CAPÍTULO 43

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Una vez llegamos a casa ni me molesté en saber donde estaba mi madre, ya que todos, incluso Brian, estaban muy convencidos en mostrarme aquel CD.

Sam lo introdujo en el aparatito y le dio al play.

Espera, ¿Qué?

CHRISTIAN MILLER

Mientras él reía, saqué mi móvil del bolsillo y sonreí con malicia.

-Ya tenemos pruebas suficientes para alejarte de Danielle.-Dije riendo.

-¿Si? ¿Qué clase de pruebas?-Rió.-No tenéis nada y ella no os va a creer.-Le mostré mi móvil el cual estaba grabando toda la conversación.

-Mira, tenemos pruebas, tú te has delatado solito.-Fue a quitarme el móvil pero lo aparté sonriente.-No.-Reí.-Brian y Elle van a volver a estar juntos, ¿Y sabes qué? Va a ser gracias a tus gilipolleces imbécil.

Me iba a marchar pero me cogió del brazo y me pegó una patada en el estómago que me hizo caer al suelo y retorcerme de dolor.

-Gilipollas.-Rió.

Me pegó un puñetazo en el ojo, en el estómago, en la barbilla... Patadas por todo el cuerpo hasta conseguir que cayera inconsciente en el suelo. Todo se volvió completamente negro.

DANIELLE BECKET

-No lo entiendo.-Miles de lágrimas salen de mis ojos totalmente confundida.- ¿Qué?

-Fue Alex, Alex hizo que Brian, bueno...Se drogara o lo que quisiera que hiciese.-Dijo Sam.

-Me lo advertisteis.-Me lamenté.-Me lo advertisteis y no os hice caso, no os hice caso y seguí mi vida hacia delante al lado de un capullo.-Lloré.-No lo puedo creer.-Me levanté el sofá.- ¿Cómo puede ser joder?-Grité mientras lloraba.- ¿Cómo puede ser?

-Tranquila.-Susurró Nicole mientras me abrazaba.

-Dos veces hundida por el mismo gilipollas.-Lloré en su hombro.-Debí hacer caso a Sam cuando me lo advirtió, pero me puso una venda en los ojos, no sé como lo hizo.

Alcé la mirada y miré a Brian. No sé qué hacer, no sé qué decirle... Pero lo que tengo claro es que, aun descubierta la verdad, no puedo volver con él. Aun sigo teniendo miedo, y no pienso torturarme por unos sentimientos que se desvanecen por momentos. Me acerqué a él y lo abracé, no se lo esperaba pero me correspondió.

-Lo siento.-Lloré.-Lo siento mucho.

-Ya está, princesa.-Susurró.-No pasa nada, yo tampoco me hubiera creído a mí mismo.

-Pero yo te juzgué y lo peor de todo, volví con ese gilipollas, cuando sabía que tarde o temprano me iba a volver a hundir.

Ni una lágrima más. {Dreams1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora