Trampas de la Vida

CAPITULO 34 Consecuencias.

---Akihiko---

Una copa más de coñac...

-MALDITA SEA. –avente la copa.

Hiroki me mandó un mensaje diciendo que vendría mañana para entregarme la joya.

Quería que viniera a verme.

Y aprovechar para recordarle mis sentimientos.

MALDICIÓN.

¿Por qué?

Sea lo que sea...

Hiroki será mío.

¿Por qué lo eligió a él?

¿Por qué Nowaki?

¿Qué le vio a ese tipo?

Pero no debería preocuparme...

¿No?

Ellos no están juntos.

Mi Hiroki no tiene a nadie.

Me encargue de eliminar a ese rubio.

Pero aún me falta ese escritor de mierda.

Se la pasa monopolizando el tiempo de mi amado.

Y eso ya no puedo permitirlo.

Es mío.

Solo yo puedo tenerlo.

Pero es un poco arriesgado intentar algo contra él.

Es un famoso escritor.

Maldición.

Debo de separarlo de mi castaño.

La puerta se abrió y ese tipo me miro.

-¿Qué haces aquí? –chasque la lengua.
-Solo he venido por el dinero.
-Ya está depositado a tu cuenta, -cruce los brazos- ahora lárgate.
-A veces eres tan impaciente.
-Y tú tan idiota.
-Te recuerdo que yo te he ayudado en todas tus estupideces.
-Porque quieres.
-En fin, tú sabrás lo que haces.
-Tss, eres molesto.
-Me iré, pero volveré pronto, tengo que estar al tanto de tu siguiente movimiento.
-Más te vale hacer todo lo que te encargue.
-No te preocupes, aunque, si me das el doble me encargaré de Nowaki.
-Jojo, interesante.
-O puedo acabar con el famoso escritor, pero eso será más caro.
-LO pensaré, yo prefiero acabar con ellos.
-Supongo.

Ese tipo se marchó y mire por la ventana.

A pesar que suena muy interesante...

Prefiero eliminarlos con mis propias manos.

Pronto Hiroki, solo te faltan 2 joyas y un papel importante.

Y tú serás solo mío...

---Kaoru---

Lleve a Hiroki a su casa.

Aunque necesito ver a Ryu.

El mensaje que me envió realmente me hizo sentir mal.

¿Ya no me ama?

¿Se cansó de mí?

No lo entiendo.

¿Por qué?

¿Por qué escribió esto?

Nosotros estábamos tan bien.

Y de un momento a otro él...

Deje a Hiroki y maneje hasta el departamento de Ryu.

Algo va mal aquí.

Eso de que él quiera estar con Seiya me es algo estúpido.

Ryu no se iría con él.

No sin explicarme.

Esto debe ser una tontería.

No puedo creerlo.

Tome mi celular y comencé a llamarle.

-Vamos Ryu, contéstame...

Él no responde.

No sé cuántas veces lo he llamado ya.

Ryu, mi amor... ¿dónde estás?

¿Por qué no sé nada de él?

¿Qué rayos está pasando?

El departamento de mi amado estaba cerrado, no lo tanto y con fuerza patee la puerta hasta derrumbarla.

-¡¡Ryu!!

Sé que es estúpido hacerlo, pero están todas las luces apagadas.

Me pasee por todas las habitaciones esperando encontrarlo.

Pero no...

No hay nadie.

Entre a su habitación y mire que había ropa regada en su cama.

Sin olvidar que faltaban algunas prendas.

El celular de Ryu estaba debajo de la cama.

¿Qué está pasando?

¿Por qué...?

Ryu... él...

MALDICIÓN...

-¡¡¡¡RYU!!!!

Me deje caer de rodillas y apreté con fuerza su celular.

Esto debe ser una estupidez.

No quiero pensar mal.

Algo que...

Él no me dejaría ¿o sí?

No puede.

Nos amamos...

Entonces...

¿Por qué me siento tan inseguro?

Maldición...


--Miyagi---

Un hijo...

Shinobu-chin va a tener un hijo mío...

Me siento tan feliz.

Mi amado...

Seremos padres.

Siento tanta dicha de solo pensar que nuestro bebé sea idéntico a él.

Es mi todo.

Aunque...

Ahora que lo medito un poco.

¿Cómo qué no sabe de quién es?

Eso quiere decir...

¿Tuvo algo con Shinoda?

¿Ellos se acostaron?

¿Por qué?

Shinobu me ama.

Él me lo decía varias veces.

¿Por qué?

Ese tipo seguramente lo obligó.

Ese hombre lo hizo.

Mi niño me ama.

Podremos ser felices.

Shinobu, nuestro bebé y yo.

Tengo que luchar por él.

Sé que me dice esas cosas porque sigue molesto por lo que paso.

Lo entiendo...

Pero es tiempo que ambos aclaremos los malos entendidos.

Que volvamos a estar juntos.

Tome las llaves de mi auto y me dirigí a la casa de ese desgraciado.

Debo de ir por mi amado Shinobu.

Demostrarle que estoy arrepentido y soy el indicado para estar a su lado.

Shinobu-chin te amo tanto.

Respire profundamente y salí del auto.

Mire la puerta y me acomode mi traje.

Golpee la puerta un par de veces.

Estoy un poco nervioso y ansioso.

No sé qué puedo decirle.

Hablamos hace unas horas pero no es suficiente.

Debo decirle todo lo que siento.

La puerta se abrió y suspire frustrado.

-¿Qué quieres aquí?
-Vine a buscar a Shinobu.
-Mi amado está descansando.
-¿Cuál amado?
-Mi pareja, -cruzo los brazos- es Shinobu.
-Shinobu es mío, además él...
-Se lo diré Miyagi, -salió de la casa y cerró la puerta- Shinobu es mi pareja, él me ama a mí, y ahora somos tan felices porque esperamos un bebé.
-¡Ese bebé es mío!
-Lo siento pero usted está en un error.
-Quiero hablar con Shinobu.
-No se acerque a él o no respondo.
-Tengo que estar con él.

Shinoda me tomo del cuello de mi camisa y gruño.

-Quiero que te alejes de Shinobu, créeme que si no lo haces me vas a conocer Miyagi y no te gustará lo que encontraras.
-¿Me estás amenazando?
-Posiblemente.
-Pues no me voy a rendir, -gruñí- voy a recuperar a Shinobu.
-No sé puede recuperar lo que nunca fue tuyo, lo que no apreciaste.

Camine hasta mi auto y me subí.

Tal vez tiene razón en parte pero...

Daré lo mejor de mí para recuperarlo.

---Nowaki---

Ese maldito pelinegro.

¿Cómo se atrevió a pegarme?

Maldición duele...

Ese chico...

Me voy a vengar de Naoto.

Juro que me las pagará.

Maldición.

Me quite mi disfraz y maneje hasta el departamento de Ryu.

No sé porque...

Pero me siento mejor cuando le cuento todo lo que pasa.

Es como si me liberara.

A pesar de molestarlo y hacerlo enojar.

Es mi mejor amigo.

Y lo apreció mucho.

Además en su tiempo hizo muy feliz a mi hermano.

Por eso le agradezco tanto.

Aunque ahora, aún sigo pensado que hubiera pasado si Seiya no se hubiera ido.

Si tan solo se hubiera quedado a mi lado.

¿Cómo sería mi vida en este momento?

Supongo que no sería un asesino.

Tal vez nos hubiéramos ido a otro país.

Otro estilo de vida.

Pero el hubiera no existe.

Al llegar me baje del auto y camine hasta su departamento.

Vi a un castaño sentado en el sofá.

-¿Quién eres tú? –gruñí.
-A ti que te importa, ¿Cómo has estado? –me miro.

"Oh, es el amigo de Hiroki, Asahina Kaoru..."

-Esté es el departamento de mi amigo.
-...
-¿Dónde está?
-No lo sé. –camino hacía la ventana.

Su semblante es vacío, solo mira el piso.

-Usted...
-Kaoru.
-Bueno, Kaoru, ¿Qué ocurre? ¿Dónde está Isaka?
-No lo sé.
-¿Ah?
-Solo me mandó un mensaje diciendo que se iría con su ex, que nunca dejo de amar a Seiya y quiere ser feliz con él.

¿Mi hermano?

¿Mensaje?

Pero Ryu siempre habla de frente...

Esto solo indica una cosa.

-No te preocupes lo traeré de vuelta.
-¿Cómo?

Salí corriendo del lugar y subí a mi auto.

Maldición, espero que sea Ryu el que dijera eso o juro que...

Tome mi celular y le marque a mi hermano.

-¿Nowaki?
-Sí, soy yo.
-¿A qué debo tu llamada?
-Dame la dirección de tu casa.
-¿Cómo?
-¿No puedo visitar a mi hermano?
-Claro que puedes pero...
-Bien, dame tu dirección.
-S-Supongo.

Él me mando la dirección de su departamento.

-¿Nowaki?
-Nos vemos.
-Pero...

Colgué y empecé a manejar a ese lugar.

---Kaname---

Me quede pensando en las palabras de Ishi.

¿Enamorado de Zero?

Eso no puede ser posible.

Bueno Zero no entra en mis gustos.

Él es...

¿Aburrido?

Además no se ve tierno como a mí me gustan.

Aunque es muy lindo.

Debo dejar de pensar en eso.

¿Huh?

Pensé que Zero se había ido.

Me acerque a él y me recargue en la pared.

-¿No te habías ido ya con el rubio?
-Lo siento, no creí que mi presencia te molestara.
-Yo no...
-Pero ya me iba, solo había olvidado mi abrigo con mi cartera.
-¿Quieres un aventón?
-No gracias, me esperan.
-¿Cómo?

Señalo a la puerta y pude ver a nuestro profesor de Administración, Yagari Toga sentado en una motocicleta.

-Pero que...