SM Trainee Camp {EXO & RedVelvet}

~34~

La mayoría de los trainees se encontraban dentro de un estudio anticipando la competencia de baile de sus monitores. Todos estaban en medio del lugar junto a sus parejas. Cuando los trainees estuvieron sentados o de pie en un puesto exacto y con sus atenciones en ellos, los monitores los saludaron. Elegirían el orden de las parejas a través de un juego de piedra, papel o tijeras.

Después de jugarlo varias veces, la orden estaba establecida: Xiumin-Yerim, Sehun-Yoojung, Jongin-Irene, Chen-Wendy, Baekhyun-Joy, y por último Yixing-Seulgi.

La primera pareja se puso en posición en lo que las demás se apartaron del centro. Todos incluso habían notado que llevaban prendas de ropa a juego, lo que lo hacía gracioso e interesante.

Cuando terminaron Xiumin le dio un abrazo a Yerim en señal de haber hecho un buen trabajo mientras todos les aplaudían. Él estaba bastante a gusto; Yerim era muy buena aprendiendo coreografías y además se esforzaba al máximo por las cosas. Xiumin, por curiosidad, echó un vistazo por el estudio hasta encontrar al chico que estaba loco por su pareja, y lo vio apretando los labios y con una expresión que mostraba lo descontento que estaba. El mayor rió de camino a sus compañeros para sentarse y así que Sehun y Yoojung mostraran su baile.

Todos gritaron y aplaudieron por el baile y Sehun caminó a su lugar abrazando a su pareja por los hombros. Jongin e Irene eran los siguientes, y al Sehun pasar junto a Jongin, le susurró:

─¿Cómo te quedas?

─Admito que lo ha hecho genial ─respondió de la misma forma y siguió su camino junto a Irene.

Sehun se sintió más que satisfecho con esa respuesta. Tenía que mostrarle que Yoojung no era mala bailando, ya que todo con esfuerzo y dedicación se hacía bien. Sehun y Yoojung se sentaron juntos y observaron a la siguiente pareja.

─¿Soy yo o Jongin está demasiado serio? ─Seulgi le habló a Wendy en voz baja mientras los observaba.

─Desde que cruzó esa puerta me di cuenta que no estaba de humor ─respondió la otra chica.

Las dos se callaron cuando Irene se acercó a ellas para sentarse y Jongin la seguía. Al contrario del chico, Irene tenía una sonrisa en el rostro.

─¿Qué le pasa? ─Seulgi le preguntó a su prima y esta rió un poco.

─Te cuento luego ─la menor asintió─. ¿Cómo estuve? ─le preguntó a Jongin con una sonrisa burlona. La respuesta del chico fueron dos pulgares en alto sin siquiera mirarla, y ella hizo una mueca─. Tonto ─murmuró y Seulgi pudo escucharlo, lo que provocó que su curiosidad aumentara.