Capítulo dedicado a Niyomismalose_ solo porque es cul e.e
Pd: Varias chicas me pidieron la canción de la que tanto hablo, se las dejo en la caja de multimedia con la letra en español<3
¡Disfruten su lectura!
~*~
La mano de Tobías encaja a perfección con la mía. Su alta estatura me mantiene protegida del frío golpeando nuestro cuerpo y, cuando Andrea se detiene frente a un restaurante, ambos la observamos.
—¿En serio piensas pagar todo lo que ellos van a comer? —Pregunto, deteniéndome para observar al moreno que me sujeta contra su cuerpo. Debemos separarnos un poco para encontrar nuestras miradas pero, en ningún momento, él deja de tocarme—. Ellos comen demasiado.
—Una vez alimentados querrán regresar a casa —Su mano retira un mechón de cabello que intenta cubrir mi rostro—. Y cuando eso pase; te tendré para mi sola y te haré el amor hasta que ya no puedas más.
—¿Podrían dejar de comerse en medio de la calle y pagar nuestra comida? —Lucas nos interrumpe, haciéndome reír cuando Tobías suelta un gruñido por lo bajo—. Es bastante molesto salir con ustedes mientras intentan no meterse mano cada tres minutos, lo saben, ¿no?
Bien. Lucas la lengua floja había vuelto.
—¿Puedes dejar de ser un dolor en el culo? —Me giro sobre mis pies, pero antes de poder alcanzar al moreno, Tobías me sujeta, rodeando mi cintura con sus brazos—. Le diré a tu madre que no te saque la correa.
—Digamos que mi madre me está dando más libertad que antes —Me sonríe con socarronería, haciéndome rodar los ojos—. ¿Vamos a comer o qué, grandote?
—Pueden adelantarse —Tobías responde, acercándome más a su cuero—. Tengo que hablar con Drea antes.
Lucas rueda los ojos, pero cumple la orden del moreno, arrastrando a Andrea al interior del concurrido restaurante. Grandes manos se posan sobre mis hombros y, cuando me distraigo un segundo, Tobías me obliga a girar, haciendo que observe sus ojos azules.
—¿Todo está bien? —Mi ceño se frunce con confusión.
—¿Por qué lo preguntas?
—Porque contigo no puedo dejar cabos sueltos —dice, confundiéndome aun más—. Siempre estás formando conspiraciones en tu cabeza. Quiero saber si todo está bien.
—Tan bien como puede estarlo —suelto—. Trataré de compartir mis conspiraciones contigo, siempre y cuando aparezcan, ¿está bien?
—Bien —Su lengua se pasea por su labio inferior y no puedo evitar enfocar toda mi atención en aquel sutil movimiento—. Porque tengo pensado varios castigos si no lo haces.
Él se inclina, sin siquiera detenerse a observar la atención que estábamos atrayendo y me besa, me besa como solo él sabe hacerlo y, por un segundo pienso que terminaré en el suelo cuando mis rodillas tiemblan, pero Tobías me sujeta, atrayéndome aun más hacía su cuerpo.
—No quiero que gastes dinero en mi —Las palabras abandonan con rapidez mis labios, haciendo que los ojos azules del moreno caigan sobre mí. Parece congelado y hasta un poco enojado, pero no dejo que su mirada me intimide. Él quería que dijera todas mis molestias y empezaría con ello—. No me gusta que paguen cosas por mí. No cuando puedo pagarlo yo.
—Está bien —Accede, retirando lo que parecía ser algo de mi mejilla—, pero hoy pagaré yo. Recuerda, los invité.
—¿No podías llevarlos a comer una hamburguesa? —Pregunto. Tobías ríe mientras me hace girar en sus brazos y nos encamina hacia el restaurante—. No me importaría mucho, en realidad, hace mucho que no como una.
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WildFire ©
ChickLit"Tocame como a tu primera guitarra, donde cada simple nota es demasiado fuerte." -WildFire, De...