Sus carcajadas y las de Yesung estaban, posiblemente, llamando la atención de todos los que estaban con ellos en el salón de actos. Donghae se tapó la boca queriendo evitar ser el centro de atención, pero que Yesung siguiera contándole todas las tonterías ocurridas en la fiesta no era de gran ayuda. Se tapó la cara con las dos manos, inclinado hacia delante y tomando aire profundamente para relajarse. Ryeowook, enfurruñado a su derecha, mascullaba lo mucho que los odiaba.
–Venga, Ryeo, no es para tanto. –la mano de Yesung pasó sobre sus hombros intentando alcanzar a Ryeowook, pero este se alejó hasta pegar su hombro a la chica a su lado.
–No me hables.
Después de oír los múltiples rechazos de Ryeowook a Yesung y calmarse, se puso recto y se giró hacia él, juntando las dos manos para ayudar a Yesung.
–Perdón. –ladeó la cabeza, insistiendo con la mirada fijamente puesta en él.
Frunciendo los labios, Ryeowook cruzó los brazos y miró al escenario todavía vacío. Al menos, suspiró para sí mismo, ya nadie les prestaba atención.
–La culpa es de Jongwoon. –Yesung gimió a su espalda; cuando lo llamaba por su nombre no era buena señal– Tú ni siquiera estuviste allí.
–Es verdad. ¿Qué estabas haciendo?
De pronto, como si todo lo anterior hubiese sido solo imaginación suya y nunca hubiese pasado, Ryeowook y Yesung lo miraron fijamente e igual de interesados. Enrojeció abochornado, recordando lo que sería una respuesta sincera. Se giró hacia el escenario y apretó los dedos en las rodillas. Sus amigos se rieron con maldad.
No podía decírselo. No podía contarles que no había ido a la fiesta porque su compañero de piso se habían dado cuenta de que por fin estaban solos y podían tener sexo sin problemas. Tampoco podía decirles eso porque ellos no sabían lo ocurrido con su madre.
No podía siquiera nombrarles el pequeño atisbo de sentimientos que estaba comenzando a sentir cuando pensaba en Hyukjae.
Miró la pantalla de su móvil para disimular, aunque solo se fijó en que era viernes y después de la charla podría huir a casa. Entonces esperaría a que Hyukjae volviera de la comisaría y le preguntaría todo lo que Jungsoo había asegurado que no estaría claro hasta ese día.
–Vamos, Hae, te hemos dado una semana para que nos lo cuentes.
–Estábais enfermos. –masculló intentando cambiar de tema. Si no hubiese sido porque la charla de ese día parecía importante para las notas finales, ninguno de sus amigos habría aparecido por allí aunque ya estaban lo suficientemente bien como para acosarlo a preguntas.
Por suerte, antes de que ellos pudieran continuar exigiéndole una respuesta, el director de la escuela habló por el micrófono. Su corto discurso solo dio las gracias a los estudiantes de derecho por asistir y su voz grave, con orgullo de saber que esas "personas muy importantes" habían ido a su universidad, presentó a tres hombres que Donghae conocía muy bien.
–¡Choi Siwon, Park Jungsoo y Lee Hyukjae!
Su mandíbula amenazó con tocar el suelo mientras los veía entrar. Sabía que tenían una conferencia pero ninguno le había dicho que fuese en su universidad. Apoyó la barbilla en una mano, sintiéndose idiota por no haberlo deducido por sí mismo. Aunque Siwon y Jungsoo también parecieron sorprendidos cuando lo vieron entre los estudiantes.
Hyukjae, en cambio, hizo una mueca sin mirarlo. ¿Lo habría visto? Parecía más centrado odiando el estar rodeado de gente.
Ninguno de los tres parecía nervioso. Uno porque era famoso mundialmente. Otro, porque estaba acostumbrado a dar conferencias de ese tipo. Hyukjae porque simplemente era Hyukjae. Donghae sonrió, moviendo la cabeza, viéndolo pararse junto a Siwon con las manos en los bolsillos de sus pantalones rotos.
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Crown [EunHae +18]
Fanfiction«En un mundo de habitaciones cerradas, el hombre con la llave es el rey y, cariño, deberías verme con una corona» Eunhyuk está aburrido de ser el mejor y más buscado ladrón de todo el mundo, de que nadie sea lo suficientemente bueno como para captur...