íbamos con algo de retraso en el camino.
En mi cabeza solo rondaba la pregunta "¿Qué va a pasar hoy?"
-¿Y bien? ¿Cuál es nuestra clase?-Preguntó Sam confundida por los pasillos del instituto.
-A ver, Sam tu conmigo, Alex tu con Christian.
-¿Y...?-Sé perfectamente a quien se refería.
-Está en mi clase.-Murmuré haciendo una mueca.
-Suerte.-Escuché una voz proveniente de mi espalda.
-¡Katia! ¡Me has dado un susto de muerte joder!-Le di un pequeño puñetazo.
-Bruta.-Reí.
Las chicas y yo caminamos hasta clase, Christian se fue con Alex y Pol a otra clase.
Hasta ahora no había pensado en que rayos iba a hacer cuando viera la cara de Brian Miller en las próximas horas. Desearía no haberlo conocido, aunque más desearía no estar enamorada locamente de él.
-Oye, ¿Me puedo sentar contigo?-Cuestionó Sam dudosa.
-Si Katia Jones te cede el sitio, no veo inconveniente.-Me encogí de hombros.
-Katia, ¿Me dejas sentarme con Danielle?-Preguntó con cara de perrito mojado.
-Está bien, yo me sentaré junto a Nicole que se encuentra por allí.
-¿La pareja de Christian?-Katia asintió.- ¿Os podéis sentar vosotras dos juntas y yo con Nicole?
Las dos me miraron como si quisieran matarme o estaban pensando en cómo hacerlo, no estoy muy segura de eso.
-Bueno, acepto, pero luego me debes un gran trozo de tu sándwich.-Sam me advirtió con el dedo y asentí.
Me senté al lado de Nicole y mientras venía el profesor, nos pusimos a charlar. Ella era la única aparte de Sam, Alex y Christian que sabía lo sucedido con Brian.
Nicole me lanzó una de sus miradas que siempre traían algo escondido en su interior y enseguida lo supe.
Miré hacia la puerta y por ahí llegaba él.
No era el mismo, iba cabizbajo, en silencio, su bonita sonrisa estaba escondida tras una cara totalmente seria y desgarrada de dolor. Solo se veían sus ojos totalmente rojos de haber llorado y sus mejillas mojadas de lágrimas.
Pues, va a ser verdad lo que me dijo Christian.
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Ni una lágrima más. {Dreams1}
Teen FictionMuchos piensan que el amor puede con todo. Otros, simplemente dicen, que podrían dejarlo todo y tirar la toalla una vez que eso no funciona. Soy Danielle Becket, mi historia sobre mis amigos y mi cambio de aires no es nada del otro mundo pero, te...