Capítulo VIII. El pequeño novato.

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— ¿Seguro que fue un accidente o tal vez alguien te besó y te mordió tan fuerte, mmh?. —relamio sus labios, mientras miraba los ajenos —

— F-Fue. . . Un accidente —susurró al sentir como el corazón se le iba a salir, al estar sólo unos centímetros escasos de los labios ajenos —

Sus miradas se conectaron, como siempre, la mirada de Sehun era como la de un depredador, un lobo acorralando a un indefenso cordero. . . Bueno, no tan indefenso.

— le metió una patada en la rodilla — atrás, pervertido.

— el contrario ahogo un grito mordiendose los labios, para después chasquear la lengua y alejarse de esta — eres odiosa, fea y mal educada, nunca besaría a alguien como tu, eso sería caer tan bajo.

— Ajá, tan bajo, pues fíjate que tampoco besaría a alguien como tu, besaría mil veces a un perro que a ti.

— comenzó a reír de una manera extraña e escalofriante, para después fijar su mirada al rostro de la menor — tu ni siquiera has besado a alguien de seguro.

— ¡¿Q-que mi-mierdas dices?! Y-yo he besado a muchos chicos y sin duda besan mejor que tu. —dijo en un tono un tanto nervioso para después desviar la mirada cruzandose se brazos —

— Ajá, claro.

— Ash, sólo déjame en paz.

Se dio la media vuelta y entró a su habitación dándole un cerrón a la puerta.

"Tks. . . Ese maldito Thethuneo culón, a él que le interesa si he besado a alguien o no".

Era mentira todo eso, nunca había besado a nadie, muy apenas recibía besos de su madre en la mejilla, pero de ahí para acá, ninguno de cualquier clase de tipo de besos.

Realmente nunca le había interesado besar a alguien, ella pensaba dar su primer beso con la persona que estaría el resto de su vida, muy anticuada la mujer, pero quería el su primer beso fuera en donde hubiera amor por ambas parte.

Como siempre, la noche pasó rápido, y todos estaban en el comedor desayunando como lo hacían normalmente. Jun parecía aún más allá en el mundo de los sueños que en el real y se dieron cuenta de eso al ver que al café le había echado sal en vez de azúcar y se lo tomaba como si nada, y también se dieron cuénta, cuando por accidente a JunMyeon se le resbaló un pedazo de fruta hacia la cara de esta y esta no hizo nada al respecto.

— ¡Buenos di. . .! ¡¿Que te paso en el labio?!

Baekhyun corrió al lado de la menor, tomandola de los hombros comenzando a estrujarla, esta pareció al fin despertar.

— Uh. . . A nada con importancia Baek — bostezo —

— ¿Estás bien? Pareces un zombi ¿no dormiste bien? —cuestionó un poco preocupado —

— Es que estudie por la noche.

Mintió, realmente no pudo dormir, pues tuvo toda la noche, el tema de su primer beso la pobre tonta.

Baekhyun no le creyó, pero aún así fingió hacerlo, la tomo de la mano y la llevó hacia su coche para así poderse ir a la escuela.

Al estar a dentro de este, Jun no pudo evitar mirarlo de reojo, pero realmente sólo miro sus labios, eran tan rosados y húmedos, provocaban que sintiera un enjambre en su estómago de mariposas, o tal vez eran las lombrices que tenía al no haberse disparasitado antes de llegar a la ciudad.

— ¿Ocurre algo? —cuestionó con una leve sonrisa en su rostro, al percatarse que la menor lo estaba mirando —

— A-Ah y-yo — trago saliva un tanto nerviosa y sonrojada, para mirar hacia la ventana y después sacudir la cabeza — no es nada. . . —susurró —

Roommate House. » EXO «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora