Llegó el Oktober Fest y nos presentamos en la gran fiesta que daba el Bayern todos los años. Nosotros vestidos de bávaros y la niña con su pequeño vestidito y dos trenzas. Los fotógrafos nos hacían fotos mientras nosotros pasábamos al recinto.
-¡Qué niña más guapa por favor!-Dijo Lisa Müller al vernos-¡Y qué guapos estáis!
Nos reímos y les saludamos. La niña estaba apoyada en el hombro de Manu y se le cerraban los ojos de vez en cuando.
-Manu, cuando sea adolescente no sé qué vas a hacer porque va a ser un bellezón esa niña.
-Iré detrás y ahorcaré a cualquiera que se le acerque.
Me reí y le di en la mejilla.
-Es un celoso. Dejadlo.
Me miró y me besó. Luego nos dirigimos a nuestra mesa y nos sentamos en nuestros sitios donde habían cartelitos que ponían:
''Diana Neuer, Diana Neuer jr, Manuel Neuer''
Nos sentamos y la niña se despertó. No dejaba a su padre tranquilo, estaba abrazada a él todo el rato.
-Osita, ve con mamá un rato que ella también quiere estar contigo, mi amor. Anda.
La niña me miró y se abrazó a mi, yo la cogí y le besé el pelo. Le arreglé las trenzas y el vestido. Mientras miraba el ambiente sentí que Manu puso su mano en mi pierna.
-Te quiero Diana. Muchísimo.
-Yo también cariño-Le acaricié la cara.
Rafinha vino con su esposa y la niña al verlo gritó y se quiso abrazar a él. Él le hizo carantoñas y la mimó antes de devolvermela. Luego vinieron Mats y Jessica, iban monísimos .
Nos saludaron y luego saludaron a la niña.
A lo largo de la tarde Manu acabó con unas cuantas cervezas de más. Estaban todos hablando y bebiendo.
La niña dormía en mi regazo mientras yo hablaba con Jessica y Anna Lewandowska.
-¿Y cómo es ser madre? ¿Está bien? ¿O es mi estresante?-Dijo Jessica.
-Es maravilloso que una cosita tan pequeñita dependa de ti, pero a la par de maravilloso es algo agobiante. Ya sabéis.
-Pero es muy buena, o eso dice Manuel-Dijo Anna bebiendo de su cerveza.
-Lo es, lo es. Es muy padrera, va a ser niña de papi, lo veo venir. No se separa de él.
De repente Manu me sorprendio besandome la mejilla.
-¿Cómo están mis niñas? ¿Todo bien por aquí?
-Bien cariño. Aquí está tu hija durmiendo como siempre.
-Es como yo-Sonrió.
-Es como tú-Lo besé-No más cerveza Manuel.
-No tranquila, ya no más.
La niña se despertó y al verlo estiró sus brazos. Yo se la di y él la cogió.
-Hola dormilona, ¿Tienes hambre?
Se abrazó a su cuello.
-Hay tarta de chocolate y todo eso que engorda y está buenísimo, ¿Crees que podré darle a la niña un poco?
-Si es blando, sí, cielo.
Me besó y se la llevó.
El fin de semana siguiente hubo partido de liga, Bayern - Dortmund. Fuímos Jessica, Anna, Lisa, mi niña y yo. Llevábamos los dorsales de nuestros hombrecitos. Diana jr llevaba su pequeña equipación con ''Neuer 1'' a la espalda.
Los jugadores salieron a calentar y con ellos Manu. Seguía poniéndome a mil verlo con la equipación puesta. Miró a la grada y nos saludó. La niña al verló alzó los brazos e intentó llamar su atención. Él al verla sonrió y le lanzó un beso.
Después de verles entrenar volvieron dentro y rato después empezó el partido. Todo iba sobre ruedas y Manu hacía unos paradones de infarto. Las contras de los bávaros cada vez eran más efectivas y eso hizo que cayesen 2 goles de Lewandowski. Nosotras aplaudimos y gritamos animando al equipo, la niña nos imitaba.
Al acabar el partido Manu se acercó a las gradas.
-Hola reina, te ves tremenda así vestida...gracias por venir hoy.
-Tú igual-Le guiñé el ojo-Gracias a ti por demostrarnos que sigues siendo el mejor portero del mundo.
Nos besamos. Él cogió a la niña y se la llevo para saludar a los fans. Le beso la frente y alzó la mano, la niña le imitó. Los fans se rieron.
Bajamos a los vestuarios y Manu le enseñaba todo el Allianz a la niña. Cuando pasaron por el pasillo donde estaban las fotos de los jugadores la niña se quedó muda al ver la foto de su padre. Le miró y luego miró la foto.
-Soy yo mi vida, ¿Has visto?-Le beso la mejilla.
-Aaaaaaa-Dijo riéndose.
-Papá, exacto. Estoy deseando que hable, dios-Me miró.
-Poco a poco, cielo. Cuando menos te lo esperes estarás quejándote porque habla de más.
Nos reímos. Se acercó a mi y me besó. La niña se inclinó y nos besó a los dos por la mejilla.
-Le encanta unirse a los besos.
-Igual es celosa como uno que yo me sé...
Se rió y me besó, luego besó a la niña en su pequeña cabecita.