Hades y Perséfone una historia diferente

Capítulo 29: De regreso a casa

Hades estaba abrazado a Perséfone. Jamás había echado tanto de menos a nadie. Lo que sentía en esos momentos era tan fuerte que hasta le daba miedo. Su olor a flores le calmaba los nervios, hacia dias que no se sentía tan relajado, y se prometió a sí mismo que nunca, nunca jamás la dejaría escapar.

Perséfone al principio estaba enfadada con el dios, se había sentido abandonada y lo había echado muchísimo de menos. Pero cuando lo vio allí en la isla, todos esos pensamientos se borraron de su mente. Sólo quería sentir el contacto de su cuerpo. Tenía la cabeza hundida en la túnica del dios. Le encantaba sentir su olor, esos brazos fuertes que la agarraban y no la soltaban.

La diosa de la naturaleza se materializo rapidamente en su isla. No había visto a Hera durante toda la festividad y eso le había dado mala espina. Cuando llego a Sicilia le sorprendio la imagen junto a la playa, de Hades y Perséfone abrazados. Parecían querer fundirse el uno con el otro. Démeter no apreciaba en absoluto al señor de los muertos, pero tenía que reconocer que era lo que más feliz hacía a su florecilla de primavera. Por otra parte Per era lo único que Démeter conocía que hacía feliz al dios de los muertos.

El dios de pelo de fuego noto que se le humedecia la túnica. Seph estaba llorando. La cogio de la barbilla y la observo. Sus ojos estaban llorosos, y giro la cabeza para que Hades no la viese. No le gustaba que la viesen llorar, no quería parecer una damisela en apuros.

-Vamos cariño no llores. Soy un tipo grande y me vas a hacer llorar.- Dijo el dios con una sonrisa sarcastica.

Seph esbozo una pequeña sonrisa. Entonces su expresión cambio al enfado.

-¡Jamas vuelvas a hacer algo así!¡Nunca!- La joven rubia se empezo a poner roja y las lagrimas volvieron a correr por sus mejillas.

Hades la empujo contra su cuerpo y la abrazo. Seph volvio a hundir el rostro en su tunica mientras repetia: -¡Nunca!-

- Nunca Seph, te lo prometo.-

La diosa verde estaba apunto de llorar ante esa escena .Odiaba interrumpir ese momento, pero necesitaba saber que había ocurrido durante su ausencia.

-Ejem, ejem.-

La pareja se volvio hacia la diosa. Perséfone se separo de Hades y se seco las lagrimas con la mano.

-Siempre tan oportuna, Demi.-Dijo el dios de los muertos.

-¿Que haces aqui Hades? Si Hera se entera de que has estado aqui comenzara a sospechar.-

-Desde luego no creo que piense que tenemos una aventura Demeter y yo .- Dijo el dios de ojos amarillos con una sonrisa ladeada mirando a Seph. La broma surtio efecto y la muchacha solto una pequeña carcajada.

-No tiene gracia.- Replico Demeter-Acordamos que no vendrías por la Isla. Es por la protección de Perséfone.-

La joven odiaba que se hablase de ella como si no estuviese presente.

-En primer lugar, yo no he acordado nada, a mi nadie me ha preguntado nada. Estoy harta de que otros tomen decisiones por mi. He llamado a Hades porque vino Hera a la isla.-

La diosa verde examino a Per.-¿Estas bien?¿Te ha hecho algo?.-

-No me ha ocurrido nada, y hemos arreglado las cosas con ella. Incluso intercedera por nosotros ante Zeus para que podamos casarnos.-

La diosa verde estaba perpleja.

-Vuestra pequeña flor de primavera se defiende muy bien solita.- Dijo Hades orgulloso.

-No te quites responsabilidad que tu apoyaste el que yo viniese aqui.- Respondio la muchacha mirando al dios del averno.

-Lo se nuez moscada y ya veo que no te olvidaras facilmente de ello.-