Trampas de la Vida

CAPITULO 31 Fiesta peligrosa. Parte II.

---Hiroki---

Tengo tantas ganas de golpear al idiota de Jack.

Por sus malditos acosos, sus perversiones.

Sin olvidar...

ESE IDIOTA ME DIO UN AFRODISIACO.

Maldito.

Quería propasarse conmigo.

Ese hijo de...

Agggg,

Ya quiero acabar con esta maldita misión.

Me arregle lo más provocativo posible para ir a la fiesta.

-Sí que pareces un chico cachondo.
-Mira Kaoru... ¿quieres que te golpee?
-Solo decía. –rio.
-Idiota.
-Entonces ¿vas a provocarlo?
-Le daré una cucharada de su propia medicina.
-Bueno pero ten cuidado. –me dio un frasco con una sustancia extraña.
-Le haré pagar lo que me hizo.
-Espero no te salga el tiro por la culata.
-No te preocupes, -comente- solo lo dejaré caliente encerrado en su habitación y tomare la joya.
-Entonces ¿no le darás placer?
-Idiota.
-Perdona, -se carcajeo- espero que todo te salga bien.
-Todo estará bien.
-Por favor Hiroki, si necesitas algo o estás en problemas no dudes en llamarme, iré por ti enseguida.
-Gracias Kaoru, eres como mi hermano.
-Lo mismo digo, debo protegerte como hermano mayor.
-Nos vemos mañana, es día de paga.
-Jeje, más aportaciones a mi agenda.

Me acomode mi peluca negra y salí a la puerta donde había un taxi esperándome.

Tenía ya varios mensajes de Jack preguntando en dónde estaba y si ya iba a llegar.

En verdad este tipo me desespera.

Le tuve que decir que llegaría en unos minutos aunque él seguía mandándome mensajes trate de sonar lo más tranquilo posible.

Al llegar a la mansión me di cuenta que varios carros comenzaron a llegar, le pague al taxista y me dirigí a la puerta.

-Nombre.
-Shiraiwa Naoto.
-Tú nombre no está.

Cruce mis brazos y lo mire ¿Ya vio el primero en la lista?

-... lo siento, por favor pase.
-Gracias.

Entre a la mansión y vi a muchas personas rodear a Jack.

Empecé a subir a su habitación y él me miro, le sonreí coquetamente y al llegar arriba corrí a la puerta.

Vi que tenía su vino y vacié el afrodisiaco.

No se lo daría ahora lo dejaría para el final.

Así que salí de la habitación y me recargue en la puerta.

-Mi hermoso chico.
-Hola. –sonreí.

Él se acercó a mí y me tomo de la cintura.

-Me alegro que llegaras, -me dio un beso casto- ¿Por qué no fuiste directamente conmigo?
-Pues... -saque una caja pequeña de mi saco- te compre esto.

Él la abrió y saco el reloj.

-Es hermoso, -se lo coloco- será mi favorito.

Beso mi mano y luego me dio un beso apasionado.

-Eres mío Naoto. –susurro en mi oído.
-Hai, tomoa ese regalo como un signo de compromiso. –susurre.
-En ese caso...

Bajamos hasta donde estaban todos y me presentó como su novio.

-Y como quiero que nadie se le acerque y marcarlo como mío, quiero que uses esto.

Él me coloco la joya que estaba esperando.

¿En verdad?

¿Así de sencillo?

De haberlo sabido...

Le hubiera regalado algo desde mucho antes.

Pero por fin la tengo.

Mire el collar con un rubí incrustado.

Es hermosa.

Con esta tengo una menos.

La música comenzó a sonar y vi como varias chicas invitaban a bailar a Jack.

Yo camine por el salón hasta que sentí como sujetaban mi mano.

-¿Me permites está pieza?

Lo mire y era un hombre castaño de ojos grises.

¿Por qué lo siento tan conocido?

---Yokozawa---

Después de una charla que tuve con Takano acepte lo que me había propuesto, de que él me contrataría como su secretario personal.

Así que presente mi renuncia en la agencia que a pesar de sus ruegos e imploraciones seguí con mi decisión.

Solo me pidieron que llevara mi renuncia ante Kirishima.

Me fastidia tener que verlo nuevamente.

Ya no puedo seguir a su lado.

Sentir como mi pecho se oprime cada vez que lo veo con alguien.

Esto tiene que terminar.

No puedo más.

Ya no puedo hacerlo.

Lo mejor es que cada quien tome sus caminos de nuevo.

Yo con mi familia y él con sus placeres.

Eso fue lo que siempre quiso.

Así que sin esperar más llegue hasta su oficina donde miraba algunos papeles y le aventé el folder con mi renuncia.

Él estaba perplejo, le explique de su nuevo agente y él quiso detenerme.

-Escúchame yo... -comenzó a decir.
-Suéltame idiota. –gruñí.
-No...

Me tomo de la cintura y me beso.

Intente apartarlo pero me sujeto con mucha fuerza más a parte mordió mi labio haciendo que jadeara y metió su lengua a mi boca y busco la mía con desesperación.

Mi mente estaba nublada, no sé qué decir o hacer, simplemente...

Deje que me besara.

Sentir sus labios después de tanto.

"Este será nuestro beso de despedida"

Al separarnos le di un golpe con fuerza tirándolo al piso.

-Infeliz, ahora no me voy a inmutar para hacerlo, ya no tengo que protegerte.
-Yokozawa...
-Me alegro tanto no ver tu cara nuevamente.

Él se levantó y volvió a tomar mi brazo.

-Te amo.

No entiendo porque motivo volvió a hacer latir mi corazón como cuando éramos pareja.

-Mientes.
-No lo hago, yo te amo.
-¡Ja! Kirishima no caigo con la misma mierda dos veces.
-Takafumi por favor...

Lo empuje y me dirigí a la puerta.

-Hasta nunca maldito casanovas.

Salí de su oficina y me subí al auto que me esperaba.

Él empezó a manejar hasta mi departamento y se estaciono.

-¿Terminaste?
-Sí Iokawa, he renunciado.
-Te vamos a extrañar. –beso mi mano.
-Gracias por estar apoyándome.
-Ese gilipollas no merece compasión, ni mucho menos saber de la pequeña Hiyori.
-Ella es mi hija, jamás sabrá de ella.
-Tranquilo, todo saldrá bien.
-Lo sé, tengo a Hiyo y a Sorata.
-¿Sorata?
-Es el gato que le regalo Takano a mi hija.
-Mmmm.
-¿Qué sucede?
-Sé que será apresurado pero...
-¿Qué ocurre?
-Me gustas Takafumi, estoy enamorado de ti. –se quitó las gafas.

Me miro fijamente y desvié mi mirada.

-Y-Yo no...

Él tomo me mentón y me obligó a mirarlo.

-Por favor considera mi propuesta ¿sí?

No sabía que decir, tengo tantas emociones atoradas en mi garganta.

-No sé qué decir, yo, no tengo mente para nada.
-No te preocupes, esperare todo el tiempo que quieras.
-Gracias.
-Perdón por esto.
-¿Eh?

Se acercó a mí y me dio un beso tierno.

-Lo siento, debía hacerlo.
-N-Nos vemos.

Baje del auto y me dirigí a mi departamento.

Supongo que debo pensar en olvidar ese amor y olvidarme de Kirishima, aunque sea mi primer y único amor, debo olvidarlo.

---Akihiko---

Maldita sea.

Siento mucha desesperación.

Necesito tener a Hiroki en mis manos.

Es solo mío.

Tengo que buscar la forma de asegurar que se quede conmigo.

Ya faltan menos joyas.

Pronto terminará esto.

Tengo que pensar en algo.

¿Secuestrarlo?

¿Amenazarlo?

Quisiera que se enamorará de mí.

Pero...

Si el idiota de Nowaki sigue vivo.

Eso será imposible.

Siempre aparece un nuevo estúpido tratando de quitármelo.

Si ese idiota del escritor no fuera tan reconocido.

Ya no existiría en este momento.

Así como ese Tsumori.

Llegue al bar y me encontré con "mi amigo"

-¿Llevas mucho tiempo esperándome?
-Algo. –bufo.
-Me alegro que aceptaras mi invitación.
-Lo que digas.

Siempre pienso que...

Debo tener cerca a mis enemigos.

Por eso...

-¿Y cómo has estado Ijuuin?
-Sinceramente, quiero que me digas para que me citaste.
-Solo quería tomar una copa con mi amigo.
-Claro amigos.
-Ijuuin deja de investigarme.
-¿Cómo?
-Sé muy bien por mis contactos que me estás investigando ¿Qué pretendes?

---Shinobu---

Kaname invito a bailar a Ishi y yo me quede tomando una bebida sin alcohol.

-Aburrido ¿cierto?
-Zero.
-¿Te imaginabas otro tipo de fiesta?
-Sí un poco.
-¿Quieres bailar?
-No sé bailar.
-Solo es un vals.
-...
-Te enseñare.

Me tomo de la cintura y me llevo en medio de la pista.

Comenzamos a balsear y él coloco una de sus manos en mi cintura.

-¿Ya hiciste las paces con tu hermano? –pregunte.
-Pues no, nunca esta, y es difícil encontrarlo.
-Ya veo...
-Shinobu.
-¿Huh?
-Siento que me quieren matar con la mirada.
-¿De qué hablas?
-Por esa persona. –señalo.

Me voltee lentamente y vi a Miyagi.