EN PELIGRO (Editando)

'Capítulo 11'

Me despierta un estruendo fuera de la casa, estoy dormida sola en la cama de Seth.
Me levanto de la cama para ver qué es lo que me ha despertado. Todo el jardín está mojado, el agua cubre todo. No se ve nada con nitidez, está lloviendo y hay un aroma embriagador a hierba y barro, seguro que ha sido un trueno.
Me fijo en mi cuerpo y está vestido con una camiseta de hombre muy larga. Estoy sola en la habitación oscura, que al ser de madera, huele a humedad más retenida y el frío se está calando en mis huesos.

Lo veo entrar en la habitación con su pelo marrón despeinado y unos ojos más oscuros de lo normal. Lleva con un pantalón de chándal colgando de su cintura, nada más.
-¿Has dormido algo?
-Si...
-Baja. Te he hecho algo para desayunar. -Y se da la vuelta.
-¡Seth! Un momento... ¿Por qué estoy así vestida? ¿Acaso hemos...?
-No, no te preocupes, no te he tocado. Es que anoche tuviste una pesadilla y despertaste sudando, por eso cogí una de mis camisetas y te la puse.
-Gracias... Supongo. -Y bajo detrás de él hacía el salón.

El olor a humedad y a moho, se ha convertido en olor a tostadas y café, justamente lo que hay encima de la mesa de centro del pequeño y caluroso salón. Recojo mi pelo en una coleta alta y me siento en una silla frente a la de Seth.
No me habla, no me mira, como si no estuviese ahí. Fijo la mirada en él, pero no se da cuenta.
-Seth... ¿Pasa algo, princesita?
Pero no me responde, en lugar de eso se mete una tostada en la boca. Gira la cabeza hasta la ventana que tiene a su derecha, y mira la lluvia como si yo no estuviese ahí, como si no existiera para él.
Cuando termina el desayuno, se levanta y recoge la mesa por mí, llevándolo todo a la cocina.
Yo lo sigo para intentar averiguar el porqué de su actitud, no le he hecho nada para que me trate de esta manera.
-Ya está bien Seth, me dices que te pasa ya o te prometo que me escapo y sabes perfectamente que quedaría en tu conciencia. -Se gira sobre sí mismo y sus ojos están brillantes, no sabría explicar cuál es su expresión.
-Lo siento Chelsie, no me pasa nada, solo, no estoy acostumbrado a que nadie me rechace.
-Ah, ¿y es que yo soy alguien como las demás?
-No, pero...
-Ni peros ni peras. -Le interrumpo y empiezo a gritar. -¿Vas a dejar de hablarme porque no soy una zorra a la que te has llevado a la cama?
Sus labios no me dejan terminar con la discusión, porque en una fracción de segundo estalla sus labios contra los míos de manera salvaje, y yo le sigo el beso porque, esto es lo que quiero. Sus manos se posan en mi cintura y yo lo agarro del pelo, acercandolo más a mí. Esto no es lo que creía que iba a pasar.
Me levanta haciendo que mis piernas se enreden en su cintura, y me lleva al gran sillón del salón, tirándome en él.
Cuando ya estoy tumbada boca arriba, él se pone encima mía con mucho cuidado. Ni que fuese de porcelana. Una vez arriba, vuelve a besarme, ahora de manera no tan delicada.
De mi boca baja a mi cuello haciendo que mis terminaciones nerviosas se activen y que mi vello se erice.

¿Yo de verdad quiero esto?
¿Quiero hacer esto con el idiota de Seth? Pues si.
Porque toda chica mala tiene su debilidad, y la debilidad de Chelsie Collins se llama Seth Rush.
En un rápido movimiento, mi camiseta aterriza en el suelo dejándome en ropa interior.
Llevo un conjunto negro de encaje que realmente realza mi cuerpo, aunque no sea muy difícil. Mi cuerpo es fantástico, soy lo que todo hombre pediría.
Vuelve a besar mi cuello haciéndome perder la cabeza, tal que me giro dejando a Seth debajo de mí. Ahora soy yo la que empieza de nuevo con el beso, haciéndolo morderse el labio de abajo. Me gusta.
Se nota en su respiración lo que quiere hacer conmigo y disfruto con la sensación que estoy causando en él.

Sin darme cuenta y sin parar con lo mío, la cerradura de la puerta se gira, como cuando una llave va a abrir, pero ninguno de los dos se da cuenta de lo que está pasando alrededor.
El crujido al abrirse nos hace separarnos unos centímetros. Corro a ponerme la camiseta, pero mi pelo alborotado, nuestros labios hinchados a causa de los besos y un bulto en el pantalón de Seth nos delata.

Entonces entra él, vestido deportivo, de chándal, con su flequillo colgando de su frente como siempre.
-¿Qué hacíais? -Pregunta mi enfadado hermano mientras aprieta los dientes.
-¡Ethan! -Corro a abrazarlo, en un intento ridículo por aparentar que no pasa nada.
-¿Me queréis decir que estaba pasando aquí? -Vuelve a preguntar, esta vez apretando los puños a tal punto de ponerlos rojos.
Ninguno de los dos responde, así que se dirige a Seth y le coje de los hombros, casi levantándole del suelo.
-¡Te dije que Chelsie es intocable!
-¡Ethan, por dios, cálmate! -Le grito y suelta a Seth para mirarme a mí. -Estamos aquí los dos solos porque así lo has querido tú. No me quieres decir lo que está pasando, no me dejas estar cerca del "peligro" y después de 24 horas desaparecida en medio de la nada vienes a montar un pollo por tus imaginaciones, ¿Te estás volviendo loco?
-¿Imaginaciones? Mírate los labios y mira los de él, mira tu pelo, joder miraos. -Agacho la cabeza en señal de derrota y el se acerca a mí, compadecido. -Y no te preocupes, que lo sabrás todo pronto, por ahora, no te puedes mover de aquí hasta que lo solucione todo, Thiago vendrá diariamente a ver cómo está todo.
-Ethan lo siento...
-No te preocupes, es que odio... Odio que te hagas mayor y...
-Pareces un padre.
-Siempre he intentado ser como uno para tí. Ahora tengo que irme, más te vale portarte bien.-Me besa la cabeza yluego dirige la mirada a Seth. -Y tú, guárdate tu arma en el pantalón o tendré que estirpártela.
Lo mira mal y se va por la puerta principal elegantemente.
-Creo que a partir de ahora no le caeré tan bien... -Añade Seth.
-Yo aún no entiendo como son amigos, o compañeros... o lo que sea.
-Pues es una larga historia.
-Cuéntamela.
Se sienta en el sillón tapándose con una manta enorme y haciéndome un gesto para que me siente a su lado, yo le hago caso y me abraza por los hombros. Me acerco mucho a él, me siento bien a su lado, tranquila, protegida. Mierda, no puedo ablandarme.
Lo miro, esperando a que empiece su historia. Me mira profundamente a mis ojos azules y abre la boca para por fin hablar.
-Creo que voy a empezar por mi pasado, que es la raíz de todo.
-Estupendo, empieza ya.
-Solo prométeme que nada cambiará después de que sepas esto...

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Gracias a las que leen y no olvidéis dar a la estrellita ☆

Una cosa más, quería recomendaros que os paséis por las historias de YadiAburtooestán fantásticas y os aseguro que os van a gustar..

Y por messier_083 que solo tiene una, pero a mi me ha encantado.

Hasta mañana ツ