26. Mia

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Afuera ya había oscurecido cuando caminé a toda prisa a mi clase de música, la última clase del día, por fin, y como de costumbre iba tarde. De todas maneras daba igual, nos habíamos estado saltando las clases de música de los últimos días y nuestra situación con la señorita Lauren no podía empeorar demasiado si llegábamos tarde; aunque la verdad es que dudaba mucho de que siquiera se hubiera enterado de que habíamos estado faltando la hermana de Joey y yo a su clase. Sin embargo no podíamos seguir ausentándonos con las nuevas reglas que habían establecido, si nos encontraban por ahí nos echarían.

   La academia había estado tensa desde el anuncio de los directores hace unos dos días, y a pesar de que algunos no se lo habían tomado en serio al principio después de que echarán a dos chicos de los grados mayores por fumar en los jardines dos horas después del toque todos estaban seguros ahora de que el asunto iba en serio. Esos dos días las seis habíamos tratado de hacer que nuestro enfado con el señor Weiß menguara, pero aun no estábamos del todo tranquilas, y definitivamente Joanne seguía furiosa.

   Karoline caminaba en silencio a mi lado respirando con dificultad por la distancia desde el edificio de entrenamientos y luego las escaleras que teníamos que recorrer hasta llegar a la cuarta planta donde estaba el salón de música.

   Música era mi clase preferida de todo el día, era impartida por la señorita Ernst, que era la hija de nuestro maestro de matemáticas del año anterior. La señorita Ernst nos había dicho desde el primer día que le tratáramos por Lauren y siempre buscaba la manera de animarnos la última hora del día.

   Lawrence y Luka siempre terminaban armando alguna especie de mini concierto para todos y al final del día hasta Geneviève, que nunca solía cantar en público, terminaba bailando sobre una silla con Mina, Nessa, Mary y Alexis. Miré a mí alrededor y no pude ver a Alexis por ningún lado, me pregunté dónde se había metido ya que no era de las que faltan a clases.

   Blian y Pierre pasaron a nuestro lado con una guitarra y bajo en manos alborotándonos el cabello a las dos como si conocieran a Karoline desde siempre, así eran ellos. Con Pierre siempre nos habíamos llevado bien, pero por el motivo que fuera él nunca se había acercado demasiado a nuestro grupo.

   Cuando entramos Mirjam estaba de pie sobre una silla mientras la señorita Ernst observaba todo sentada de piernas cruzadas sobre su escritorio. Karoline se quedó mirando el salón con bastante duda pintada en el rostro desde la puerta.

   Sébastien estaba conectando un par de micrófonos y los instrumentos a los altavoces con ayuda de Gustav; Andrew estaba con su enfurruñamiento habitual sentado en una silla apartada tratando de quitarse de encima a Nessa y Mina que no paraban de canturrear a su alrededor solo para ver cuanta paciencia podía tener; Luka, Lawrence, Pierre, y Geny trataban de ponerse de acuerdo con la chica que no paraba de cantar algo sobre la silla con los audífonos puestos sobre que interpretar; y  Mary observaba a Karoline.

   -¡Karoline!- saludó Lauren desde la mesa-. Porque eres Karoline, ¿verdad?- Kar asintió lentamente tratando de darle una sonrisa-. Soy la señorita Lauren Ernst, pero llámame Lauren. Puedes tomar asiento- la maestra miró por el salón tratando de encontrar un asiento que no estuviera ocupado y apuntó al lado de Mary-. Al lado de Mary estará bien.

   Lawrence levantaba los pulgares hacia Mirjam en ese momento y giró hacia los demás.

   -Five colors en her hair. Vamos, como bienvenida a Kar.

   Las guitarras y la batería empezaron a sonar y Mirjam cantó con Luka sobre su silla con su cabello rubio teñido en varias capas de colores revoloteando a su alrededor mientras bailaba sobre la silla con despreocupación.

1. Historia de los Guardianes: Otoño. |En edición|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora