Stephen
Tome su cabello apartándolo de su rostro, puedo apostar que sus pesadillas eran sobre el.
No me miraba apenas me dejaba tocarla, entiendo que necesite su espacio pero me preocupa, apenas come y no hace más que dormir. Por más que me molestara la idea solo podía pedirle ayuda a una persona, y ese era Kian.
La deje recostada en la cama aún con temblores, pensar que alguna vez le hice daño me hace sentir miserable, queria remediar la situación, pero por más que lo intentara los recuerdos quedarían en su mente.
Tome las llaves del apartamento, Argos se acorruco a su lado mirándola atento, Carther apenas si lo miraba, estaba demasiado somnolienta como para acariciarlo.
-Anda chico déjala descanzar - lo tome bajandolo de la cama- tu y yo daremos un paseo después - le deje un poco de comida en su plato, en cuanto me aseguré de que Carther estuviera dormida Salí del apartamento.
Estaba tan cerca de descubrir al cabron, que sólo necesitaba encajar las piezas para tenerlo, la conversación con Max sólo hizo que mi miedo aumentará, no quiero perderla, no quiero que se vaya igual que mi madre.
Si tenía que pedirle ayuda a Kian, lo haría, no podía verle así y no hacer nada. Toque su puerta al parecer iba de salida, con su Bata de doctor, un maletín, mirándome con suficiencia.
El sabía perfectamente que podía darle todo lo que quisiera a Carther, yo solo podía golpear traseros para ganar dinero. Vaya trabajo.
-¿Que haces tú aquí?- cerro la puerta de su departamento y me miró extrañado- ¿le pasó algo a Carther?
-Por eso estoy aquí, créeme que no me agrada la idea, pero eres la única opción- comenzó a caminar hacia las escaleras.
-¿Aun está pálida?¿que color tiene?-
¿Como que aun?
-No hace más que dormir, ha vomitado toda la mañana y ni siquiera puedo acercarle un plato de comida - se detuvo en el pasillo mirándome un momento, ¿y a este que le pasa?.
-¿Vas a ayudarme o te vas a quedar ahí parado mirándome como idiota?- camine hasta la puerta y la abri, esperando a que pasará.
Fue directamente al cuarto, Carther seguía acorrucada entre las mantas, me acerqué a ella para despertarla. Parecía bastante sorprendida de ver a Kian aquí.
El chico se acercó a ella y me miró dejando su maletín sobre la cama.
-¿Que? Si piensas que voy a dejarte a solas para que la revises olvídalo - me crucé de brazos, Carther rodó los ojos suspirando.
-Preferiria que esperarás afuera, no te preocupes que soy profesional- sabia que este se iba a aprovechar se la situación, mirándolo a modo de advertencia sali de la habitación.
Estuve eternas horas esperando a que saliera ¿le estaba haciendo un exámen general o que demonios? ¿por que tardaba tanto? Luego de lo que para el fueron minutos me miró algo molesto o al menos eso parecía.
-¿y? ¿esta bien?-
-Si, no tiene nada del otro mundo - camino hasta la puerta dejándome en medio del pasillo.
-¿Y no piensas decirme que tiene?¿debo comprar algo? ¿alguna recomendación? -
-Habla con ella, cualquier cosa ella sabe donde encontrarme - imbécil...cerro la puerta dejándome con más dudas de las que ya tenía cuando llegó.
Abri la puerta entrando al cuarto, Carther parecía nerviosa, me acerqué a ella para sentarme a su lado, sólo esperaba que fuera algo que le cayó mal.
