CAPÍTULO 11

444 34 2
                                    

-¡Bien! Mañana es el examen no lo olvidéis.-Dijo la vieja canosa de la profesora mientras venía hacia mi sitio.-Recuerde señorita Becket, que está castigada junto con un chico de la otra clase hoy.

Solté un suspiro mientras recogía mis cosas y salía de clase. Me dirigí al comedor donde me esperaba el jodido director para ponerme a hacer el castigo.

Un "Hola" desganado salió de mis labios al ver al viejo director.

-Siento llegar tarde.-Dijo Brian desde atrás.

-No importa.-Respondió el director.-Me tenéis que recoger todo el comedor, tiene que quedar brillante. ¿Entendido?

Brian y yo nos miramos boquiabiertos y volvimos la mirada al director el cual nos miraba con cierta confusión en sus ojos.

-¿Sois pareja?-Espera, ¿Qué?

-No.-Respondió Brian.-Por poco tiempo.-Susurró para que solo él y yo lo pudiéramos oír.

¿Por qué razón había dicho eso? No lo entendía. Había tanto que me quedaba por entender de Brian Miller...

En mi mirada se reflejaba plena y absoluta confusión, confusión ante sus palabras tan seguras y firmes.

El director se alejó y con cada paso que daba el nerviosismo aumentaba en mi interior.

-¿Por qué has dicho eso?-Dije seria y comenzando a recoger algunas cosas.

Arrugó un poco la frente a modo de confusión. Dios, incluso con ese gesto tan poco adorable se hacía adorar.

-¿El qué?-Su confusión era evidente.

-Eso de; "Por poco tiempo".

Un silencio incomodo inundó todo el comedor. La tensión se podía cortar con un cuchillo y la presión en mi interior aumentaba. Mi curiosidad por saber qué es lo que pasa por la cabeza de Brian en este momento se va volviendo poco a poco en una pequeña obsesión hacia su persona.

-Nada, no importa, olvídalo.-Negué con la cabeza.

-Me vas a decir a que viene eso, o si no, hoy no duermes conmigo aunque tenga que pasar la peor noche de mi vida, te lo juro.

A decir verdad, las clases que tomábamos por la tarde nunca eran tan aburridas como parecían, excepto cuando nos castigaban, eso sí que era aburrido.

-En serio, que no es nada.-Volvió a repetir.

Lo cogí del brazo y lo coloqué contra la pared. Mi respiración comenzó a ir más rápido a causa de la cercanía tan innecesaria. El roce de su piel directamente contra mi piel me hace perder el autocontrol que tengo y se me eriza el bello del brazo.

Me mira directamente a los ojos, luego baja la mirada a mis labios y yo muerdo mi labio inferior, gesto que parece hacer que su corazón vaya un poco más rápido.

-Si me lo dices, me arriesgo a besarte.-Las palabras salen a borbotones de mis labios.

-¿Estás segura de lo que acabas de decir?-Su expresión era divertida y no conseguía entender el por qué.

-Si, estoy absolutamente segura.-Él volvió la mirada a mis labios para luego posarla en mis ojos y hacer que me estremeciera.

-Pues, lo que iba a decir era que seriamos solo amigos por poco tiempo dado que te has convertido en algo más que mi amiga, eres...-Di eso que quiero oír.-Mi mejor amiga, y por eso lo he dicho.

Brian soltó una carcajada a lo que yo hice una mueca de fastidio. Que ilusa he sido. ¿Cómo pude pensar que yo le iba a gustar a un chico tan perfecto como lo es él? Ni de lejos. Jamás podría lograr quererme, ni aunque lo intentara. Ya me lo dijo Katia Jones, Miller va de mujer en mujer.

-Y ahora quiero mi beso.-Sonrió con malicia.

-¿Y qué te parece si te lo doy en casa y no aquí? Es que hay cámaras de seguridad y no me gustaría que me llevaran a dirección.

Accedió dudoso y seguimos limpiando.

Ni una lágrima más. {Dreams1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora