La chica de dos razas

~Mi ultimo recuerdo~

- ¿A que poder te refieres?

- De momento no puedo decírtelo, cuando lo despiertes por ti misma te enseñare a usarlo.

- ¿Enserio?

- Si

Suspiro y dejo que una pequeña risa salga, ¿realmente el me tiene que cuidar? Mama, papa ¿en que estabais pensando?
Pero algo me estaba pasando, no sabia el que pero algo me ocurría, me empezaba a doler de nuevo el estomago, me lo apreté con fuerza, sabia lo que me pedía pero no quería matar a nadie, eso me convertiría en un completo monstruo, se que lo soy pero no quiero ser también una asesina.
Le mire a Andres, veía mas bien su cuello, escuchaba su corazón latir, era como si me llamase. Pero esa melodía para mis oídos fue interrumpida por un chasquido de dedos de Andres- ya se lo que quieres, pero no vas a alimentarte de mi

- Eso ya lo se, solo es- me empezó a doler mas el estomago, necesitaba comer y ya, si no acabaría atacando a Andres- por favor, vete

- No me voy a ir, es mas te voy a ayudar, a cazar obviamente ,mi sangre es mi sangre. Además tampoco quiero que pruebes sangre humana por diversas cosas que no viene a-

- Ayúdame- dije arrodillándome del dolor

Andres abrió la ventana y salto de ella, yo le seguí, este empezó a correr, buscaba algo pero no sabia el que, yo seguía como podia pero mi instinto estaba empezando a salir. Mis colmillos comenzaron a crecer y mi vista mejoro, busque cualquier olor que me pudier proporcionar mi ansiada comida, a lo lejos escucho el correr de un zorro, seguia aquellas pisadas tan frágiles y a la vez silenciosas, lo dibiso, comiendo una rata la cual había cazado, con rapidez me avalanzo hacia el y muerdo su cuello, succionando cada gota de sangre en su cuello, después de terminar mi pequeño festin limpio mi boca, quedando mis manos pintadas en sangre,las mire y recordé lo de mi tia, miraba mis manos con terror, sujete mi cabeza y me arrodille asustada. Una mano me desperto de mi trance, era Andres, me miraba preocupado- M-mi tia...- dije con la voz quebrada con lagrimas en mis ojos recorriendo mis mejillas.

Andres con una mano me puso en su espalada y comenzo a correr, yo solo miraba su nuca, notaba su calidez, sus latidos, como recorre su sangre por sus venas, su respiracion agitada. Me apege mas a el, estando a su lado me tranquilizaba, ¿porque sera?

A los pocos minutos llegamos a la casa de mi tia, estaba tan asustada y preocupada a la vez. Mi vista se torno a una de horror, la casa estaba en llamas, el calor aumentaba, corri hacia ella sin hacerle ningun caso a los gritos de Andres el cual gritaba que me deteniera, no lo haria.
Entre y busque su cuerpo el cual aun llacia en el suelo, estaba tan palida, sin ninguna emocion en ella, las llamas y el humo que producia hacian que mi respiracion se agitase y mis ojos comenzaran a arder, me daba igual lo que pasase, yo queria un entierro a mi tia y asi lo haria.
Las llamas me quemabam algunas veces casi quitandome piel y saliendo sangre de ella, con algunas muecas de dolor saque a mi tia de alli, cogidas en mis brazos acompañada de lagrimas en mi rostro.

Fui en dirección a Andres y me arrodille delante suya mientras le veia y sostenia a mi tia en mis brazos, su calidez se había ido, su sonrisa desvanecido y todo en ella había desaparecido.