Trampas de la Vida

CAPITULO 22 Nueva Misión.

---Ryu---

Realmente me quede sorprendido ante sus palabras, no logro procesar aun la información.

Debe ser coincidencia, esto no puede ser.

Pero... Kaoru me dijo que él me conocía.

"Seiya"

No puede ser cierto.

El Seiya que yo conozco está muerto.

Lo mataron...

Esto no es posible.

-Ryu, Ryu ¡!!Ryu!!!

Lo mire mientras él me sujetaba de los brazos.

-¿Eh?
-Estabas muy distraído, ¿estás bien?
-S-Sí, no es nada.
-Ryu...
-¿Cuál es el nombre completo de esa persona?
-¿De idiota de Seiya?
-Sí.
-Pues, Madarame Seiya.

"No es él"

Suspire profundamente y lo mire.

Pero... ¿Cómo me conoce?

Debo averiguarlo.

-¿Cómo es ese hombre?
-¡Qué más da!
-Por favor Kaoru, necesito saberlo.
-¿Lo conoces?
-Necesito que me lo describas.
-...
-Kaoru, por favor.
-Ah, -suspiro- ese hombre es peliazul de ojos de igual color.

Siento como mi corazón se acelera.

-¿Ryu?
-Dame un segundo.

Corrí hasta mi habitación y busque la foto que tenía de Seiya.

¿Dónde está?

-¿Qué sucede?
-Iré en un momento.

Busque por todo el lugar y encontré la foto.

-¡Aquí está!

Camine de vuelta a la sala donde Kaoru miraba todas las pinturas que tenía en la pared.

-Son hermosas.
-Las hizo mi ex. –admití.
-Hummm...
-No pienses mal, -lo mire- solo las conservo como un recuerdo.
-¿Lo amas?
-Kaoru, -le di un beso casto- solo te amo a ti.
-Disculpa mis celos absurdos, solo que nunca me había enamorado así, no quiero perderte.
-Estoy contigo, ¿no es así?
-Sí, -beso mi frente- ¿Qué buscabas?
-La foto.

Le di la foto y él gruñó.

-¿Qué haces con la foto de ese idiota?
-¿Huh?
-Este es Seiya.

Siento un dolor en mi pecho.

-E-Estas mintiendo ¿verdad?
-No tengo porque hacerlo.
-Lo haces, -lo sujete de la camisa- por favor dime la verdad.
-Ryu, -me limpio las lágrimas- ¿Por qué lloras?
-...
-Mi amor.
-P-por qué Seiya está muerto.
-¿Cómo?
-Él, -murmure señalando la foto- es mi ex novio, pero lo mataron hace años, él no puede estar vivo, no es verdad.
-¿Lo dices enserio?
-Sí.
-Ryu.
-¿Por qué dices todo esto? No entiendo nada.

Me sujeto de la mano y me hizo sentarme en el sofá.

-Me encontré con ese hombre y me dijo que te saludara de su parte.
-...
-Me dijo que paso algo importante y se tuvieron que separar, pero que en cuanto tú lo vieras todo cambiaría, él quiere que me separe de ti.
-Kaoru...
-Te amo Ryu, no quiero dejarte.
-Yo...
-Entenderé que empieces a dudar sobre tus sentimientos, él era tu primer amor y yo...
-No sé qué decir, solo que me siento confundido.

Él acaricio mi mejilla y sonrió.

-Tengo que verlo, yo debo preguntarle tantas cosas.
-Entiendo. –bajo su mirada.
-Pero eso no quiere decir que te dejaré de amor, -me sonroje- Kaoru te amo.
-Pero, -murmuro- también lo amas a él, ¿no es así?
-Él fue mi pasado, algo que olvide, algo que no creí pero... yo te amo a ti.

Kaoru me abrazo y me acurruco en su pecho.

No sé realmente que está pasando, ¿Por qué apareció?

No, esa no es la pregunta.

¿Por qué no me dijo que estaba vivo? ¿Por qué la mentira?

---Ishi---

Kyo salió de la casa diciendo que debía visitar a unas personas para arreglar algunos negocios pendientes.

Así que me pidió que me quedará en casa y lo esperara.

Pero esto es algo aburrido.

Sé que lo hace por mi bien, pero es solitario cuando no está.

Pero eso me pasa por no saber defenderme.

Luzco tan patético.

Tome mi celular y le llame a Kyo.

-¿Qué sucede amor?
-Kyo, yo...
-No puedes salir.
-Pero...
-Sé que es pesado para ti, pero entiéndeme un poco, no quiero que nada malo te pase.
-Entiendo.
-Mi amor.
-Kyo, ¿puedo invitar a un amigo?
-¿Eh?
-Él siempre ha estado conmigo, ya te he hablado de él, se llama Kaname.

Se escuchó un fuerte suspiro.

-Está bien.
-¿Estás molesto?
-Solo celoso, siempre hablas de ese chico, parece que le tienes afecto.
-Es como un hermano para mí.
-Quien sabe que piense él.
-¡Kyo!
-Ok, me calmo, -rio- llegare a la cena.
-¿Qué quieres que preparé?
-Quiero comer el postre.
-¿Postre?
-Tú.
-B-Baka. –me sonroje.
-Te amo Ishi.
-Y yo a ti.

Colgué y le mande un mensaje a mi amigo, además aprovecharía para realizar las actividades que me hacían falta.

Ya me falta poco para terminar la Universidad, estudio una carrera de administración.

Después de una hora el timbre sonó y camine hacía la puerta para abrir.

-Hola Ishi-kun.

  Él revolvió mi cabello.

-¿Cómo estás?
-Bien, por favor adelante.

Él entró y lo guíe al sofá.

-¿Quieres tomar algo?
-Una soda está bien.

Camine a la cocina y tome dos sodas, volví a la sala y le di una.

-Gracias, -sonrió- aquí traje los apuntes.
-Los pasaré enseguida. –comente y él negó con la cabeza.
-Son tuyos, los hice para ti.
-G-Gracias.
-Me alegro que estés bien, -comento- ¿terminaste con Erwin?
-S-Sí.
-Ya veo, ¿paso algo?
-Es una larga historia.
-Pues tengo todo el tiempo del mundo. –sonrió.
-Gracias por estar para mí.
-No dudes que así será. –acaricio mi mejilla- Te quiero proteger.

---Nowaki---

De nuevo Hiroki se marcha sin darme explicaciones.

No lo entiendo.

Pero...

¿En verdad tiene pareja?

Esto me está consternando mucho.

Mi Hiro-san, ¿casado?

No, no, y más no.

Él debe de estar bromeando.

Pero...

No entiendo lo que ocurre.

Seguramente me mintió, o mejor dicho solo bromeaba.

-Aggg, esto es insoportable.

Mi celular comenzó a sonar y respondí.

-¿Diga?
-Nowaki te quiero en mi oficina en este instante.
-Pero...
-Andando, ya le hable a Miyagi, pero no logro contactarme con Ryu, así que trae tu trasero en este instante.
-Ya te oí.

Colgué y me subí en mi auto.

-Seguramente nos va a mandar a realizar otro trabajo, yo pensé que tenía vacaciones.

Maneje hasta la oficina de Ijuuin y me estacione, vi a Miyagi fumando un cigarro afuera de su auto.

-Llegas tarde Nowaki.
-Te vez tan deplorable.
-Gracias por el cumplido.
-¿Qué te ocurrió?
-Digamos que soy tan idiota.
-Dime algo que no sepa.

Él me miro y suspiro.

-Lo he perdido.
-¿Huh?
-Fui un idiota y lastime a mi niño.
-Así que te enamoraste, yo pensé que solo bromeabas.
-Todo por mi tontería.
-¿Qué hiciste?
-No quiero hablar, mejor entremos.
-Como quieras.

Entramos hasta su oficina donde se encontraba limpiando sus manos, su camisa tenía algo de sangre.

-¿Torturando a alguien? –pregunte.
-Me conoces muy bien. –sonrió- Tengo una nueva misión para ustedes.
-¿Por qué no me sorprende?
-Bien, -nos pasó un folder- observen con atención.
-Es una joya. –comento Miyagi.
-Ya lo sé.
-¿Entonces? –pregunte.
-Está es la joya que van a robar esos ladrones.
-¿Enserio?
-Su objetivo es traerme la joya, no importa si tienen que herirlos o no.
-...
-Mañana a media noche en la casa de Jack Besalius.
-¿El riquillo quisquilloso?
-Así es.
-Entendido.
-Será un poco pesado porque hay muchos guardias, pero confió en sus habilidades.
-Que alago. –comento Miyagi.
-Sí cumplen con la misión les daré a cada uno 100,000 yenes.
-Nada mal.
-¿Y Ryu?
-Nosotros le diremos.
-Está bien.

Ijuuin solo miraba por la ventana.

-Está joya nos puede servir de mucho. –comento.
-¿Por?
-Ya lo sabrán a su tiempo, ahora pueden retirarse.

Salimos del lugar y decidí dar una vuelta en lo que Miyagi se encerraba en una cantina.

-Pobre...

Seguí caminando hasta que sentí como me sujetaban del brazo.

-A ti te buscaba.
-¿Huh?
-Kusama Nowaki, ¿cierto?
-¿Quién eres tú?
-Acaso, ¿no me recuerdas?

Lo mire fijamente.

-Usami Akihiko...
-Así es.

Este hombre es el que siempre estaba con mi castaño cuando lo conocí.

-Tengo que hablar contigo.

---Shinobu---

Me siento tan estúpido por todo lo que ocurrió.

Fui tan confiado, pensé que en verdad me amaba pero me equivoque.

Soy solo un estúpido mocoso.

No debería de ser tan confiado.

¿Qué voy a hacer?

Me deje llevar por sus palabras.

Solo quería acostarse conmigo.

Y lo consiguió.

Siento como unos brazos me rodean y me acurrucan.

-No llores más mi amor, prometo que te haré olvidar lo que te hizo.
-S-Shinoda...
-Déjame ayudarte, -susurro en mi oído- te juro que te voy a hacer feliz.

Siento como me besa en cuello.

¿Estará bien?

Ya no importa...