Corazones De Origami ©

Capítulo 30.

-¡Buenos días!-Grite levantandome y bostezando.

-Que ruidosa-Escuche.

Mire hacia donde me habían "saludado", Johny estaba encima de la cama de Camila. Me volví a recostar y me hice la dormida.

-Idiota, ya vi que estas despierta, no necesitas hacerte la dormida -Me dijo.

-¿Por que estas aquí? -Pregunte aún con los ojos cerrados como si estuviera durmiendo.

-Saray y Tomás salieron a hacer compras y me dijeron que no me podría ir hasta que regresaran.

-Ya veo-Dije entre suspiros.

-Y...¿estas bien?-Pregunto.

-Si, claro, estoy excelente- Respondí sarcásticamente.

-Ah...eso es bueno...

-¡Era sarcasmo imbécil! ¡¡¿¿Como esperas que este bien !!??-Grite -¡¿Quién estaría bien en mi lugar?!

-¿¡No lo sé!?.

Me levante de la cama y lo mire a los ojos.

-¿En realidad esperas que alguien este bien luego de haber sido brutalmente rechazada?

-No fue brutal...

-¡Callate!

-Bueno, ¿escuchaste lo que ayer discutíamos esos dos y yo?¿no?-Me dijo levantando los hombros.

Asentí.

-Bueno, te lo dije ayer y se lo dije a ellos... No es como si me gustaras y tampoco como si no me gustaras.

-Me sorprende lo difícil que es para ti definir tus sentimientos-Dije.

-¿Para ti no lo fue?.

Reí.

-¡Claro que no!-Grite-Tan solo al pensar en lo nerviosa que me ponía al estar cerca tuyo ya era suficiente para saber que me gustabas...¡No es tan complejo!

-E...Eh...ehhhhh

-Ni ehhhhh ni nada imbécil. No quiero seguir discutiendo con un imbécil.

-Pues que pena que este imbécil te guste ¿no?.

-¿¡A que te refieres!?.

-¿Dije algo incorrecto?-Me dijo sonriendo.

Negué.

-No te equivocaste...-Dije mirando hacia abajo avergonzada.

-Bien, ve a desayunar-Me dijo.

-¿Eh?

-Yo ya desayune ya que desperté primero.

Dije que sí con un nudo en la garganta.

Fui hacia el comedor y me serví una ración de huevos revueltos con pan.

Me quede sentada allí sin saber que hacer por un largo rato.

-¡Hola!-Gritaron Saray y Tomas entrando en la casa con bolsas.

-Hola.

-Vaya, Katherine, ya estas despierta-Me dijo Saray.

-¿Y Johny?¿hablaste con el?-Pregunto Tomas.

-Algo así...

-¿Ese desgraciado te dijo algo?-Dijo Saray apretando su puño.

Solté una risa nerviosa.

-Bueno, eso da igual. Mis padres y mis tíos ya llegaron, están afuera bajando sus cosas del auto-Me dijo Saray.

Entro su mamá. La ultima vez que la vi tenia una cara amargada y con el ceño fruncido. No fue una ocasión muy bonita. Luego entro su padre y sus tíos. Detrás suyo había un coche y un bebé en el.