---Miyagi---
Tome a mi Shinobu entre mis brazos y lo cargue llevándolo a la cama donde lo recosté con mucha suavidad y ternura.
No soy de los tipos que se lo toma todo con calma pero...
Al saber que es mi Shinobu, quiero hacerlo sentir bien.
Quiero que sea algo hermoso su primera vez.
Nunca me había sentido así por alguien.
En verdad este chico me está cambiando por completo.
Lo acorrale en la cama y comencé a besarlo tiernamente hasta que se volvió más apasionado.
-M-Miyagi. –jadeo al separarnos.
-Prometo que no te lastimaré. –tome su mano y la bese.
Él se aferró a mi cuello mientras acariciaba su espalda.
-Shinobu, -reí- si me sujetas de esa forma no podré hacerte sentir bien.
-L-Lo siento. –se sonrojo.
"Mierda, en verdad quiero hacerlo con calma pero si Shinobu sigue con esas hermosas reacciones no podré contenerme..."
-No tienes nada de que disculparte.
Lentamente le fui quitando su chaleco y luego su camisa.
-Tienes una hermosa piel.
-...
Empecé a lamer su cuello y él cerró fuertemente sus ojos.
-No los cierres amor, quiero que me veas.
-Es vergonzoso.
-Es la prueba de nuestro amor.
-Baka.
Abrió los ojos y lo besé apasionadamente mientras acariciaba sus pezones.
-S-Se siente extraño. –susurro.
-Pues hoy experimentaras muchas sensaciones.
Comencé a lamer lentamente sus pezones, y su rostro era el más hermoso en la vida.
Estaba muy rojo y su respiración se volvía irregular.
-Ahhh M-Miyagi. –gimió haciéndome sentir tan excitado.
-Shinobu eso fue...
-YO.
-Tan hermoso y excitante, por favor, -sonreí- haz más ruidos así.
-P-Pervertido.
Lentamente le fui quitando su pantalón y su ropa interior.
-Apenas empecé y ya estás goteando. –murmuro.
-No lo digas. –se sonrojo.
-Eres hermoso Shinobu, mío, solo mío.
Tome su miembro y empecé a masturbarlo mientras seguí lamiendo sus pezones.
-Ahhhh n-no. –gimió.
-Tranquilo Shinobu.
Baje hasta sus piernas y comencé a lamer el miembro de mi niño.
-E-Eso no, -gimió- es...
-Todo de ti es perfecto, quiero probar cada parte de ti, quiero devorarte por completo.
Desvió su mirada de la vergüenza que tenía, me levante un momento y tome un frasco de aceite aromatizante que tenía guardado.
Lo vertí en su entrada y en mis manos.
-E-Está frío. –se estremeció.
-Tengo que prepararte adecuadamente.
Tome su miembro y lo metí a mi boca, con mucho cuidado fui metiendo uno de mis dedos.
-Ahhh M-Miyagi e-eso, no d-debes...
-Confía en mí, yo solo quiero hacerte sentir bien.
Metí un segundo dedo y lo moví en forma de tijeras mientras me aferraba a su miembro.
-A-Ahhh m-me v-vengo, M-Miyagi ya...
No me aparte y seguí engullendo su miembro hasta que se terminó corriendo en mi boca.
Trague todo su semen con gusto y metí un tercer dedo.
-E-Es tan raro. –jadeo.
"Maldición no aguanto más..."
Retire mis dedos y me quite la ropa.
Mi niño se sonrojo al notar mi gran erección.
-Voy a entrar. –comente.
-H-Hai.
Tome las piernas de mi niño y las coloque en ambos lados de mi cintura, lo agarre con delicadeza y entre de una embestida.
-Ahhh M-Miyagi d-duele. –jadeo.
-Shinobu, respira profundo y mírame a los ojos.
-N-No puedo.
Lo bese tiernamente mientras acariciaba sus pezones para distraerlo del dolor.
-Ahhh Miyagi.
Mi corazón se acelera de solo escucharlo, no puedo más.
Yo realmente lo amo, quiero monopolizarlo y que solo piense en mí.
-Shinobu, -lo mire a los ojos- te amo.
-Miyagi, -susurro con lágrimas en sus mejillas- soy tan feliz estando a tu lado.
Lo bese apasionadamente y comencé a moverme lentamente.
-¿De nuevo? –jadeo.
Pude ver que estaba de nuevo duro y tomo su miembro para masturbarlo.
-Ahhh, m-más. –jadeo después de unos minutos.
-¿Te gusta?
-Ahhh.
Tome su cintura y seguí embistiéndolo aumentando la velocidad.
-Estás muy estrecho.
-E-Eres mi primero. –susurro.
-Y seré tu último.
-S-Sí. –se sonrojo.
"Mierda, si él sigue así..."
-S-Sé puso más grande. –se sonrojo.
-Es por tu culpa.
-¿Eh?
-Así que toma la responsabilidad.
-M-Miyagi, estás sonrojado. –sonrió.
Aumente el ritmo de mis embestidas mientras él se aferraba a las sábanas.
-N-No tan...
-Te amo Shinobu y a partir de hoy te prohíbo que te separes de mí. –murmuro en su oído.
-Ahhh.
-Y te sacaré de esa casa, no quiero que estés cerca de Shinoda.
Él se aferró a mi espalda mientras seguía embistiéndolo.
-N-No puedo más. –jadeo.
Tome su miembro y lo masturbe hasta que se corrió y al sentir como se contraía fue tan delicioso que me corrí dentro suyo.
-Ahh, -me miro- t-tan cálido.
-Shinobu tu eres solo mío, ¿ok?
-S-Sí.
De un movimiento lo jale hacía encima de mí y lo acurruque en mi pecho.
Él se había quedado dormido y lo bese en la frente.
-No voy a permitir que te vayas de mi lado y juro que apartaré a Shinoda de tu lado, tú solo debes verme a mí.
---Ishi---
Me quede dormido en los brazos de Kyo después de habernos confesado, aun mi corazón sigue latiendo con fuerza de solo saber que Kyo me ama como yo a él.
Pensé por un momento que ese chico era su novio, pero ya veo que no es así.
-Te amo. –bese su mejilla.
Él solamente sonrió y siguió durmiendo.
Me levante y me di un baño.
Quiero prepararle algo delicioso a mi amado, así que revise el refrigerador e hice una lista de lo que necesitaba para preparar la comida.
Tome mis llaves y salí del departamento.
Al llegar a la plaza estaba a punto de entrar a una tienda cuando sentí que alguien me sujetaba del brazo.
-¿Eh?
-¿Dónde has estado y con quién? –gruñó.
-E-Erwin. –murmure.
-¿Quién era el gilipollas del teléfono?
-Eso a ti no te importa, -lo empuje- no me busques.
-Lo siento pero nadie se me escapa vivo.
Me sujeto fuertemente de la muñeca.
-Déjame ir.
-Lampad.
Sentí como me estremecí y voltee a ver a ese hombre que intentó abusar de mí. Me golpeó el estómago sacándome todo el aire.
-Q-Qué.
-Que niño más malo, -rio Lampad- espero ahora si tomarlo adecuadamente.
-Claro, pero después es solo mío. –comento Erwin.
Ambos me miraron y Erwin sonrió.
-Solo te entregarás una vez a él y ya te juro que seremos felices, nadie nos va a separar.
Quería gritar pero me faltaba el aire.
Erwin me cargo en su hombro y me llevo hasta un auto.
-Tranquilo mi amor, juro que lo disfrutaras.
-Y está vez, -susurro Lampad- te daré un afrodisiaco para que lo disfrutes.
"No puede ser, no puede ser..."
No puedo gritar, no puedo pedirle ayuda a nadie...
Kyo...
Sálvame.
Me aventaron al auto y Lampad me beso, sentí como algo pasaba por mi garganta.
-Nos vamos a divertir mucho. –sonrió mientras metía su mano debajo de mi camisa.
"Kyo, Kyo, si no es él no quiero a nadie más..."
---Hiroki---
Maldición, estoy huyendo de mis sentimientos.
Otra vez...
Yo realmente estoy confundido, lo que me dijo Akihiko y luego Nowaki.
¿A quién debo creerle?
Maldición no sé qué hacer...
Pero la sensación de haberme besado con Nowaki fue tan placentera, algo que desee tanto.
No se compara con los besos de Tsumori o de Reiga.
Es algo más especial.
Y hablando de Tsumori... ¿qué estará haciendo?
Supongo que fui un poco cruel con él pero...
Nuestra relación solo era de amigos con derechos, no podía pedir más.
Espero encuentre a alguien que lo quiera.
Mi celular comenzó a sonar.
-¿Sí?
-Te necesito Hiroki.
-Reiga, -suspire- estoy cerca, no tardo.
-Gracias.
-¿Pasa algo Reiga?
-Solo te necesito conmigo.
-¿Eh?
-Te lo diré cuando llegues.
-Claro.
Colgué y mi celular volvió a sonar.
-¿Diga?
-Hiroki.
-¿Akihiko?
-Por favor dime que no estás con ese idiota.
-Akihiko no estoy de humor.
-Espero le hayas dado su merecido.
-...
-Hiroki.
-Te puedo hacer una pregunta.
-Claro.
-¿Eres sincero conmigo?
-Siempre lo he sido.
-¿Seguro?
-Que sí, ¿Por qué lo dudas? ¿Ese idiota te dijo algo?
-No precisamente.
-Hiroki, yo no podría mentirte porque yo...
-¿Por qué tú qué?
-Eso es algo que no puedo decir por teléfono.
-...
-¿Podemos vernos?
-Será otro día.
-No es necesario. –comento- Te tengo.
Sentí como me abrazaba por la espalda y voltee.
-¿Akihiko?
-No pensé en encontrarte.
-¿Qué es eso que quieres decirme?
-Hiroki, -tomo mi mentón- te amo.
-¿Eh?
Coloco sus labios en los míos y me sujeto de la cintura.
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Trampas de la Vida
FanficAlgunas veces se deben hacer cosas inimaginables para poder protegerse y ser feliz... Kamijou Hiroki un experto ladrón de joyas, que va de museo en museo recuperando el tesoro de su jefe Usami Akihiko, quien en un descuido obligo a Hiroki a trabajar...