Los mas buscados -Jeff the killer-

Tobías, viejo amigo.

¿Qué rayos había pasado? Acaso ¿Jeff y yo nos besamos?.... Casi nos besamos, sentía mi cara completamente colorada. Me tire en la cama con la cara hundida en una almohada. No podía creer que casi beso al chico que me ha intentado matar más de una vez y que además me tenía secuestrada. Me puse a pensar cómo se dieron las cosas y me sentí lo más avergonzada del mundo. ¿Todo era un mal entendido? No.... Hay una razón por la que no lo eh delatado con la policía aun que eh tenido la oportunidad. La razón se estaba empezando a volver más que obvia.

-Alexandra- La voz de Jeff se escuchó en mi cabeza. Me enderece y ahí estaba el en la puerta.

-Mande- susurre.

-Un amigo me acaba de marcar, vendrá en la noche y pues.... Creo que te tendré que atar y amordazar, después de todo eres mi rehén...- Se rasco la nuca.

-Está bien... entiendo, debes proteger tu 'reputación'- suspire.

-Eres muy lista, pecosa- Me dijo sentándose en la cama y acercándose a mí.

Sentí que mi rostro se ponía rojo de nuevo, supuse que al final mi rostro se puso colorado porque Jeff se puso a reír. Su mano frio se posó en mi mejilla.

-Me gustan muchos tus pecas- soltó casi en un susurro.

-A mí me encanta el mar que tienes por ojos...- En serio esos ojos azules me tenían hipnotizada.

Él se rio y volvió a acercar su rostro al mío.

-¿A si? Pues yo amo la miel en tus ojos...- Dijo sonriendo.

No pude evitar soltar una carcajada.

-Eso sonó mal ¿Verdad?- Se rio.

-No tanto....- dije acercándome más a él.

Nuevamente estaba a punto de besarlo cuando volvieron a interrumpir esta vez tocado la puerta.

-Ya voy- Grite poniéndome de pie y dejando a Jeff confundido en la cama. -¿Quién es?- Mire por el picaporte.

-Una mejor pregunta es quien eres tú....- Una voz varonil se escuchó. Del otro lado de la puerta había un joven castaño de ojos grandes verdes.

-Espera un segundo....- Abrí la puerta -¡Tobías!- Grite y lo abrace. El chico estuvo indiferente unos segundos pero después me correspondió el abrazo.

-¿Oster?- Pregunto.

-¡Si! Toby ¿Dónde has estado? ¿Qué haces aquí?-

-Larga historia.... Un amigo me dio esta dirección y...-

Jeff salió del cuarto cubriendo su rostro con la bufanda.

-Alexandra ¿Qué habíamos dicho de abrir la puerta?.... ¿Ticci? ¿No vendrías hasta la noche?-

Toby se soltó de mi abrazo y entro a la casa.

-Jeff ¿Cómo has estado hermano? Pues estaba cerca haci que me adelante- Toby choco puños con Jeff.

-Bien....- hizo un silencio y me miro. -¡Alexandra cierra la puerta y ve al cuarto! De nuevo desobedeciste... ya sabes lo que significa eso.-

Trague saliva cerré la puerta y camine hacia la recamara pasando por el costado de Jeff y Toby. Este tomo me brazo.

-Oye, ahora que lo pienso ¿Tu qué haces aquí Oster?- Toby me sonrió.

-Espera, espera ¿Se conocen?- interrumpió Jeff antes de que yo pudiera contestar.

-Sí, la conozco de la escuela secundaria, ella era una buena amiga mía... en realidad la única-

Jeff tenía confusión en su rostro y yo una sonrisa.

-El igual era mi único amigo, pues ya sabes, lo que te conté de mi....- trague saliva –De mi primo... el también sabia de eso, era a la única persona que le hablaba. Pero después cuando ya casi salíamos de la preparatoria el desapareció...-

-Lo siento, en serio no quería dejarte- Toby tomo mis manos.

-Está bien....- susurre

-Oigan.... Eso quiere decir que... bien Ticci ya conoces a mi linda rehén- Dijo Jeff jalándome hacia él y abrazándome de los hombros

-¿Rehén?- pregunto Toby

-Si... es mi médico personal y... mi mejor amiga-

-Ya veo... amiga- Dijo Toby riendo y haciéndole un guiño a Jeff que también rio

-Sí, amiga... aun- Se seguí riendo Jeff. –Alexandra, ve a la habitación, te llamo para cenar.-

Me fui a la habitación y me encerré, Yo quería estar con Toby pero Jeff ya me había mandado a la habitación y no quería desobedecerlo.