---Hiroki---
Por fuera la mansión no se ve tan grande pero, al entrar en verdad todo cambia, parece que el lugar no tiene fin.
Jack me empezó a explicar acerca de su familia mientras subía las escaleras para "tratar" mi tobillo torcido.
Me molesta que me carguen como si fuera una damisela, mejor dicho una estúpida princesa, me molesta, sino fuera porque necesito ganarme su confianza lo golpearía por llevarme así.
"Control Hiroki, necesitas la joya..."
Llegamos hasta una habitación con una gran cama.
"No me digas que tiene otras intenciones"
Me pegue a su cuello y él con delicadeza me coloco en la cama.
-Iré por un botiquín para vendarte tu pie, tal vez traiga una pomada.
-Gracias su alte...
-Solo dime Jack, -me beso la mano- me gusta cómo suena de tus labios.
-E-Está bien. –dije avergonzado.
Él acaricio mi mejilla y sonrió.
Salió de la habitación y me recosté en la cama.
No sé qué opinar acerca de Jack.
Parece que es tierno y amable pero siento que oculta algo en su mirada.
Aunque no logro sabes que es.
Me senté de nuevo en la cama y mire la habitación.
Suspire pesadamente al darme cuenta que no era la suya, sino la de invitados.
-Ah, el trabajo será más difícil.
-¿Lo dices por tu pie?
Me sorprendí al ver a entrar a Jack.
-Sí, soy como un secretario y ando de un lugar a otro y...
-Pues a partir de hoy tendrás que descansar un poco.
-¿Eh?
-No me gustaría que tu tobillo empeorara.
Él se acercó a mí y se sentó en un banco frente a mí, tomo mi pierna, lentamente me quito mi zapato y calcetín y comenzó a masajear mi pie.
Tuve que inventar que dolía y hacer expresiones de dolor, mientras él sobaba mi pie.
Aplico un ungüento en sus manos y siguió sobando.
-Ah, -gemí- duele un poco.
Jack me miro con un cierto brillo en los ojos.
-Eres hermoso Naoto.
-J-Jack...
-Sé que dirá que es una locura pero, -le dio un beso a mi pie- creo que me enamore de ti.
Me hice el sorprendido y me sonroje.
-J-Jack.
-No sé porque pero me encantas, siento que eres sincero y no eres como los idiotas que solo se acercan a mí por mi dinero.
-Nunca lo haría.
-Por eso digo que eres especial.
Me vendo mi pie y lentamente se fue acercando a mí hasta quedar encima y acorralarme en la cama.
-Jack...
-Eres hermoso.
Me miro a los ojos y acaricio mi mejilla.
-Tal parece que el destino nos unió Naoto.
-...
-¿Qué piensas?
Quería apartarlo pero no podía echar a perder todo el trabajo.
-Usted es...
-Solo dime Jack.
-Jack eres tan atractivo y siempre ha sido mi gran inspiración.
-¿Te gusto?
"Maldición ¿es enserio?"
-Naoto...
"Tendré que mentir... por la joya"
-S-Sí. –murmure.
Él sonrió y acerco su rostro al mío.
Sus labios rosaron los míos y lentamente coloco mis brazos alrededor de su cuello, él sonríe mientras comienza a besarme.
Al principio fue el beso tierno pero se volvió apasionado cuando se aferró a mi cuerpo con mucho cuidado de no lastimarme.
El sabor de sus labios con un toque de menta fue algo increíble, pero...
No el que esperaba.
No sé porque razón Nowaki apareció en mi mente.
Y a quien yo besaba era a ese peliazul.
Me aferre más a su cuello mientras que nos besábamos hasta quedarnos sin aliento, puedo sentir como sus manos acarician mis piernas y empezar a meter su mano debajo de mi camisa.
Al darme cuenta tome su muñeca y lo detuve.
-¿Naoto?
-J-Jack e-esto, vamos muy rápido.
-Pero...
-Yo creo que debemos ir con calma.
Él me acomodo un mechón de cabello y me dio un beso casto.
-Está bien, disculpa si te asuste.
-No es nada.
-Sabes, el fin de semana se hará una fiesta por mi cumpleaños y me gustaría que vinieras.
-S-Sí.
---Ishi---
Mi pecho duele, duele tanto...
Kyo me ama, él me lo ha dicho pero...
¿Kirishima dice la verdad?
-Deberías dejar a Ijuuin, -comento el castaño- yo puedo ponerte como mi prioridad.
-Eso no...
-Shizuku, déjame mostrarte un placer muy distinto.
Él me tomo del mentón y estaba a punto de besarme pero alguien le pego en la cabeza.
-Zen deja de molestar al chico.
-Tss, -chasqueo la lengua Zen- de nuevo molestando, ya te dije que no eres mi tipo.
-Ni quien quiera acostarse contigo, -se quejó ese peliazul- si estoy a tu lado es porque es mi trabajo idiota.
-...
-Me presento, -comento ese hombre- mi nombre es Yokozawa Takafumi y no le hagas caso a todo lo que te dijo este idiota.
-Te estás pasando Yokozawa.
-Como si me importará, -comento- ya te dije que solo cuido tu trasero, para eso me contrataste.
-Puedo despedirte.
-Adelante, por mi mejor.
-No eres nada lindo.
-Me alegro que te dieras cuenta.
-Me voy y no me sigas.
Ese castaño se marchó y el peliazul suspiro.
-A pesar de que no nos conocemos, yo conozco muy bien a Ijuuin y te juro que él ha olvidado a Misaki, él te ama, no le hagas caso a ese tonto, solo le gusta hacer caos.
-Pero...
-Confía en Kyo, en verdad, y si tienes dudas dile lo que piensas.
-Gracias Yokozawa-san.
-¡¡¡TAKAFUMI!!!
-Ah, -suspiro- me tengo que ir, cuídate.
-Espera, -comente- me gustaría hablar contigo después.
-Claro, -me dio su tarjeta- cualquier cosa puedes hablarme.
-Hai.
Él salió del departamento y yo me recosté en el sofá.
Ese hombre fue muy bueno conmigo.
Me siento más aliviado, creo que no debo dudar de Kyo.
Él me ha demostrado que me ama.
Así que no debo pensar en eso.
Tome mis libretas y comencé a estudiar para mis próximos exámenes.
Tal vez luego vaya a casa de Shinobu para estudiar lo que me hace falta.
Después de unas horas la puerta se abrió.
-Estoy en casa.
Me levante y salte a sus brazos.
-Me encanta este tipo de recibimiento.
-Kyo-san.
-¿Qué pasa?
-Te amo, te amo tanto.
-Y yo a ti Ishi, -me tomo del mentón- te amo más que a nadie en el mundo, eres mi vida entera.
---Ryu---
Me quede sorprendido ante sus palabras, no pensé que alguien quisiera lastimarme, que Seiya la pasara mal, pero creo que Nowaki fue quien más lo paso mal...
NOWAKI.
-Seiya.
-¿Qué pasa?
-Debes decirle a Nowaki.
-...
-ES TU HERMANO.
-Lo sé pero...
-Seiya él lo merece.
-Tienes razón.
-Le llamaré.
Él asintió y tome mi celular.
-¿Por fin aceptarás mi propuesta? –pregunto Nowaki.
-¿Ah?
-¿Me darás tu trasero?
-Muérete Nowaki, -gruñí- te enviare una dirección a tu celular y quiero que vengas ahora mismo.
-Tenemos nueva misión.
-Lo sé pero esto es importante.
-Ah, -suspiro-está bien, pero te costará tu virginidad.
-MALDITO....
Colgué y respire profundamente.
-Estará aquí en unos minutos.
-Te llevas bien con mi hermano ¿verdad?
-Es un fastidio.
-Parece que son grandes amigos y cercanos.
-¿Huh?
-Demasiado cercanos. –cruzo los brazos.
-¿Qué tratas de insinuar?
-Ryu
-...
-¿Te has acostado con mi hermano?
-¿Ah?
-Entonces ¿es un sí?
-Yo no tengo porque darte explicaciones.
-No entiendo porque lo hiciste, era mi...
-¡Basta! Te recuerdo que me dejaste y hago lo que yo quiero, además ahora tengo a mi lado a otra persona.
-Nuestro amor es más grande que nada, -tomo mis manos- no pudiste olvidarme.
-Lo siento pero ya no te amo.
-Ryu, -me tomo de la cintura- te demostrare.
-S-Suéltame.
-Aun te pongo nervioso.
-E-Eso no...
Me beso tiernamente y lo empuje.
-No lo hagas.
-Te amo Ryu.
Lo aparte y nos quedamos en silencio hasta que después de unos minutos Nowaki llego.
-¿Y para que me quieres? –pregunto.
-Nowaki...
-¡¡¡¡SEIYA!!!
---Shinobu---
Después de comer nos quedamos a ver una película, pero en todo el momento me quede mirando a Shinoda, no me había percatado de ello hasta que Shinoda sonrió y desvié mi mirada avergonzado.
-Sabes, -murmure- yo...
-¿Qué ocurre amor?
-Miyagi fue a buscarme.
Escuche como gruñía y respiro profundamente.
-¿Qué quería?
-Solo, decir más mentiras.
-Shinobu.
-Pero eso ya no importa.
-...
-Porque te tengo a ti. –comente avergonzado.
-Y yo prometo cuidarte, no dejare que ese idiota te haga daño.
Me acurruque más a su pecho y él beso mi frente.
-Lo siento.
-¿Cómo?
-Perdóname por lo que paso antes. –me miro.
-Shinoda yo...
-Lo siento.
-¿Estás arrepentido? –lo mire.
-No, -me miro- es algo que yo quería pero, tú, yo me aproveche de ti y...
Yo lo silencie al colocar mis labios en los suyos.
-No tengo nada que perdonar, por algo pasan las cosas.
-Te amo Shinobu, siempre lo haré.
-Gracias Shinoda, -lo bese de nuevo- yo también.
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Trampas de la Vida
Fiksi PenggemarAlgunas veces se deben hacer cosas inimaginables para poder protegerse y ser feliz... Kamijou Hiroki un experto ladrón de joyas, que va de museo en museo recuperando el tesoro de su jefe Usami Akihiko, quien en un descuido obligo a Hiroki a trabajar...