Hey, viejo amigo.
Quizás te interese saber que la peste aún no se me quita de encima, pero la verdad es que al recordar la sonrisa que vi que tenías cuando recuperaste tu trabajo esa misma peste se vuelve soportable.
Es agradable saber que logré hacerte sonreír aún después de todo lo que te hecho. Quizás no sepas que he sido yo, ¿pero hay que empezar por algún lado no?
Ahora me he propuesto seguir este camino, así que no te sorprendas si más cosas buenas te pasan sin que sepas porqué.
Aunque admito que no es fácil mantenerme alejado mientras intento ayudarte, y menos cuando pasas tanto tiempo con aquel chico.
¿Cómo se llamaba? Creo que era Ian o algo, solo recuerdo que esta en un curso más alto que el nuestro. Pero desde que te he visto con él en el almuerzo no he dejado de preguntarme algo.
¿Acaso son... ya sabes, pareja? No es que haya algo malo con eso, por dios, sabes que no quiero decir eso.
Es solo que... no sé, me interesa. Ya lo sabes, aunque ya no seamos amigos, yo te sigo viendo como uno y no puedo no sentir curiosidad cuando te veo siendo tan cariñoso con alguien.
Porque es solo curiosidad, ¿no? Quiero decir, bueno, mejor olvídalo.
Creo que necesito dormir más, mi cerebro no está funcionando muy bien.
Tu viejo amigo.

ESTÁS LEYENDO
Hey, viejo amigo
ContoLas personas no comprenden el valor de lo que tienen hasta que lo han perdido. Y West lo ha comprendido de la peor manera. "Es difícil reparar algo roto, más aún cuando el que lo ha roto has sido tú". Secuela de "Hey, mejor amigo", se recomienda lee...