Ni una lágrima más. {Dreams1}

CAPÍTULO 35

-Si, Alex, si quiero volver a salir contigo.-Sonreí.

Temo cometer un error, pero, ¿Sabéis? Tengo que rehacer mi vida.

Alex sonrió y me abrazó con todas sus ganas. La verdad es que sus abrazos son los que más calidez dan de todo el planeta.

Le he echado tanto de menos.

-¿Ya podemos volver a pasar?-Katia, pesada.

-Si, Katia.-Reí.

-Cuanta risa, ¿Qué le has hecho?-Preguntó Nicole Anderson, tan cotilla como siempre.

-¿Yo? No le he hecho nada.-Dijo Alex mirándome sonriente.

-¿Qué ocurre aquí?-Sam empezaba a sospechar.

-Pues que a fin vuelve a ser mía.-Me lanzó una sonrisa fugaz.

-¿Qué?-El tono de voz enfadado de Samantha no me gustaba nada.-Mira Danielle, comprendo que estés mal por lo de Brian, pero, no es como para que vuelvas con el idiota que te engañó con tu mejor amiga. ¡Wilson sé que eres un falso y un mentiroso! ¡Seguro que la quieres para luego dañarla de nuevo! Danielle yo no voy a soportar esta relación.-Salió dando un portazo.

-En cierto modo tiene razón.-Nicole salió tras ella.

-Bueno, ya que se van todas, no me voy a quedar a molestar.-Dijo Katia riendo y saliendo por la puerta para seguidamente cerrarla.

-No sé que voy a hacer Alex.-Susurré.

-Eh, mírame.-Acarició suavemente la piel de mi cara.-No pasa nada, yo estoy aquí para lo que necesites.

-Pero, es que, son tantas cosas. Brian y hora Samantha. Es que no entiendo porque todo me tiene que pasar a mí.

Alex acarició mi mejilla con cariño, para seguidamente comenzar a acercarse a mí. Besó mis labios con suavidad, como solo él sabía hacerlo. Recuerdos de nuestra antigua relación vinieron a mi mente, éramos tan felices y podemos seguir siéndolo.

-Echaba de menos los besos tan suaves que me dabas.-Susurré.

-Yo también echaba de menos los tuyos.-Dijo en el mismo tono para luego volver a besarme.

CHRISTIAN MILLER

-¡Nadie Christian, nadie!-Gritó para luego comenzar a caminar sin rumbo alguno.

Decido rendirme y marcharme a casa, para que pueda pensar en sus cosas o hacer lo que tenga que hacer, no pienso seguir esforzándome.

Por el camino me encuentro a Samantha andando como una loca histérica.

-Eh eh eh. ¿Dónde vas tan alterada?-La agarré del brazo y detuve su paso.

-¡Donde nadie pueda encontrarme!-Dijo gritando, parecía enfadada.