Inocente Corazón Mío

Universidad (2)

Los nervios me estaban matando con esto de ir por primera vez a una universidad. La idea de ir con Diego no me gustaba pero en parte lo agradecía. Llegar sola y nueva a un lugar como ése, quizás no sería la cosas mas fácil que haría en mi vida. Me arreglé sencilla, tampoco quería llamar la atención indeseada de nadie. De todas formas no iba a la universidad para buscar ningún ligue.

-¿Estas lista?-preguntó Diego en tono burlón.

-Sí.

-Pensé que te quedarías. -comentó. Quizás me daba conversación por que también estaba nervioso.

-Evita los comentarios Diego. Créeme que no me hace gracia ir contigo.

-Bueno princesa, sí quieres podemos ir cada cuál por su lado. No tengo ningún problema con eso. -añadió.

Sólo pensar que llegaría sola era razón suficiente para aguantar a Diego durante el camino.

-No soy tan niña. Por favor muévete.

-Mujeres.

En la universidad...

-Éste será el salón de clases oficial de tecnología. Es importante que todos los estudiantes tengan su clave de acceso ya que cada cuál tendrá un computador asignado. -el instructor continuó hablando. -Si casualmente alguno olvida su clave, entonces tendrá que presentarse para desbloquear el sistema.

-No hay problema con eso señor. -pronto tendría acceso a los sistemas universitarios.

-Estarás por una semana codificando los sistemas. -dijo el instructor.

-Muy bien. ¿Eso es todo?

-Por ahora sí, Sergio. Que tenga buen día. -Ah. Recuerde que trabajará con estudiantes. Lo que le quiero decir que hay hombres y mujeres. Trate de no hacer amistad con nadie para evitar otros problemas.

-No se preocupe señor. - no sabía el porqué de la advertencia pero el tampoco estaría mucho tiempo allí.

Estrella...

-Te espero a la salida.-le advirtió Diego.

-Sí no hay mas remedio.-rodó los ojos .

-No te pierdas. -se despidió con un guiño. Ella torció el gesto.

Caminó por el largo corredor que la llevaba directo al salón de clases. Al llegar se topó con un salón bastante atestado de estudiantes. !Fantástico! Lo que le faltaba. La profesora era una señora rellena de baja estatura por su aspecto debería retirarse pronto. Buscó lugar donde sentarse, al final de la fila quedaba una silla disponible.

-Hola. ¿Está ocupada? -preguntó a una chica con un pelo tan lacio y tan rubio como el sol. La chica la miró con cierto desprecio.

-¿La ves ocupada ?-me pregunta de vuelta.

-No. Disculpa. -que chica tan mala onda.

Durante la clase trató de concentrarse lo más que pudo. Aveces se escuchaban risas entre la chica que tenía al frente y la del al lado. Parecía que eran conocidas quizás eran amigas.

-Bueno eso todo por hoy. Recuerden traer el libro para la clase. Esta tarde publicaré los informes y laboratorios que se harán durante el curso.

Recogió sus libros de la silla y salió del salón.

-Hey.-se escuchó la voz de un chico a sus espaldas.

Ella se detuvo un poco confundida.

-Soy César. Estuve en tu clase anterior.-explicó.

Todavía no entendía que quería con ella.

-¿En que te puedo ayudar?-preguntó con cierta curiosidad.

-Verás, mientras estuvimos en clase, pude notar que dibujas. -dijo.

¿Me estaba espiando en clases?-¿Quién era éste tipo?

-No vayas a pensar que soy un ligón. Soy también estudiante de arte y me gustaría que nos juntáramos para unos trabajos que tengo que hacer. Obviamente te pagaría por los trabajos cuando me paguen. No me malinterpretes, es que vi que tus dibujos son muy buenos. Tengo muchos trabajos y quiero cumplir con todos. Pensé que podías ser una opción.....

"Éste chico era lindo a su modo lástima que tuviera tantos tatuajes que asomaban por su camisa"

-¿Podemos hablar de esto luego? Llegaré retrasada a la clase de computadora y eso no sería bueno en un primer día.-rogué. No quería decirle que no de plano sin antes ver de que se trataba.

-Muy bien. -me dio una sonrisa amplia. -Antes de que te vayas, ¿como te llamas?-preguntó.

!Qué torpe! Sabía el nombre de él pero él no sabía el mío.

-Estrella De la Paz.-dije extendiendo mi mano.

-César Ramírez. -dijo extendiendo su mano a la vez.

-Nos veremos entonces. -eso había sido lo mas extraño que me había pasado aparte de cierto chico al cuál le había roto su computador. ¿Dónde estaría en estos momentos?

César en multimedia