Kennya: Cazadora de Lobos ©

Capítulo 36

"La cercanía de mi cuerpo a tu cuerpo es dividida solo por centímetros. No kilómetros. Te será difícil rechazarme. Seré tu ultima oportunidad para elegir  o tomar ese camino o esperar la muerte sólo"

—Que es lo que te angustia tanto mi amor. Dimelo odio verte asi tan ausente— Alekséi sujetaba a la chica de la cintura pegándola a su amplio pecho, quería sentir ese calor en su piel. Su aroma impregnandose en él.

Kennya suspiro, era reconfortante sentir esa piel contra la suya, podría morir ahí y jamas se cansaría de ese calor ni de ese aroma. Ella sujetó sus manos y sus brazos, queriendo ser lo mas fuerte posible.

—Creo que es mas que obvio lo que pasa Alekséi. No puedo sacar de mi mente lo que se nos viene encima. A veces me siento asustada— miraba la lluvia a traves de la ventaba. Aquella que había caído por dos días seguidos. El clima cada vez era mas extraño.

Las extensas planicies de bosque y vegetación eran iluminados con los intensos y poderos rayos que de vez en cuando los tomaban por sorpresa. La tormenta era fuerte.

La rodeo con esos brazos poderosos, beso su cuello y depósito besos tiernos en el mismo.

—Estas bajo mi protección. No soy cualquier lobo o alfa de manada. Lo sabes. No debes temer a nada. Yo voy a cuidarte jamas permitiré que te lastimen esos malditos.

—Temo mas por tu vida que por la mía. Esa noche, cuando te enfrentarse a tu padre. Simplemente, no pude resistir la idea de perderte. A veces, dudo de mi misma y de mi capacidad para proteger lo que mas amo en el mundo... A ti.

Alekséi la hizo girarse para mirar bien su rostro, este fue iluminado por un rayo blanco. Esa luz le daba un toque casi mágico a su apariencia, a veces no parecía una humana ordinaria.

Tal vez no lo era.

Después de que le contara sobre aquella visión, tenia sus dudas, pues algo así había escuchado de pequeño, cuentos que su amada madre le solía contar antes de irse a la cama.

Se quedo embelesado por su belleza tan única en ella, no podia creer cuanto la amaba. Con locura definitivamente.

—Te juro que ese infeliz pagara por haberse atrevido a querer lastimarte. No descansaré hasta matarle— kennya lo miro sorprendida, no sabía a ciencia cierta por que Nikolai Ivanov deseaba su cabeza. Hasta cierto punto podía con ello. Pero ¿y a Alekséi?¿Por que su propio hijo? Eso no lo entendía del todo.

—No me imagino lo difícil que debe ser todo esto para ti— lo miró con muchísima lástima.

—No voy a negar que es algo doloroso para mi. Pero hasta cierto punto no me afecta demasiado ya que no fuimos tan cercanos. De hecho siempre creí que el me odiaba y no sabía la razón pero  ahora con esto... Puedo confirmarlo y deseo saber el motivo. Kennya tú eres lo mas importante en mi vida, mi hermana ya no esta conmigo así que estoy solo. Por eso, cuidarte es lo mas importante ahora. Mantenerte con vida a mi lado—acarició su rostro con suavidad y recorrió con las puntas de sus dedos aquellos labios tan carnosos y del color a la cereza. Acerco los suyos y la beso con mucho amor y pasión.