EN BUSCA DE MI ESCLAVA DE SANGRE (2ª PARTE DE "ESCLAVA DE SANGRE")

TE EQUIVOCAS

Susurros me despertaron de mi fuerte sueño. Abrí los ojos poco a poco para que la luz no me molestara.

Derek estaba en la puerta de mi habitación hablando con un hombre.

-Derek -le llamé débilmente. Se volvió a mí y se acercó.

-Por fin has despertado -me ayudó a acomodarme- ¿Te duele?

-No. La verdad es que no -vislumbré mi vientre desnudo. Ya no tení nada- Gracias.

-Si -se levantó y se peinó delante de mi espejo.

-¿Cómo has entrado en mi casa?

-Tus llaves -se abrochó bien su chaqueta. Me dí cuenta en ese momento que no llevaba la misma ropa que cuando me salvó de Vector.

-Llevo dormida más de una noche, ¿verdad?

-Seis meses -me respondió tranquilo.

-¿¡Qué!? -chillé asustada.

-Es broma -soltó una carcajada, pero se calló de repente- Sólo dos días.

-Qué susto -suspiré- Oh, mierda -me levanté y busqué en mi bolso que estaba sobre mi escritorio- No, no... -me puse la mano en la frente- ¿Dónde he dejado mi móvil? -me pregunté a mi misma.

-Lo tengo yo -me lo pasó Derek sin vergüenza alguna.

-Ehh... -lo cogí de su mano tendida sin saber como reaccionar ante aquello- ¿Se puede saber por qué tienes tú mi móvil?

-La razón no importa -se sentó sobre mi escritorio.

-¿Perdona? Es MI móvil, y no entiendo por qué lo tienes que tener tu. Explícamelo -me cruzé de brazos.

-No he conocido a chica tan molesta como tu -se alejó de mí.

-Si tanto te molesto, ¿para qué me salvas? -resopló- Espera, adivino. No le lo vas a decir como no lo has hecho las otras veces que me has salvado. ¿Sabes qué? Me has hundido la vida. Todo iba perfecto hasta que tu apareciste. Sería mejor que volvieras con tu... -sus labios me hicieron callar.

-Te equivocas. Esta vez si te voy a decir que te he salvado porque te deseo -cerró la puerta y me echó sobre la cama quedando a si exposición- Y te voy a demostrar cuanto lo hago -me arrancó la ropa y me penetró todo lo fuerte que pudo.

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Estoy pensando en escribir una nueva novela (no tiene ninguna relación con esta). ¿Debería hacerlo?
Leed mi historia "en manos de Lucifer".