Inocente Corazón Mío

Culpable

Franco...

-Pienso que se nos escapa de las manos recuperar a Sergio. -dijo melancólico Don Sergio ante la idea de que no poder acercarse a su hijo.

-Las cosas deben hacerse con calma padre. Quiero que te tranquilices. Si esto me hubiera sucedido quizás tampoco sabría que hacer.

-¿Qué tienes de esos delincuentes cibernéticos?cambió la conversación.

-No mucho pero tanto como para que Sergio no sea involucrado. Aún así, mi hermano ha hecho cosas que no están bien. Mucho me temo que si algo explota el tenga que pagar algún castigo.

-Pues lo sacaremos. -aseguró.

-Claro. Eso no esta en duda pero tampoco sabemos que cosas ha hecho. ¿A quién ha dañado? o peor aún, ¿a quién haya timado en el camino? Y tú sabes cómo somos en éste campo. -explicó preocupado.

Franco se paró de su escritorio y caminó hacia su padre con unos papeles en su mano. -Toma.-tendió los papeles hacía el.

-¿Qué es?-indagó antes de leer lo que Franco le había dado.

-Éste es el expediente de Sergio. Aquí encontraras toda su vida, todo lo que te perdiste de él.- aunque unos simples papeles no le devolverian a su hijo tan fácil.

Con manos temblorosas tomó aquello que le revelaba toda la vida de su hijo perdido.

-Mañana habrá una junta. Ya tienen un sospechoso y me temo que hablarán de Sergio. No te preocupes. ..-dijo asistiéndole a su padre cuándo perdió el equilibrio al escuchar aquellas palabras. -Ya tengo su defensa muy bien coartada. Esa mujerzuela y su padre saldrán despedidos mañana mismo.- mostró confianza en sus propias palabras aunque sintiera miedo.

-Eso espero hijo.

Sergio. ..

Sonó varias veces su móvil. Miró el teléfono pero no lo reconocía. ¿Contestaba? No podía negar que siempre tenía un presentimiento de que alguna vez algo no saliera como el esperaba. Aunque hasta ahora y salvo por el trabajo que hizo en la universidad todo habían sido trabajos limpios. Decidió contestar a quién tan insistentemente llamaba.

-Diga. -contestó a la defensiva.

-Sergio.

-¿Qué quieres? -preguntó con furia.

-Si por mi fuera jamás te hubiera llamado pero las circunstancias me han puesto en esta situación.

-No tenemos nada de qué hablar. Tu vida y la mía tienen caminos diferentes. ¿O no lo recuerdas? Amigo. -dijo sarcástico.

-No me cabe la menor duda que si no fuera importante lo que tengo que decirte nunca te hubiera marcado. -volvió a repetirle.

-A ver....¿qué quieres? ¿Acaso necesitas que te ayude en uno de los trabajos sucios que según tú, sé hacer?

-Sabes muy bien que lo que haces para ganarte la vida tampoco es un ejemplo. Así que está demás que pongas ese tema de conversación.

-¿Entonces qué quieres? Te pregunto por última vez.

-Quiero hablarte de Amanda.-soltó de golpe.

Se hizo un silencio prolongado.

-¿Qué quieres con ella?- "quizás se había enterado que ella lo había llamado y quería reclamarle"

-Quiero que la alejes de ti.-exigió en tono quedo.

Sergio soltó una carcajada. -¿Dices que la aleje de mi? ¿Tienes amnesia? -se burló.