Hades y Perséfone una historia diferente

Capítulo 45: Doble sorpresa

Perséfone entró en la villa del héroe y se dirigió a la habitación de la pareja. Al aparecer por el umbral de la puerta divisó a Phil,Hércules y a su hermana. Y para su sorpresa su hermana que estaba en la cama no tenia uno, ¡sino dos bebes!

-¡Per!¡Estas despierta!.- Dijo Meg con alegria.-Estabamos muy preocupados por ti, pensabamos que despertarias a los 3 días.-

-Yo también creía eso.- Dijo la joven rubia mientras se dirigía a abrazar a Herc y Phil.

-¡Estas realmente excepcional!¡Toda una diosa!.- Dijo el sátiro echando con su mano el poco pelo que tenía hacia atrás.

Seph sonrió.-Bueno veo que no soy la única que tiene novedades. Hades me dijo que Hermes había estado en el Inframundo y le contó que habías dado a luz.-

-Hablé con mi padre para que fuese Hermes al Inframundo a ver como iba todo. Estabamos preocupados por ti.- Dijo el semidios pelirrojo.

-Y aprovechando le dio la noticia.- Añadió la muchacha de ojos violetas.

-Te has adelantado.- Dijo Seph, acariciando la cara de uno de los bebés. Eran un niño y una niña. Ambos con una pequeña mata de pelo rubio y los ojos violetas. Se parecían mucho, los dos con rasgos afilados y nariz respingona como Meg y Seph.

-Me dijo Asclepio que al ser mellizos era normal que se adelantasen, pero que todo habia salido bien y los pequeños estaban sanos.-

-Ya veo,¿Y como se llaman?.- Pregunto Seph a su hermana mayor.

-Hyllos y Deyanira.-

Aquel momento fue interrumpido por Cyrene que entró en la habitación con una bandeja. Al ver a su hija menor allí, con ese vestido negro y la estola negra y morada, y ese aura morada que le acompañaba... se le cayó la bandeja. No esperaba ver a Perséfone, y mucho menos con ese aspecto. Parecía recién salida del Inframundo, aunque claro esque en realidad estaba recién salida del Inframundo.

Hércules y Phil salieron de la habitación.-Será mejor que entrenemos un poco chico, nunca se sabe cuando habrá una emergencia en Tebas.-

Cyrene comenzó a recoger la bandeja y Perséfone le ayudó.

-No esperaba verte aqui... ni... así.- Dijo Cyrene.

-¡Mama! Sabias perfectamente que Per había comido la granada del Inframundo y llevaba 6 días dormida.-

Cyrene miró de cerca el rostro de su hija pequeña. Siempre había tenido un color muy saludable y ahora estaba tan pálido... Terminó de recoger y se disculpó: -Lo siento debo marcharme.-

-Le está costando adaptarse a... bueno a todo.- Intentó explicar Meg.

-Le está costando adaptarse a mi. Ni siquiera conoce a Macaria.-Replicó la semidiosa.

-Porcierto¿donde está? Podría haberse quedado con nosotros hasta que despertases...-

-Está con Hades. Y no te preocupes... estos días ha estado muy bien cuidada. Es la princesita del Inframundo.-

Meg sabía que Macaria era la hija de Hades, pero aún así no se imaginaba a Hades como un padre... aunque tampoco se lo imaginaba como una pareja, ni como nada que no fuese el terrible dios de los muertos. Tampoco estaba muy deacuerdo conque Thánatos fuese el padrino de la niña. Aquel dios siempre le había dado pavor. No sabía como Per podía sentirse feliz en el Inframundo. Una cosa era que aceptase que su hermana quería a Hades y tenía una hija con él, y otra cosa muy diferente era que aceptase a Hades. Con él las cosas siempre estarían tensas.