Ellos dos solo asintieron, a la par, llego la hora de acabar esta disputa tan ridicula entre las dos razas. LLeve a los dos a un sitio seguro, arriba de unos arboles, seguros de cualquier ataque. Mire a la lejania lo que ocurria a escasos metros debajo de nuestros pies, cientos de vampiros y lobos peleaban a muerte los unos con los otros, algun ya habian caido en batalla pero los unicos que me interesaban eran ellos dos, Hermis y Eros.
Corri lo que mis piernas me dejaron, viendo a mi paso la lucha interminable entre las dos razas, buscando con desesperacion a los dos.
Segundos despues, tanto vampiros como lobos comenzaron a caer, desmayados al frio suelo. Siento una gran presion en mi pecho, asi que ellos dos han empezado, este es mi unica oportunidad.
Pocos quedaban en pie, mas seguian viendo a su adversario con odio. Y asi, entre tanto caos, encima de una gran roca, como si de espectadores se tratase, vi a Eros y Hermis mirar el terrible paisaje a sus pies.
Cogi aire con fuerza, con todo el odio que retenia y grite - ¡Eros, Hermis! - llegando a escasos metros de ellos dos, todos los que antes buscaban la sangre de su enemigo ahora oslo nos miraban.
- Veo que esos no son buenos ni para matar a una simple niña - dice Hermis mientras me dedica una sonrisa burlona
- No hagas nada de lo que puedas arrepentirte Teresa, no creas que te dejaremos matarnos asi de facil - dice Eros serio, mientras parece intentar intimidarme con su mirada.
- Vosotros dos sois los causantes de tanta sangre derramada, va siendo hora de que la vuestra manche el suelo - crujo todos mi huesos, dejando salir a la extraña fuerza de mi, me sentia tan poderosa, sin miedo a nada, solo el sentimiento de matar a ellos dos, el odio.
Antes de poder avalanzarme estos dos llaman a pleno pulmon a las dos personas que no queria ver en estos momentos. Ellos llegan rapidos, con algunos rasguños y un poco magullados, supongo que por la pelea.
- Miguel, mata a esta traidora - dice Eros con seriedad mientras sonrie un poco, maldito seas.
- Belen, no me decepciones, haz que sufra - Hermis solo me mira con deseo de matar, lo veia en su mirada, ese color carmesí...
- Chicos, por favor no quiero hacero daño, quiero que esto acabe y para ello tengo que matar a est- antes de poder acabar, ellos dos comienzan a atacarme sin cesar, retrocediendo varios metros de los alfas - chicos, parar - digo como puedo mientras sigo esquivando cada uno de sus ataques
Parecias no escuchar ni una sola de mis palabras. Cada vez se ,e hacia mas dificil esquivar sus ataques, sufriendo algun que otro rasguño, no quiero herirlos...no...
Antes de poder reacciones, estos dos se paran de repente y comienzan a perder el equilibrio, nos encontrabamos a escasos dos metros de Oliver y Ricardo, veo que les afecta mas al estar mas cerca.
Consegui despistarlos entre los arboles como pude, perdiendolos de vista.
Corri como pude de nuevo hacia Eros y Hermis, verlos divertirse con esta crueldad, me enferma.
- Tu no te iras a ningun sitio - escucho una voz a mi espalda, para luego ver como un pequeño puñal atraviesa mi pecho.
¿Voy a morir?
ESTÁS LEYENDO
La chica de dos razas
WerewolfUna guerra entre las dos razas mas peligrosas que haya pisado nuestra amada Tierra. Dos jóvenes rompiendo reglas y un monstruo nacido de aquellas personas. Una persona con una misión desde que nació. Una masacre se acerca. Una gran guerra se avecina...