Mi círculo vicioso (Completa)

Capítulo 1

Despierto gracias al sonido de mi alarma, son las 6:00 a.m.

Me desperezo en la cama y me levanto aun medio adormecida.

Busco en mi armario una toalla y me dirijo a ducharme con la esperanza que las gotas de agua caliente se lleven consigo los nervios y el estrés que siento. El agua entibiada cayéndome sobre la piel logran relajarme de una manera increíble. Mi primer día de clases en St. Marie es hoy, siendo este un colegio relativamente nuevo para mí, ya que solo hace dos semanas me he mudado con mamá dejando atrás nuestra antigua vida.

Bajo dando grandes zancadas hacia la cocina donde Carmen prepara el desayuno al ritmo de maroon 5. Mi madre es una mujer: Carismática, alegre, comprensiva, aun así, da miedo cuando se enoja. Literalmente es mejor huir de las garras de aquella mujer ogro disfrazada de una dulce madre.

— Buenos días cariño ¿Te sientes nerviosa?

— No mamá, bueno si, un poco, pero es solo hasta familiarizarme con todo no te preocupes ¿vale?

— ¡Si! Pero se te esta haciendo tarde ya. Siéntate a desayunar Noah

Me siento sin protestar, y me bebo de un solo trago el vaso de zumo que reposa sobre la mesa.

— Adiós mamá — le doy un beso en la mejilla y salgo de casa

— Suerte en tu primer día Noah

Entro en mi auto. Sí, tengo un coche Mercedes Benz, ya que mi padre nunca ha estado en el diario vivir de su hija a tratado de comprar mi cariño con regalos. Al contrario de mamá mi padre es una persona con demasiado dinero, es el dueño de uno de los bufets de abogados más prestigiado de Estados Unidos. Mi madre y yo gracias a un gran esfuerzo hemos logrado mudarnos a España, a empezar nuestras vidas de cero. No es que seamos pobres, tenemos un nivel de vida medio y me gusta mi vida así.

Conduzco escuchando "Be together" de Major Lazer, siendo esta una de mis canciones favoritas

No estoy segura cuantas veces repito la misma canción en el transcurso hasta llegar a St. Marie, pero definitivamente me encanta. Aparco en un lugar vacío y bajo con los nervios a flor de piel. Me vestí con un atuendo bastante normal a mi opinión, pero comparado al que traen estas chicas me siento una oruga a lado de miles de mariposas. Todas parecen modelos de revista con cuerpos de envidia, shorts y pequeñas blusas que dejan entrever su abdomen plano. Haciendo resaltar más sus curvas.

Yo al contrario me decidí a usar solo unos vaqueros y una sudadera. No sé si es por mi apariencia o porque narices todos se me quedan viendo. Recuerdo haberme dado un último vistazo en el auto y no haber encontrado nada extraño en mí rostro, pero aquí todos me miran como si tuviera tres ojos o dos bocas. Nerviosa camino a paso rápido hacia la dirección en busca de mi horario de clases

Llego hacia donde está la secretaria y con los nervios a flor de piel le hablo.

— Buenos días disculpe soy nueva y quisiera mi horario de clases

— Hola. Si, tú debes ser Noah Smith aquí tienes tu horario — dice tendiéndome una hoja de papel — salón B — menciona

— Gracias, hasta luego — me dirijo hacia mi primera clase. Literatura. Bien, esa asignatura me gusta, ahora solo depende del profesor.

Es la tercera vuelta que doy y no encuentro la jodida clase. Exasperada doy media vuelta hacia el despacho del director. Camino tan concentrada con la mirada pegada a la hoja de mí horario de clases que termino chocando contra un muro. Desorientada trato de tomar todas las hojas que salieron desparramadas. Un idiota camina igual de despistado que yo y pisa una de mis hojas, dejando marcada su huella en ella.

—Hey— me quejo

—No te vi

<<Obviamente no me viste idiota>>

No siquiera se toma la molestia de disculparse y su tono de voz es arrogante.

—Vale— respondo reprimiendo las ganas de mandarlo al infierno. No necesito hacer enemigos en mí primer día de clases. Toma la hoja que estaba pisando siendo esa mi horario de clases y le echa un vistazo antes de devolvérmelo.

—Vale, te ayudo— dice para ponerse a mi altura. Acabamos de recoger mis cosas y los dos nos levantamos del suelo. Me quedo embobada mirándolo es un chico bastante atractivo. Un Dios griego. Tiene el cabello castaño y todo hacia arriba, dándole un aspecto intimidante y desarreglado. Su estatura es de más o menos 1.95 y sus ojos son dos hermosas gemas grises, su tez es blanca y con unos labios carnosos que tientan a cualquiera junto a un cuerpo bien formado. Lleva puesto un jean ajustado, una camiseta negra y unas botas negras. En si toda su parada se basa en negro. De pronto empiezo a sentir nervios y siento un leve cosquilleo en todo mi cuerpo por su cercanía. Fijo mi mirada en sus ojos, y me pierdo en ellos.

<<¿Qué me pasa?>>

—Mi nombre es Noah y ¿el tuyo?

—Logán, también voy a la clase de literatura puedes venir conmigo si quieres

—Gracias

—La clase de literatura es bastante aburrida con el profesor Murffy

—Ok ¿En qué año estas?

—Último y ¿tú?

—Igual — digo ofreciendo una sonrisa

—Llegamos nena — habla mientras da media vuelta y empieza a marcharse

—¡Hey! ¿Por qué te marchas?— pregunto sin tomarle mucha importancia al que me diga <<nena>> aunque debo admitir que escucharlo decir eso, hizo que se me ericen los vellos.

—Solo quería conocerte mejor, mi clase es historia, nos vemos luego

—Adiós— un poco aturdida toco la puerta. Un viejo regordete me abre y me hace pasar diciendo que me siente a lado de una chica bastante guapa.

Es de tez blanca, rubia y con el cabello rizado. Ojos azules claros, muy bonitos en mi opinión, parece ser de estatura media.

Voy hacia donde me señala y la chica me regala una sonrisa que parece sincera. Me siento junto y sin pensarlo dos veces me presento con ella.

—Hola soy Noah ¿tú?

—Gabriela— dice en tono amigable — No eres de aquí ¿Verdad?, no te pareces en nada a las pijas comunes que hay en este colegio.

—No, acabo de mudarme con mi madre— respondo —y no conozco a nadie en este lugar

—Vale, si quieres vienes conmigo en el receso y te presento a mis amigos. Son muy majos

—Si, me encantaría. Es muy amable de tu parte— digo mientras le dedico una sonrisa

—No soy amable con todos, solo me... agradaste

Durante el resto de la clase, hablamos de trivialidades. Según Gaby el profesor de historia está bueno, y otros son demasiado amargados. Resulta ser muy graciosa. Me hablo sobre muchas personas y me advirtió de lo crueles que pueden llegar a ser los grupos de las plásticas como ellas las llama. Compartimos la mayoría de clases y en el transcurso me presento a algunos amigos suyos como Nick, bastante guapo siendo sincera ojos verdes, un cuerpo bien trabajado, Stefany, rubia, de ojos marrones y muy guapa aunque un poco baja de estatura, Theo y Liam son unos gemelos guapísimos, castaños, de ojos celestes aunque Theo tiene algo que lo hace más guapo que su gemelo. Todos son parte del equipo de fútbol americano, siendo Nick el capitán.

Sonando el timbre de salida caminé hacia mi coche acompañada de todos los chicos que conocí hoy, hablando de temas sin sentido y entre risas subo a mi auto despidiéndome de todos. Cuando llego a casa mama no sé encuentra. Voy hacia mi habitación y me dispongo hacer mis tareas, cuando acabo todo ya es tarde. Me pongo mi pijama y me recuesto repasando mentalmente como fue mi día. Poco a poco los parpados me pesan y me entrego a los brazos de Morfeo.