---Hiroki---
-¿Desde cuándo soy tuyo? –cruce los brazos.
-Desde que me besaste.
-¿Ah? Yo no te besé.
-Pero me aceptaste el beso.
-Tsss, -desvié mi mirada- idiota.
-Ahora tú y yo debemos recuperar el tiempo que no nos vimos.
Nos subimos a su auto y él manejo hasta su departamento.
Aun no logro entender el comportamiento de Tsumori, a decir verdad solo somos amigos del sexo, nada más que eso.
Aunque, ahora que recuerdo...
¿Nowaki estaba a punto de besarme?
No, creo que estoy pensando demás...
Pero estaba demasiado cerca, incluso pude sentir su aliento sobre mis labios.
¿Por qué tengo la sensación de que lo conozco?
Debo dejar de pensar en eso.
-Hiroki. –murmuro enojado Tsumori.
No me había dado cuenta que ya estábamos en su departamento.
-Quiero que cuando estés conmigo solo pienses en mí. –me tomo del mentón.
-Lo siento. –suspire.
Nos miramos a los ojos y lo bese apasionadamente mientras él metía su mano por debajo de mi camisa.
-A-Aquí no. –murmure.
-No sabes cuánto te deseo.
-Ahh, -gemí cuando mordió mi cuello- s-sabes que no me gusta hacerlo en el auto.
-Está bien, ya entendí.
Él bajo del auto y me cargo mientras entrabamos por la puerta, él me cargo y coloco mis piernas alrededor de su cintura y me comenzó a besar apasionadamente mientras acariciaba mi trasero, me aferre a su cuello y sentí como su miembro comenzaba a ponerse erecto.
Me aventó en la cama un poco bruco.
-Tsumori idiota, ¿no puedes ser más delicado?
Se colocó arriba de mí como si fuera un felino.
-¿Quieres que sea delicado? –tomo mi mano y la beso- quieres que te haga el amor tranquilamente, que en cada embestida te diga lo que siento por ti.
-B-Basta. –me sonroje.
-Me encanta verte así
-Baka.
Sonrió y me volvió a besar mientras empezaba a desabrochar mi pantalón.
-Ahhh, -gemí al sentir como comenzaba a acariciar mi miembro- T-Tsumori.
-¿Te gusta?
-N-No preguntes.
Se separó de mí y me quito la ropa de un tirón. Él también se quitó su ropa hasta quedar en bóxer.
-¿Por qué soy el único desnudo? –me sonroje.
-Porque me gusta admirarte, -beso mi cuello-porque eres simplemente perfecto.
Empezó a lamer mis pezones mientras tomaba mi miembro y comenzaba a masturbarme.
-Ahhhh T-Tsumori, no tan ahhh. –mordí mi labio.
-¿Te gusta? ¿Quieres que lo haga más fuerte?
-Ahh yo...
-O prefieres que lo haga con mi boca. –murmuro en mi oído.
Mordí mi labio fuertemente para no ceder.
-Supongo que interpretare tu silencio.
Bajo hasta mis piernas y comenzó a lamer mi miembro.
-Ahhh, T-Tsumori. –gemí fuertemente cuando metió de golpe dos de sus dedos- E-Espera.
-Resbalan muy rápido.
-Idiota. –me sonroje.
-Estás muy húmedo Hiroki, ¿tanto me extrañabas?
-S-Sí sigues así yo ahhhh.
-Lo siento Hiroki pero me hiciste enojar.
-¿Ah?
-Como ya dije, eres mío y solo yo puedo tocarte.
-ahhh.
Metió otro dedo y comenzó haciéndome sentirme extraño.
-M-Me vengo. –gemí.
-Hazlo, lo beberé todo.
Empezó a acelerar mi miembro chupándolo por completo, hasta que después de un rato me corrí en su boca.
-Ahora pasemos a lo mejor. –se relamió los labios y quito el bóxer.
-P-Ponte uno... -jadee señalando la mesa.
-Ah, -suspiro- ¿Cuándo se me hará hacértelo sin condón?
-Por favor.
-Está bien, podré esperar.
Él se colocó el condón y desvié mi mirada. Entró en mí de una embestida y yo me aferre a las cobijas.
-Ahh, T-Tsumori.
-Tan apretado como me gusta. –susurro en mi oído.
-N-No lo digas.
-Hiroki soy el único que puede hacerte gemir, que te puede dar todo el placer posible.
Tomo mis caderas y comenzó a moverse lentamente haciendo que no pudiera parar de gemir.
-N-No ahhh.
-¿Es aquí? –rio- Me alegra saber dónde son tus puntos buenos.
-Ahhhh m-más.
-Sabía que lo pedirías.
Comenzó a moverse un poco más fuerte mientras sus embestidas se hacían más profundas, me causa placer, pero no puedo admitirlo y más a este idiota.
Tener sexo con él es tan satisfactorio y placentero...
Después de un rato me sentó en sus piernas mirándonos de frente y volvió a embestirme.
Me aferre a sus hombros mientras comenzaba a moverse.
-Ahhh, t-tan profundo. –murmure.
-Eres honesto y eso me gusta. –me beso.
Abrace su cabeza cuando sus dientes empezaban a encajarse en mis hombros, sus embestidas era tan profundas, no podía controlar mis gemidos.
Él me beso y acaricio cada parte de mi cuerpo.
Sus manos tomaron mi miembro y comenzaron a masturbarlo.
-Muévete Hiroki, -susurro en mi oído- hazlo.
Como pude empecé a mover mis caderas haciendo que cada movimiento fuera tan excitante y placentero.
-Maldición Hiroki, me encantas.
-Ahhh T-Tsumori.
-Más, muévete más, apriétame.
Tomo mis caderas y comenzó a moverme de arriba hacia abajo.
-Ahhhh, m-me vengo.
-Hiroki. –me besó apasionadamente.
Me corrí en sus manos y él salió de mi interior quitándose el condón y corriéndose en todo mi cuerpo.
-Ahhh.
Tsumori se dejó caer sobre mí mientras me besaba.
-No estoy conforme.
-¿Eh?
-Déjame hacértelo en la ducha.
-Solo sí, -sonreí-me llevas hasta ahí.
-Será un placer.
---Shinobu---
Me beso, ese hombre me beso, pero él no es nada mío...
Peor aún...
No nos conocemos lo suficiente, no es mi amante.
¿Amante?
Siento como mi cara arde de solo pensar en esa palabra.
Mi corazón no quiere tranquilizarse, me siento tan ansioso, estoy tan avergonzado que no sé qué debo hacer.
En todo el día me quede pensando en lo que ocurrió con Miyagi, su beso sigue presente en mis labios y no puedo apartar esa sensación.
Aunque no fue mi primer beso, fue algo ¿especial?
Al terminar de cenar me fui a dormir ya que mi hermano acostumbra a salir tarde de trabajar y a veces solo llega a dormir, aun así le dejo la cena servida.
Al despertar me prepare para ir a la Universidad, me asome a la habitación de mi hermano y se encontraba dormido.
Tome mis cosas y me dirigí a la Universidad.
A decir verdad me empiezan a aburrir algunas clases, ya que me estoy volviendo experto con las materias y se me facilita mucho.
-Shinobu, -comento Erik- ¿vamos a tomar?
-Lo siento no puedo.
-Vamos, nunca tienes tiempo para nosotros. –hizo un puchero Claus.
-En verdad no puedo.
-Shinobu, -me abrazó Matías- por favor, seré tu amante eternamente.
-Idiota. –reí.
A pesar de todas sus insistencias, me negué absolutamente, ya que quería buscar un trabajo de medio tiempo para pasar el rato, casi no me gusta salir con las personas pero, trato de esforzarme, aunque hay veces que me harto...
Al terminar las clases camine hasta la puerta hasta que sentí unos brazos rodeándome.
-He llegado.
-¡SHINODA! –me sorprendí.
Me soltó y lo mire de frente.
-¿Cómo has estado?
-Bien, te extrañe tanto. –me sonroje.
-Y yo a ti mi niño.
Lo abrace y aspire su aroma.
"Es tan diferente al de Miyagi..."
¿Miyagi?
Pero qué diablos estoy pensando.
Debería olvidar ese tema.
-¿Ocurre algo mi niño?
-N-No para nada. –susurre.
-Es que estas muy rojo, -junto su frente con la mía- no tienes fiebre, que extraño.
-Waaaa, n-no es nada.
Él solo sonrió y caminamos hasta la casa.
Tenerlo a mi lado hace que mi corazón se aceleré, en verdad me gusta, lo quiero...
Entramos a la casa y deje mis cosas en el sofá, las maletas de Shinoda estaban aún lado de las escaleras.
-¿Shinobu?
-Sí...
Tomo mi mentón entre sus manos y acercó sus labios a los míos.
-Te quiero.
Sentí como me sonrojaba.
-Y-Yo también.
-Pero yo te quiero como hombre, te quiero para mí.
Junto nuestros labios.
"Tan diferente..."
---Nowaki---
AL CARAJO TODO...
MALDITO RUBIO DE PACOTILLA, COMO SE ATREVE A LLEVARSE A MI PRESA.
-Agggg, odio esto.
-¿Ahora tu que tienes? –pregunto Ryu.
-Un estúpido, un maldito rubio oxigenado se llevó a mi presa.
-Mmmm, por primera vez veo al gran "Casanova Kusama" ser rechazado por más de una vez por el mismo chico.
-Cállate. –gruñí.
-Creo que hay personas que no caen bajo tus encantos.
No puedo creerlo, no entiendo que tiene ese estúpido que no tenga yo...
-Relájate, que vas a perforar el piso.
-AL DIABLO CON EL PISO.
-Mmm, te afecto tanto ¿verdad?
-Esto no se quedará así, ese chico caerá por las buenas o por las malas.
-Suenas como un loco obsesionado.
-NECESITO DESESTRESARME, -gruñí- RYU PRESTAME TU TRASERO.
-Ni una mierda. –grito.
-Solo un momento.
-Que no.
-No te lo meteré fuertemente.
-VETE AL DIABLO. –se fue a su habitación.
"Maldición, Hiroki juro que no te me escaparás vivo..."
![](https://img.wattpad.com/cover/83874988-288-k188414.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Trampas de la Vida
FanfictionAlgunas veces se deben hacer cosas inimaginables para poder protegerse y ser feliz... Kamijou Hiroki un experto ladrón de joyas, que va de museo en museo recuperando el tesoro de su jefe Usami Akihiko, quien en un descuido obligo a Hiroki a trabajar...