La chica de dos razas

Capítulo 3

Veía como aquel lobo se acercaba a mi peligrosamente mientras enseñaba sus grandes fauces pero después de estar un rato viéndome se relaja y se sienta

- Belén soy yo, Miguel - la voz familiar de el hace que salga de mi modo vampiro

- ¿Qué pasa?

- Quiero ir a ver a Teresa una vez mas, me iré en unas horas, ¿te apuntas?

- ¿Quieres que te acompañe?

- Obviamente... no crees que se extrañara si no nos ve juntos

- Es verdad... bueno vamos a su casa

Mientras corríamos entre los árboles, mi vista de vez en cuando se tornaba a Miguel, en cualquier momento podría matarme prefiero estar atenta, al estar a escasos metros de casa de Teresa, Miguel da un gran salto y se vuelve a su forma humana, va detrás de la casa de Teresa rápidamente y se cambia, odio que cuando se transforma, se quede desnudo, la verdad nunca le he visto desnudo siempre que lo hace yo cierro los ojos y me guió por la temperatura, si es verdad somos como las serpientes... después de estar ya cambiado Miguel viene a mi lado y llamó al timbre, escucho pasos detrás de la puerta y esperamos a que habrán

- Anda chicos, ¿qué tal estáis?

- Eh esto...bien ¿y Teresa?

- Dentro en su cuarto, pasad

Como odio a esta humana, me da un asco increíble, todo lo que le hicieron a Teresa... y ella los perdona, me encantaría romperle esa carita que tiene y arrancarle el corazón...

De un momento a otro noto una mano agarrándome con mucha fuerza

- Belén , tranquila- dijo Miguel como un susurro

- Como puedo estar tranquila, después de ver a esta... a esta persona

- Ya lo se, pero no tiene que saber que queremos matarla, además no podemos, piensa en Teresa ella la perdona y nosotros no podemos hacer nada, ya sabes las reglas

- Es verdad, ya me tranquilizo pero suéltame

Después de sentir como Miguel me suelta, respiro hondo y entramos en la casa, caminamos hacia la habitación de Teresa y abrimos su puerta muy suavemente, y nuestra vista fue incluso de sorpresa, la encontramos dormida y se aprecia que ha estado llorando...

Me acerco a ella y me siento a su lado, pero sin previo aviso Teresa se levanta con mucha brusquedad y unos colmillos aparecen en sus labios mientras va abriendo sus ojos, que han cambiado a un rojo intenso, me levanto bruscamente y Miguel se pone alerta pero van desapareciendo tanto los colmillos como el rojo de sus ojos que se vuelven de nuevo verdes y Teresa se empieza a levantar

- Eh? Chicos...¿Qué hacéis aquí?- su voz, adormilada

- ¿No podemos pasar todo el tiempo posible contigo ? - dice Miguel, rompiendo el silencio incomodo

- Claro, siempre os querré a mi lado - esta nos sonrie para luego comenzar a hablar un poco de todo, evitando a toda costa el tema de que se va.

- Bueno, veo que ya es bastante tarde y tu estarás algo ocupada - decir aquellas palavras me dolía, es mi amiga, después de todo la quiero como si fuera mi hermana

Ella solo asintió y nosotros nos fuimos de su cuarto, bajamos las escaleras y abrimos la puerta para irnos pero una voz nos detiene

- Chicos ¿Ya os vais?-dijo la madre de Teresa detrás nuestra

- Si...adiós-dijimos los dos de mala gana

- Vale, cuidaros

Nada mas salir de casa y estar alejados y entre los arboles me detengo y golpeo a un árbol que había a mi lado con mis fuerzas, haciendo que este se rompa y se caiga encima mío, pero lo cojo sin ningún esfuerzo y lo dejo en el suelo

Como odio a esa mujer, todo lo que ha tenido que pasar Teresa y por culpa de esos humanos repugnantes, y sobretodo aunque nosotros lo hayamos visto ellos se portan así con nosotros...que asco que me dan

- Ya se que no puedes aguantar tus ganas de matar a esos sujetos pero pronto ya no estarán con ella

- Lo se pero...¿no te dan asco?

- Si y sobretodo repugnancia pero aun así me aguanto y nos les hago nada, así que tranquilízate - la voz de Miguel, por mucho que ñe molestase el hecho de que es un chucho, me tranquilizaba, años de pasar juntos, supongo que ha creado algo en mi que le soporta.

Yo solo asentí y me fui del lugar dejando a atrás a Miguel, corría y corría sin mirar a atrás hasta la fina línea que nos separaba un clan de otro en el cual hay dos salientes y para pasar de un territorio a otro hay que saltar pero en aquel agujero solo hay una profundidad en la que al final hay rocas puntiagudas, afilada como mil cuchillos

Cogí velocidad y salte llegando al otro saliente con éxito pero muy justo, es por eso que solo los de las dos razas podemos saltar esto un humano no hubiera llegado ni a la mitad, habría muerto en vano...volví a coger velocidad y llegue cerca de mi clan...se veían personas a lo lejos, pero una voz me saca de mi búsqueda

- Hola- dijo sonriente Fran, con su mirada carmesí y al igual que todos pálido.

- ¿Que pasa?

- Esto... - se le nota nervioso, y mucho.

- Dime

- El jefe quiere verte

- Vale

Busque al jefe entre todas aquellas personas y mas lejos de ellos estaba ahí, con su piel pálida mas que la nuestra, se podría decir que el si es un muerto en vida...dicen algunos que lleva aquí mas de 10 siglos...yo no se que pensar, pero tampoco me debe importar, pero se ve tan frió...parece enfadado...estaba mas tenso de lo normal.

El pelo que tanto le gusta tenerlo suelto, porque lo tiene un poco largo llegándole a los hombros con su color negro puro...como la oscuridad, y sus ojos rojos intenso y sus colmillos sobresalidos sedientos de sangre...ahora mismo no me gustaría verlo pero si me ha llamado será por algo, me acerco a el y empieza a hablarme.

- Bueno...ya sabes cuándo se ira ¿ verdad?- parecía enfadado y aguantando las ganas de matar

- Si...esto se va en dos días

- Vale, entonces tu partirás ahora...el otro clan te esta esperando

- Esto señor...ellos...saben de ...ella

- No y ni se te ocurra decírselo, ¿entendido?

- Si

Me alejo de el pero sin dejar de mirarlo, me doy la vuelta pero siento que alguien me sujeta con fuerza mi hombro, giro mi cabeza y veo a nuestro jefe mirándome con una mirada asesina

- Mmmmm...me gustaría saborear tu sangre

Estaba muy asustada...no sabia que hacer, pero una chica se acerca...espera Nuria...

- Oh, Nuria...me has venido perfecta ven aquí

- Nuria...por favor no dejes que te mate- le digo a su oído mientras me alejo

- Vale, cuídate hermanita

Me fui de ahí, dejando a mi hermana mayor con ese monstruo, después de estar lo suficiente lejos me subo a un árbol y miro a mi hermana...el jefe le estaba chupando su sangre...espero que sobreviva no quiero que ...bueno muertos estuvimos hace mucho...

De nuevo una voz me saco de mi trance detrás mía...me giro y veo a Fran saludándome con una sonrisa

- ¿Que quieres?- dije aun preocupada

- Como que quiero...si voy contigo...

- ¿Eh?

- Voy contigo, me lo ha mandado el jefe

- ¿¡EH?!