Eres Mia Y Mi Destino ©

EPILOGO |Las tres propuestas

Christian Grey

1er. Propuesta de matrimonio: En lo alto del mundo.

Le he invitado a cenar en lo alto de la aguja espacial.  Estoy cagandome de los nervios y por todos los dioses...Patch no deja de llamar cada cinco segundos para saber si no he metido la pata.

No voy a meter la pata, bueno, no aún.

Por milesima vez ajusto mi corbata azul oscuro, los gemelos en cada manga, los platos, las copas y hasta los tenedores mientras ojeo el menú y el reloj cada vez que la manecilla avanza. Estoy trastornado.

Los minutos avanzan y ella me tienta al filo de la locura por su atraso. Un segundos depués, decidido a mantenerme sereno, a mantener la calma; ella aparece enfundada en un vestido estampado por encima de las rodillas de color ciruela. Esta estupenda, ardiente, follable, hermosa y puedo decir con seguridad que ser madre le sienta de maravilla.

Es hora Grey.

Espere por mas de un año para este momento y apenas hemos tenido tiempo libre entre los asuntos de Grey publishing y los rumores de que un escritor de nuestra editorial era un asesino fugitivo, las noches en vela por culpa de Theodore, los dias en que lo pase de pesadilla cuando Ana durmio unas semanas con su madre y hermanas y tuve que quedarme solo con Ted; lamento no haber aprendido como cambiar un pañal. Fue espantoso, una cosa salia de un lado y otras, muy apestosas...me estremezco de solo recordarlo.

Pero por fin, nuestra noche a llegado. Mi noche, el momento que he estado esperando para proponerle matrimonio.

Me pongo de pie y deslizo su silla para que se siente. Vuelvo a la mia y me sonrie.

-es precioso.

-¿jamás habias venido?

-nunca.

Es grato oir eso. La sorprendí. Es un hecho.

Ahora, la segunda fase de mi plan. Le hago la señal al chalet, la que hemos estado entrenando por una semana, y le indica a los musicos que toquen el repertorio que les escribí a mano en una hoja de papel.

Anastasia, curiosa, voltea hacia la pequeña orquesta.

-que bello suena- mira a su alrededor y arruga la nariz-pero, ¿donde esta la gente?

-solo seremos tu y yo esta noche.

-¿rentaste el lugar?-se remueve en el asiento y vuelca la mirada hacia el camarero como si quisiera o intenta ofrecerle una disculpa en mi nombre y dio por sentado que así era.-y pense que eso era imposible, pero ahora se que no incluye a Christian Grey.

-porque te amo soy capaz de muchas cosas- suelta un bufido como si mis palabras se trataran de una broma y luego tira de sus labios una sonrisa picarona.

-¿acaso me estas proponiendo algo?- se que lo sospecha, desde un principio con esa sonrisa soñadora por la que mataria cualquier galán.

Este es el momento cuando la tercera fase de mi plan comienza. Hago nuevamente la señal que indica que nos sirvan la cena, pero nisiquiera llega el plato a nuestra mesa cuando Teddy, con apenas un año, cumplido hace un mes, se acerca correteando a nosotros.

-¡esta caminando!-Ana grita con asombro.

-¡esta caminando!-repito-Pero, ¿como llego aquí?

Teddy busca a mamá y extiende sus brazos. Ella lo carga con gusto.

-eso es nuestra culpa- Anel y Mia levantan la mano apareciendo sin invitación y se observan con complicidad al vernos. Al ver mi estupida expresión de desconcierto, emoción y negación.